Si a algo deben agradecer todos los apasionados de la magia – y los que no lo éramos y ahora sí – es que personas como Pedro Bugarín y Dani Polo presenten proyectos tan apasionantes como el festival Galicia Ilusiona, uno de los más grandes de toda Europa. Y es que estos dos jóvenes ilusionistas, con el apoyo de la Xunta de Galicia y de Turismo de Galicia, lo apostaron todo y todo lo acertaron al dirigir esta segunda edición que a través de diferentes actividades, iniciativas y actuaciones llevó a cada rincón de nuestra comunidad autónoma las ganas de volver a creer en la magia y dejarse ilusionar.

Así, durante todo el mes de septiembre los magos Lore y Rafa recorrieron municipios, ciudades y pueblos con el teatro más pequeño del mundo, realizando dentro de ese encantador y peculiar espacio actuaciones de entrada libre que dejaron a todos los asistentes boquiabiertos.

Además, los organizadores de este festival tuvieron muy presente que la magia está en todas partes y por eso hicieron todo lo posible para llegar a aquellos niños y niñas que sueñan desde las plantas de pediatría de los principales hospitales gallegos. ¿El resultado? Muchas sonrisas y miradas llenas ilusión gracias a esos espectáculos adaptados a quienes no pueden acudir a la calle o a los teatros. Paralelamente, también se llevaron a cabo actuaciones solidarias para diferentes asociaciones como Arela de Vigo o Accem de Lugo.

El colofón final de este festival llegaba con una docena de grandes galas que se celebraron en los auditorios de las siete principales ciudades de Galicia (Lugo, Ourense, Pontevedra, Ferrol, A Coruña, Santiago y Vigo) y que pueden presumir de haber hecho sold out en todas y cada una de ellas. Figuras de renombre del sector como Miguel Muñoz (premio Mundial de magia), Gerald Le Guilloux (varita de oro Montecarlo), Paul Ponce (uno de los tres mejores malabaristas del mundo) o Edama (Gran premio de ilusionismo en Rimini) consiguieron dejar con la boca abierta a un público entregado desde el primer momento. Cabe destacar que este proyecto que ya se consolida como un referente del ilusionismo ha acumulado en sus dos ediciones un total 75.000 asistentes de todas las edades, porque nunca se debe dejar de creer en la magia.

Y si algo le pudiésemos pedir a Pedro y Dani es que, como buenos magos que ya han demostrado ser, nos cumplan un último deseo: volver a vernos en la tercera edición.