Varias de las ovejas gallegas de A Ciruxana.

Varias de las ovejas gallegas de A Ciruxana. Cedida

Sostenibilidad

A Ciruxana: Una apuesta por las ovejas gallegas, la ganadería regenerativa y el rural

Xoán González inició hace siete años este proyecto ganadero por vocación y actualmente tiene unos 400 ejemplares de esta especie en situación delicada que pastan en diferentes fincas del Macizo Central y comercializa sin dejar huella de carbono la tierna carne de cordero criado en libertad

9 octubre, 2021 06:00

La oveja gallega estuvo a punto de desaparecer tras reducirse considerablemente el número de ejemplares, pero el esfuerzo de varios ciudadanos y entidades como la Asociación de Criadores da Raza Ovella Galega (Asovega) propició la recuperación de esta raza que "representa un patrimonio genético, social, cultural, ambiental y económico". Una de las personas que trabaja en la actualidad con ovejas gallegas y que lucha por su preservación en el medio rural es Xoán González Alonso, que está al frente de la granja A Ciruxana.

El ourensano comenzó hace siete años su aventura como ganadero por vocación y actualmente tiene unos 400 ejemplares de este rumiante. Este defensor de la vida en el rural de Galicia tomó el nombre por el que se conocía casa de su abuelo (probablemente porque en ella había una curandera o una meiga) para bautizar su proyecto en el Macizo Central.

Varios de los corderos de A Ciruxana (Cedida).

Varios de los corderos de A Ciruxana (Cedida).

"Quero que o rural volva a ter vida e sempre lle digo á xente nova que se pode vivir no campo coma no siglo XXI", indica el responsable de la granja, que pide que profesiones como la suya se fomenten más entre los jóvenes con, por ejemplo, la participación de los ganaderos en las jornadas de orientación laboral de colegios e institutos. González, sin ir más lejos, estudió un ciclo superior de dirección de explotaciones agropecuarias y con ayuda de su familia comenzó con la granja que hoy en día se ha convertido en su medio de vida.

La oveja gallega, perfecta para el proyecto de A Ciruxana

El paso del tiempo hizo que este emprendedor se percatase de que la oveja gallega, caracterizada por ser pequeña, tener "moña" y rabo largo, es la que mejor se adapta a las condiciones de vida del terreno donde se ubica A Ciruxana y descubriera el gran valor de su carne. González combina las fincas alquiladas con las adquiridas y, con el apoyo de su pareja Sara y de su familia, traslada a los animales de una a otra con total control para lograr ganadería regenerativa.

"A carne é excelente comparada con outras razas, ten un sabor incrible. A ovella galega está moi adaptada ao territorio, o que nos permite producir a baixo coste e adaptados ao noso entorno. Ademais, é un patrimonio cultural e xenénico moi importante do noso país que é unha pena que se perda, e así colaboramos na recuperación desa historia e da biodiversidade", enumera González sobre los beneficios de apostar por esta raza.

El responsable de la granja no es el único que ha descubierto en la oveja gallega una oportunidad única. Nieves Fernández Vidueira, que es una poetisa que aprovecha los momentos de pastoreo para escribir sus libros, y Alberto Santín en Samos (Lugo), que tiene tanto oveja como cabra gallega, son dos de los ejemplos que pone González. Precisamente, el emprendedor explica que Galicia tiene, en total, unos 4.000 ejemplares y que sería necesario triplicar esa cifra para que la situación de la especie sea buena.

La ganadería regenerativa

González presume de hacer ganadería regenerativa y prefiere referirse de esta forma a su granja y no como ecológica porque cree que se abusa demasiado de este concepto. Así, defiende que aunque un producto se produzca de forma ecológica en Nueva Zelanda, traerlo hasta Galicia supone una huella de carbono "importantísima", mientras que en la comunidad hay algunos ejemplos de empresas que tienen el sello pero producen en intensivo.

Las ovejas gallegas de A Ciruxana en una de las fincas de la granja (Cedida).

Las ovejas gallegas de A Ciruxana en una de las fincas de la granja (Cedida).

"A gandería rexenerativa consiste en imitar os movementos das mandas de ñús ou antílopes da Sabana. Esos animais, pola presión dos depredadores, móvense en grupos grandes para defenderse e pastan nun sitio continuando cunha rotación porque buscan pastos novos", explica el responsable de A Ciruxana, que indica que él usa el pastor eléctrico para desplazar a las ovejas hasta las parcelas donde van a pasar el día y en las que pueden encontrar la comida necesaria. Esto favorece que los animales coman todo sin dejar a un lado las hierbas menos apetitosas y, por tanto, limpien mejor la zona, donde también duermen y cagan, abonando el suelo.

