El Museo de Belas Artes de A Coruña acoge una muestra virtual con pinturas del siglo XVII

El Museo de Belas Artes de A Coruña ha presentado este jueves A Torre de la Parada. Un espazo pictórico para Rubens, una muestra de carácter virtual e inmersivo que ofrece un recorrido digital por una de las mejores colecciones de pinturas del siglo XVII, que estuvo situada en el pabellón de caza del rey Felipe IV, a las afueras de Madrid.

El director xeral de Cultura de la Xunta, Anxo M. Lorenzo, ha explicado que se trata de un "innovador proxecto" que permite conocer la decoración de esta edificación tomando como punto de partida dos tablas realizadas por el propio Rubens y que se conservan en el museo coruñés.

"Grazas a un gran traballo de investigación feito en colaboración coa Universidade da Coruña, púidose reconstruír de xeito virtual a arquitectura e a hipotética distribución das obras que formaron parte do programa decorativo ideado por Rubens", ha detallado.

Presentación de la muestra (foto: Xunta)

En este sentido, ha avanzado que gracias a este "exhaustivo traballo de documentación, análise e interpretación" los visitantes del Museo de Belas Artes podrán disfrutar hasta el mes de diciembre
de una experiencia el más parecida posible "á vivida polo propio Felipe IV mentres habitaba o seu singular pavillón e contemplaba a impresionante colección de arte que o decoraba".

Recorrido inmersivo

Esta es la primera reconstrucción visual hecha de este interesante edificio y de sus importantes contenidos artísticos que fueron creados por destacados autores como el propio Rubens y otros pintores flamencos, así como Velázquez, y que hoy en día se pueden contemplar en museos e instituciones como el Prado y el Museo de Historia de Madrid, la National Gallery de Londres, el The Arte Institute de Chicago, el Staaliche Museum Zu de Berlín o en la colección Sir Edmund Bacon Art, entre otros.

En ella, gracias al uso de técnicas de reposición fotogramétrica, modelado CAD 3D y la programación
de videojuegos, el visitante podrá realizar un recorrido inmersivo por sus espacios e interactuar con lienzos de forma natural, sin más dispositivos que el propio cuerpo, cuyos movimientos serán monitorizados por una cámara de profundidad.