Superada ya la primera semana del mercado invernal, el Dépor solo ha completado por el momento un único movimiento, la llegada de Emre Çolak. El turco continúa con su puesta a punto y podría tener sus primeros minutos este fin de semana ante el Unionistas en el choque de Copa del Rey.

Sin embargo el trabajo en las oficinas del club sigue siendo frenético y en los próximos días podrían cristalizar varias de las operaciones que están en marcha. Una de las principales tiene a Beto da Silva como protagonista. El peruano ha tenido un rol muy secundario con todos los entrenadores que han pasado por el banquillo del Dépor y su condición de extracomunitario no juega a su favor. La dirección deportiva ya habría trasladado a sus representantes la intención del club de prescindir de él, tal y como apuntan los compañeros del As.

La salida de Beto es clave para que pueda llegar al equipo Celso Borges. El costarricense ya tendría todo acordado con el Dépor y está a la espera del acuerdo entre clubes y de la salida de un extracomunitario del equipo.

Refuerzos en todas las líneas

A pesar de los dos triunfos consecutivos, la nueva dirección deportiva considera fundamental afrontar más cambios en la plantilla. Para reforzar la defensa, el nombre es Pablo Insua. El central de Arzua pertenece al Schalke y está cedido en el Huesca pero su intención es reencontrarse con Fernando Vázquez, el técnico con el que mejor rendimiento deportivo alcanzó.

Cambios en la línea ofensiva

Fernando Vázquez lanzó un claro mensaje en Soria sobre la idea de delanteros que quiere en su esquema. La lesión de Koné provocó que el de Castrofeito apostara por Víctor Mollejo y dejó en el banquillo a Christian Santos y Samuele Longo. Ambos futbolistas han rendido por debajo de sus posibilidades y el club estaría estudiando cambios en esta parcela del terreno de juego. Longo está cedido por el Inter de Milan y durante esta primera vuelta ha estado muy lejos del nivel esperado por todos.