Esta rotación ayuda a que la hierba crezca en estado óptimo, ya que el terreno tiene más abono. Así, aumenta la materia orgánica y, como consecuencia, tanto la fertilidad como la retención de agua y la producción de forraje se incrementan. Esto último supone, al mismo tiempo, mayor fotosíntesis: las plantas aprovechan más carbono atmosférico fijándolo en el suelo. "Hai teorías que din que se toda a gandería mundial pasase a este sistema, parte dos efectos do cambio climático mitigaríanse ou reduciríanse moitísimo porque o chan sería como un sumidoiro de carbono", indica González.

El responsable de A Ciruxana controla dónde y cuánto comen sus ovejas para favorecer que la rotación sea lo más beneficiosa posible tanto para el medio ambiente como para los animales. Así, los rumiantes se establecen en una finca donde comen y duermen por parcelas hasta que se termina toda la hierba y pasan a la siguiente. "O común sería deixalas soltas en toda a finca, pero as ovellas comerían primeiro a herba que máis lles gusta e deixarían as herbas malas. As boas irían desaparecendo porque estarían sobrepastoreadas e as malas, avanzarían. Chegaría o momento no que sería preciso arar ou sembrar pradeiras porque deixaría de producir", explica González, que añade que con su sistema esto no ocurre.

Convivencia con el lobo

"O gando leva dous anos durmindo fora inverno e verán. Antes gardabámolas pola noite, pero dende que están fora notamos unha redución de enfermidades e unha melloría xeral dos animais", explica González, que forma parte de la Asociación de Criadores de Ovino e Caprino de Galicia (Ovica). Las ovejas están protegidas por los mastines y, precisamente, una de las reivindicaciones que hace González es que la Xunta "colabore" con los gastos en veterinaria y alimentación de los canes que cuidan a su ganado, fundamentales para mantener a raya al lobo.

El responsable de A Ciruxana cree que la nueva protección al lobo ibérico va a generar conflicto y una politización de las opiniones que no van a ser positivas para el animal. "Nós convivimos con el. O lobo controla os cervos e o xabarín. Unha poboación moi grande de cervos significa maior tuberculosis e brucelosis, enfermidades que implican o sacrificio dos animais segundo Saneamento", indica el OURENSANO?

Venta de cordero

A Ciruxana no solo cría ovejas gallegas sino que vende carne de cordero, rica en minerales y proteínas de alta calidad. Este producto es poco graso y tiene una composición en ácidos grasos "muy equilibrada", además de ser tierno y jugoso. El sabor de la carne ha llevado a algún local hostelero a ponerse en contacto con González para comprarle materia prima de calidad para su negocio.

Los corderos de la granja situada entre Vilariño de Conso (de donde es natural González) y Viana do Bolo se crían a pasto, salvo el forraje que se les da a finales de verano si hay sequía, por lo que su carne es muy característica y recomendada incluso para dietas como la Paleo. "Ao non traballar con insumos, e a maioría da carne que se produce en Galicia ou no Estado está rematada con insumos como maíz ou soia que ven de Estados Unidos ou Brasil, non temos pegada de carbono", explica González en referencia a la sostenibilidad de su producto.

La matanza no está certificada en ecológico porque el matadero al que llevan los animales no lo hace, pero sí la granja. Precisamente, los responsables de A Ciruxana están encantados de recibir a los ciudadanos para que conozcan más de cerca su modo de producir y crear confianza entre consumidor y productor. Las personas que quieran visitar la granja solo tienen que ponerse en contacto con González a través de las redes sociales.

A Ciruxana hace venta directa en ferias y envía a domicilio en transporte refrigerado. Los ciudadanos que quieran adquirir cordero pueden ponerse en contacto con los responsables del proyecto a través de Facebook con una semana de antelación para que tengan tiempo de preparar la carne. Las ventas de esta firma se realizan sobre todo en Galicia, aunque el cordero de A Ciruxana también ha llegado a Cataluña, Euskadi o Madrid, entre otros lugares.

Este emprendedor ha demostrado que se puede vivir en el rural de Galicia sin perder calidad de vida y ayudando a la recuperación de una raza autóctona como la oveja gallega. A Ciruxana, que también comercializa castañas de castaños centenarios en fresco, se ha convertido en una opción única para las personas que quieran disfrutar de la carne de cordero de calidad sin dejar a un lado valores como el respeto por el medio ambiente y la sostenibilidad.