Trajes tradicionales con identidad LGTBI+, así es la exposición de la gallega Icía Vázquez

La gallega Icía Vázquez presentaba la semana pasada Traditions.2Queer, un retrato colectivo de la comunidad LGTBI+ neoyorquina que reinterpreta los trajes tradicionales de diferentes países de origen.

Con esta exposición la joven coruñesa tiene como objetivo reivindicar la necesidad de contar con las personas del colectivo LGTBI+ a la hora de crear y hablar de la cultura. En sus palabras: "Esta es mi carta de apoyo a todas aquellas personas que no siguen la cis-heteronormatividad que la sociedad nos impone".

Hablamos con la creadora del este proyecto que, aunque vio la luz en la ciudad de Nueva York, ya se puede disfrutar en la Galería Solaina de Lugo hasta el 16 de febrero.

Empezamos por el principio… ¿Qué nos vamos a encontrar en ‘Tradicións 2.Cuir’?

Pues en esta exposición veréis un retrato colectivo de la comunidad LGTBI+ neoyorquina. Básicamente el proyecto consiste en una reivindicación de la participación de las personas queer en la creación de cultura y la representación de la misma. Yo me di cuenta de que la representación, sobre todo en el vestuario tradicional, se da desde un punto de vista cisgénero. ¿Pero y quiénes no encajan en los códigos binarios o no se sienten cómodos con los mismos? Es por ello que busqué reinterpretar y renovar las vestimentas tradicionales de ciertos lugares de procedencia de gente con identidad queer que participó en el proyecto.

Tengo entendido que has desarrollado ese proyecto artístico en Estados Unidos. ¿Podrías hablarnos de tu experiencia en Nueva York y sobre la beca Fulbright-Xunta de Galicia?

Pues yo me gradué y pasados un par de meses empezó la cuarentena, entonces se cayeron muchas opciones que tenía en mente. Fue ahí cuando apliqué a la beca, me la concedieron y me fui en enero del 2021 a Nueva York, la meca de cualquier artista, para realizar un año de conservatorio de fotografía para formarme en la parte más técnica, estética…

‘Tradicións 2.Cuir’ empezó como mi proyecto de tesis para esa formación académica, pero tengo pensado continuarlo porque aunque ese retrato tiene como primera fase el territorio neoyorquino, me interesa ampliarlo. Mi objetivo es hacer de ese retrato algo verdaderamente colectivo, que participen más personas y que llegue a mucha gente.

Icía Vázquez, creadora del proyecto traditions 2.Queer.

Y antes de llegar a EEUU… ¿Cómo empieza tu aventura en el mundo de la moda? ¿Y de la fotografía?

Desde pequeña estuve interesada en el mundo artístico y hacía muchas actividades extraescolares relacionadas con el arte como pintura o música, incluso hice un curso diseño. Tras la selectividad empecé a dudar entre comunicación audiovisual y la moda, además me echaba para atrás tener que irme de Galicia porque aquí estaba formándome en el conservatorio de música. Fue entonces cuando encontré la ESDEMGA, de la Universidad de Vigo, y comencé a formarme profesionalmente a la vez que llevaba a cabo mis propios proyectos.

Volvamos al proyecto ‘Tradicións 2.Cuir’. ¿Cuál ha sido la inspiración tras el mismo?

Conceptualmente a mí siempre me interesó la capacidad comunicativa del arte porque a través de la estética se plantea la ética, el por qué de las cosas. Como dijo una estilista muy famosa: "Con la moda eres capaz de expresar quién eres sin necesidad de decirlo". Podría decirse que la moda expresa y la fotografía captura dicha expresión. A nivel estético me gusta inspirarme en artistas que han sido públicamente queer, como Claude Cahun o por ejemplo en el papel de las Drag Queen.

Algunas de las fotografías del proyecto Traditions 2.Queer.

¿Y cómo fue su proceso de elaboración?

Yo ya tenía el concepto claro: mezclar moda y denuncia social. Tras una lluvia de ideas, empecé a desarrollar esta idea y contacté con gente que quisiese participar. Con ayuda de esas personas y mis propias investigaciones conseguí reunir información sobre los trajes tradicionales de cada país. Fue entonces cuando me puse manos a la obra con la reinterpretación de los diseños. Lo siguiente fue hacer las sesiones de fotos. Cuando ya tuve suficientes fotografías, junto con Nancy, mi tutora de la universidad, llevamos a cabo un proceso de revisión del contenido. Fue un trabajo de muchos meses. Tenía claro que, de presentarlo en físico, lo haría en Galicia. Contacté con varias galerías y ahora finalmente lo estoy presentando actualmente en la Galería Solaina.

Hablas de tu proyecto como “una carta de apoyo a todas aquellas personas que no siguen la cis-heteronormatividad que la sociedad impone”. ¿Ves en la moda una buena herramienta para luchar contra las injusticias y alzarse contra todo lo preestablecido?

Sí estoy convencida de que la moda tiene ese poder porque al final es algo que trasciende. Y opino que a su vez, ese gran poder va ligado a la responsabilidad de utilizarlo bien.

En tu opinión y respecto a los posibles problemas o desigualdades que sufre el colectivo queer y las personas que lo representan ¿La sociedad ha avanzado o aun queda mucho camino por recorrer?

Si bien es verdad que muchos diseñadores y artistas emergentes ya tienen en cuenta todos los colectivos, creo que hace falta que la sociedad en general abra un poco la mente. Yo si salgo de mi burbuja veo un gran choque con realidad. Aunque se estén haciendo muchos avances y haya cada vez más gente abierta, creo que aun falta camino por recorrer.

Una de las fotografías del proyecto Traditions 2.Queer.