Adrián Ben: "He pospuesto placeres de la vida por entrenar, pero es mi sueño desde niño"
Hoy hablamos en Quincemil con este atleta que viene de batir el récord gallego de pista cubierta que él mismo ostentaba. Tras pasar el Covid, se prepara para los campeonatos al aire libre en los que espera seguir manteniendo el nivel que mostró en los JJOO de Tokio
12 marzo, 2022 06:00Adrián Ben es una de las grandes realidades del atletismo español, pero su futuro es todavía aún más prometedor. Inició su carrera en su localidad natal, Viveiro (Lugo), pero siendo muy joven se trasladó a Madrid para seguir creciendo. Con su trabajo y esfuerzo maravilló a todos los aficionados del deporte en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio, donde consiguió un quinto puesto en la final de los 800 metros, siendo además el primer atleta español en la historia que clasificó para dicha prueba. Hoy hablamos en Quincemil con este deportista que acaba de batir el récord gallego de 800 metros que hasta ahora él mismo ostentaba y que aspira a todo en los próximos campeonatos, con los JJOO de París 2024 en el horizonte.
¿Cómo empieza tu relación con el atletismo?
Con siete años gané la Carrera Popular de Viveiro. Mi profesor de educación física tenía un grupo en el que entrenaba niños, y ahí me uní para empezar a "jugar al atletismo".
¿Seguías el atletismo por la tele?
No, solo me divertía con mis compañeros, jugábamos en clase y poco más.
¿En qué momento deja de ser un juego y empiezas a pensar que puedes hacer algo grande en este deporte?
No hay un momento en el que tu digas: "hoy voy a ser deportista profesional". Vas tomando diferentes decisiones, vas teniendo diferentes resultados y llega un momento en el que todo va sumando, vas creciendo y mejorando diferentes aspectos y llegas a dedicarte a ello. Una de mis mejores decisiones fue irme a Madrid para estar en el Centro de Alto Rendimiento.
El verano pasado fuiste el primer atleta español en llegar a una final de los 800 metros en los Juegos Olímpicos, ¿cómo viviste aquella semifinal?
Sabía que podía pasar de todo. Es una prueba en la que para bien o para mal es muy abierta. Nosotros estábamos haciendo un trabajo muy bueno, venía con mucha ilusión, sabía que era difícil pasar y tenía menos presión. Yo siempre me presiono a mi mismo porque siempre quiero lo mejor, pero soy consciente de la dificultad. Quería hacer mi mejor marca, mi mejor carrera y pudimos pasar a la final. Atletas que ha tenido España de talla mundial como Kevin López o Antonio Reina no consiguieron llegar, y a mí eso me dice lo difícil que es y me hace valorarlo.
En la final te quedaste a las puertas de la medalla
Ya había estado en la final del Mundial dos años antes y ya sabía lo que era correr una final. Es una final de los JJOO y parece que todo el mundo te está mirando, pero yo estaba concentrado en conseguir la mejor posición posible y en disfrutar al máximo, y si había la mínima posibilidad de conseguir medalla lanzarme de cabeza a por ella.
En el momento te puede dar cierta rabia quedarte tan cerca, pero ahora pasados los meses, ¿cómo valoras ese quinto puesto?
Cuando quedé quinto ya fue una alegría tremenda. El 800 es una prueba que no llevo practicando mucho tiempo, todavía me queda mucho por aprender, creo que es muy difícil. En ese momento lo valoras como: "uff, qué cerca he estado de la medalla". Ahora a toro pasado lo valoro como algo especial, como que eres un privilegiado, pero tengo ganas de mejorarlo.
¿Cómo se viven unos JJOO desde dentro?
Eso es bastante diferente al resto de competiciones. Siempre estoy acostumbrado a estar con los atletas, pero allí estás con deportistas de todos los deportes. Subir en el ascensor con Rudy Fernández y Pau Gasol, o estar comiendo al lado de Novak Djokovic es es un ambiente diferente. Al final estaba centrado en mi prueba, las circunstancias del Covid tampoco dejaban hacer mucho, solo comer, entrenar y descansar.
¿Has tenido que hacer muchos sacrificios para llegar a conseguir este éxito?
Más que sacrificios, que sí que los hay, hay preferencias. Yo lo hago porque es mi sueño desde niño, he tenido siempre el apoyo de mi familia y de mi gente, he pospuesto algunos placeres de la vida, como salir con mis amigos por entrenar o competir. Hay veces que me da un pelín de rabia, pero es lo que me sale de dentro y es lo que más me gusta
En el deporte la clave es el trabajo, pero, ¿hasta que punto influye la suerte?
Creo que son dos factores muy a determinar, si no trabajas no vas a conseguir nada, pero luego trabajas mucho y muy duro para que tu cuerpo responda como tiene que responder y que ese día no te pase nada. El medio fondo no depende solo de ti, no estás en un pasillo contigo mismo. A mí las dudas que me puedan surgir es porque no sé como se puede dar la carrera, pero trabajando el factor suerte se puede evitar en un gran porcentaje.
Se aplaudió mucho el compañerismo que hubo en atletismo en los JJOO, ¿lo percibes así desde dentro?
Al final estamos acostumbrados a que lo venden como un deporte individual, pero no es así. Yo vivo en un Centro de Alto Rendimiento y los de atletismo hacemos vida juntos, hasta saliendo de fiesta. Estamos todos en el mismo barco y hacemos todos la misma lucha.
¿Esta temporada cómo se presenta?
Tuvimos la temporada de pista cubierta, tuve la mala suerte de coger el Covid, que trastocó un poco los planes, pero lo que más importa es el aire libre. Ahora toca volver a cargar entrenamientos, a coger volumen, a hacer kilómetros para luego ir afinando de cara al Campeonato de España que es el 26 de junio, y luego el Mundial y el Europeo que son en julio y agosto.
Hace unos días batiste el récord gallego que tú mismo ostentabas, ¿ya te encuentras en mejor forma tras pasar el Covid?
Me encontré bastante bien. Hace mes y medio que cogí el Covid, me dejó tumbado con fiebre y dolor de garganta, lo que me hizo perder dos semanas. Aún así estoy contento por la temporada y la marca personal y creo que hicimos buen trabajo de cara al verano.
En el horizonte esta París 2024, ¿cómo afrontas esa cita?
Igual que siempre, sin perder la cabeza, queda mucho tiempo. No hay mejor ofrenda al futuro que hacerlo bien en el presente. Me dedico a entrenar día a día, a pensar en el mañana, en la semana que viene y en mis próximos campeonatos y a no perder la cabeza. Si pensara en los de 2024, también tendría que pensar en los de 2028 y en los de 2032, pero hay que ir paso a paso, y cuando llegue el momento estar centrado. A dos años y pico pensar solo en los JJOO me quema. A mí me gusta ir con tranquilidad, concentrado en el próximo objetivo y cuando sean los JJOO ahí estaré al 200%.