Primer día de O Son do Camiño: jornada en dos tiempos y estilos

O Son do Camiño ya está totalmente en marcha. Ha comenzado este jueves con una jornada marcada por el contraste de estilos musicales. Del indie y el pop a la electrónica con apenas minutos de diferencia. Y, por como ha interactuado el público, Bastille y Die Antwoord han sido los grandes triunfadores de la noche.

El día comenzó con bandas como Kitai desmintiendo eso de que las primeras actuaciones son de relleno. Demostraron fuerza y poderío sobre el escenario Estrella Galicia, el más grande. Pese a que era una hora muy temprana, esta formación se ganó a un par de cientos de personas que se agolpaban contra primera fila. Para la historia del festival queda el momento en el que el batería decidió tocar sobre el público.

La tarde fue transcurriendo y llegaron Graveyard, la formación más rockera del día. Su hard rock gustó a un público más veterano, que llenó las primeras filas del escenario Galicia, el pequeño. Solos eternos de guitarra y riffs pegadizos fueron su seña de identidad.

Llegaba uno de los platos fuertes del día. Bastille consiguió llenar el escenario Estrella Galicia. Miles de asistentes disfrutaron de éxitos como Happier, Pompeii o Good Grief. El cielo estaba despejado, atardecía lentamente y sobre el escenario un espectáculo de animaciones en vídeo y una mezcla de instrumentos conquistaron a gran parte de los asistentes.

Del pop a la electrónica

Llegó Beret, antes del cambio radical. El sevillano también congregó a bastantes fans, sobre todo femeninas, que no dejaron de cantar sus canciones. Fue el fin de un género más popero y el comienzo de la electrónica lo impusieron por las bravas los sudafricanos Die Antwoord. Este dúo arrasó a su paso por el escenario principal. Irreverentes y provocadores, temas como Baby’s on fire fueron recibidos con júbilo por parte de un anfiteatro que no dejó de saltar ni un solo momento.

Después llegaron The Zombie Kids y Dimitri Vegas & Like Mike, apuestas más puramente electrónicas del festival. Un fin de fiesta para el recuerdo y que solo el intenso frío pudo apaciguar. El Son do Camiño ya está aquí, y ha comenzado muy fuerte.