El inmueble de la calle Olmos de A Coruña con murales de Urbano Lugrís.

El inmueble de la calle Olmos de A Coruña con murales de Urbano Lugrís. Quincemil

Cultura

Denunciada la "inactividad" sobre los murales de Lugrís de A Coruña ante la Valedora do Pobo

Miembros de la asociación denuncian que la situación actual de esta obras "está a causar graves danos no patrimonio cultural de Galicia"

12 junio, 2023 10:12

La asociación cultural O Mural ha llevado ante la Valedora do Pobo la "inactividad" del Concello de A Coruña frente a la "alarmante" situación de los murales de Lugrís en la calle Olmos de la ciudad herculina. Concretamente han presentado una queja sobre la "dejadez" del gobierno local coruñés en cuanto a la protección de estas obras, en mal estado debido a las malas condiciones del lugar donde se encuentran desde hace años, afectadas por la humedad, entre otros factores, en un edificio ruinoso.

"Malia a situación crítica na que se atopa o edificio, consonte o informe do propio arquitecto municipal; a necesidade dunha intervención urxente para restaurar os murais, tal e como aconsellou ó Concello a restauradora á que encomendou o estudo dos frescos; e o reiterado incumprimento da propietaria do edificio aos requirimentos municipais; a administración local aínda non exerceu a súa facultade de execución das obras precisas para asegurar a estabilidade do edificio e a conservación dos murais", denuncian.

En el documento exponen que, tanto la propietaria del inmueble, en concurso de acreedores, como la asociación O Mural, tras comprobar todos los requisitos normativos, solicitaron al Concello de A Coruña que comenzara las obras necesarias "para evitar que se agraven os xa importantes danos que están a sufrir os frescos abandonados polos seus propietarios nunha casa cun deplorábel estado de conservación que ameaza ruína".

En esta línea, sostienen que casi tres meses después de que la asociación solicitara que el Concello asumiera las obras y ante la "inactividad" de la administración, "a asociación solicitou a intervención da Valedora do Pobo para que a alcaldesa xustifique a súa actitude, que está a causar graves danos no patrimonio cultural de Galicia", sentencian.

Pregunta del BNG sobre las medidas de protección

La responsable de Cultura del grupo parlamentario do BNG e concelleira nacionalista electa, Mercedes Queixas, dirigirá una pregunta oral al conselleiro, Román Rodríguez, en el pleno del próximo miércoles en el que se tratará el asunto de los murales de Lugrís.

"Que medidas de protección vai activar o goberno da Xunta co conxunto muralístico de Urbano Lugrís, situados no entresollado dun edificio en ruínas na coruñesa Rúa Olmos, 25-27, á vista do severo risco de desaparición?", trasladará la parlamentaria nacionalista. En la exposición de motivos, Queixas destaca que la integridad de los murales "sofre un serio risco tal é como mesmo puxo de manifesto a inspección do interior do edificio da Rúa Olmos realizada por técnicos do Concello o 21 de xaneiro de 2023″.

"O devandito informe confirma a afectación dos murais provocada por varias entradas de auga, nomeadamente a que se produce polo lucernario da escaleira situada no inmóbel, e a apertura de fendas reabertas no gran mural que preside a arcada, o que compromete a súa conservación", alega Queixas. Pese al estado ruinoso del inmueble donde se encuentran las obras, el BNG ha instado a la Xunta (en una pregunta oral dirigida por la propia Queixas a la directora xeral de Patrimonio Cultural) a que incoase el expediente para otorgar la consideración de Bien de Interés Cultural a los murales del pintor.

La respuesta de la directora, fue calificada por el BNG como "decepcionante", ya que la profesional consideró que los murales de la calle Olmos cuentan con "suficiente" protección. "Non partillamos ese punto de vista en absoluto. O informe dos técnicos municipais é moi claro. A obra muralística de Urbano Lugrís, toda ela, ten que ser declarada BIC", concluye.

In Nave Civitas reivindica el "lugrismo"

El colectivo ha llamado la atención de nuevo hace unas semanas sobre su reivindicación de "intervención inmediata del Concello y Xunta para la protección y rescate de los frescos" que se encuentran en el inmueble y han criticado que desde junio de 2021, "o Concello de A Coruña aínda non adoptou ningunha medida efectiva para evitar o empeoramento do estado dos murais". 

"Dende que a asociación cultural O Mural solicitara da Xunta a declaración dos murais como Ben de Interese Cultural, en decembro de 2022, a Dirección Xeral de Patrimonio Cultural aínda non foi quen nin de incoar o expediente", explican. En este contexto, el gobierno local coruñés ha impulsado hace semanas la declaración como BIC de las obras situadas en las paredes del antiguo restaurante Fornos, con la intención de aumentar su nivel de protección, que actualmente ya están catalogadas, pero con el máximo nivel de protección que otorga la declaración como BIC.

La alcaldesa, Inés Rey, apuntó que los murales "son recuperables" y confirmó que han requerido a la propiedad que acometa la restauración, que conlleva un coste de 90.000 euros aproximadamente. "Damos por hecho que sino lo hacen, lo haremos nosotros", aseguró.

Oxidados, con grietas y amarillentos: Así es el estado de los murales de Lugrís de A Coruña

Oxidación, grietas, una capa amarillenta, humedad, acidificación, roturas, presencia de escamas o lagunas son algunas de las consecuencias del uso del inmueble donde están los murales como establecimiento hostelero durante 60 años (primero el restaurante Fornos, posteriormente La Bottega y finalmente Brasa y Vino) y por las condiciones en las que se encuentra desde su cierre, con un elevado grado de humedad.

Un informe municipal de hace unos meses hizo un primer acercamiento a su estado de conservación y se detalló que de los 12 murales, uno tiene estado supercrítico, 2 están críticos, 2 en estado pésimo o muy malo y 7 en regular o malo. En el informe encargado por el ayuntamiento, en el apartado del estado de conservación, se expone que tras una visita en 2017 a los murales, las patologías presentes "se han agravado y acentuado", todo ello relacionado sobre todo con las condiciones termo-higrométricas, "con una aportación de agua fuera de lo habitual que afecta a uno de los murales principales.

Además, se expone que un incendio producido en una planta superior también ha afectado, al igual que la naturaleza de los soportes "y el uso continuado del local como restaurante". Los profesionales encargados del informe determinaron cinco niveles del estado de conservación de los murales (bueno o aceptable, regular o malo, pésimo o muy malo, crítico y supercrítico) y ninguno de los 12 está en estado "bueno o aceptable".

Uno de los factores que más ha influido en la mala conservación de los murales, fue la permisividad de poder fumar dentro de los restaurantes que hubo en esta ubicación hasta 2011, según el informe, "de los 72 años de vida del mural principal, 59 estuvo bajo los efectos del humo del tabaco que es amarillento y ácido y que provoca una capa amarillenta-ocre que unida a las grasas intensifica el oscurecimiento".

La humedad presente en el ambiente produce también la "acidificación de la superficie de la película pictórica, dándole rigidez y favoreciendo que sea quebradiza", detalla el documento. En cuanto a la climatización e iluminación, este local de la calle Olmos tiene acceso directo a la calle y en el pasado mucho movimiento constante de entrada y salida de gente y puertas abiertas, lo que propició los cambios de temperatura y humedad constantes en el interior durante un largo período de tiempo.