Crest Surfboards: artesanía gallega en olas extranjeras
Silvia Rey y Vito Fernández son los creadores de la marca que fabrica tablas de surf personalizadas en Ferrol
7 agosto, 2022 09:47El talento gallego surfea olas aquí y en el extranjero gracias al trabajo de la empresa ferrolana Crest Surfboards. Silvia Rey y Vito Fernández están al frente de esta marca, con taller propio de creación y reparación de tablas de surf y una tienda física (calle Venezuela, 41-43, bajo, Ferrol).
Por todos es ya conocida la tradición surfera de la comarca de Ferrolterra, con grandes referentes competitivos como el Abanca Pantín Classic Galicia Pro y, por supuesto, con un entorno costero incomparable desde la playa de Doniños hasta la costa del Ortegal, pasando por otros muchos arenales como Campelo o Esmelle, que cada año visitan miles de personas atraídas por las olas de estos enclaves.
Este hecho, añadido a la incursión del hijo de ambos, Ian, en esta disciplina, fue lo que los lanzó a emprender. Vito explica que la idea surgió hace nueve años, él era carpintero de aluminio y se quedó en el paro. "No sabía nada de tablas de surf", afirma. Pero en esa época, Ian se matriculó en una de las múltiples escuelas de surf de la zona y, a partir de un corcho, Vito fabricó una tabla para su hijo. Tras verla, en una escuela le propusieron arreglar unas tablas y el resto es historia. Con un ritmo de fabricación de 40-50 tablas anuales, venden a cliente local pero también foráneo de países como Italia, Alemania, Suecia o Suiza entre muchos otros. "Me encanta lo que hago y verlas en el agua te aporta buen rollo", asegura Vito.
A pesar de la satisfacción personal que les reporta su negocio, creado en el 2017, "llevamos cinco años muy duros" y la progresión ascendente la notan más en el ámbito profesional, de creación, que en los márgenes de beneficios. "La tónica general de cualquier autónomo es de subidas y bajadas pero yo tiendo siempre a ser optimista y el cliente tiene que entrar en nuestra tienda y tener un buen ambiente para que quiera volver", afirma Silvia.
Tablas personalizadas
Las tablas de Crest Surfboard son totalmente artesanales y el cliente puede elegir la personalización que desee. Además, para los expertos en el vocabulario surfero, hay desde tablas short board hasta evolutivas, lo que para el resto de los mortales significa que fabrican tablas para todas las edades y nivel deportivo de los clientes.
Tal y como indica Vito, los pesos oscilan dependiendo del modelo y tamaño pero se mantienen en una horquilla desde los 2,3 hasta los 8 kilogramos y los precios se sitúan entre los 400 y los 800 euros. "El valor va en función del tamaño de la tabla pero también puede tratarse de una pequeña con mucho trabajo detrás que puede resultar más costosa" que otra de mayor tamaño.
En cuanto al diseño, lo más demandado son las diferentes pinturas que pueden existir, pero "hay diseños donde trabajo telas como la seda", expone Vito, lo que hace que se vea un tejido "debajo de la tabla" y el acabado, en lugar de ser mate, es en brillo y "eso da un toque que la gente se queda alucinada". De hecho, una de estas piezas con textil fue expuesta en el Océano Surf Museo de Valdoviño (A Coruña), donde causó sensación.
Artesanía de Galicia
Las tablas de Silvia y Vito forman parte del sello distintivo de Artesanía de Galicia. A pesar de que se trata de un producto que tradicionalmente no se asocia al concepto artesano, la realidad es que sí que lo es, y Vito trabaja en su taller a diario creando tablas desde cero a partir de fibra de vidrio y resinas de poliéster o epoxy. Además, ofrecen servicio rápido de reparación para sus clientes, sobre todo para aquellos que no son de la zona y necesitan una solución urgente para disfrutar con su tabla los días que dure su estancia.
Precisamente, ambos recalcan que es el cliente extranjero el que le da un plus de importancia al hecho de que la tabla se fabrique a mano. "Le dan mucho valor al tema de la artesanía, quizás más que los clientes de aquí", afirma Vito.
Evolución del surf en Ferrolterra
Este deporte cada vez es más practicado en la zona lo que conlleva un incremento de la demanda de escuelas de surf. Y no sólo los niños y niñas quieren aprender. "Hay mucha gente adulta que inscriben a sus hijos en la escuela y son los propios padres los que también empiezan a practicar", afirman ambos.
Asimismo, el incremento de personas extranjeras es notable "hay muchas más furgos y nunca he hablado tanto inglés como este año", dice Silvia. En definitiva, se trata de una progresión "muy positiva para todos, ellos gastan en hostelería y comercio y tenemos que darles un buen servicio para que estén cómodos", apunta Vito.
Tienda física y online
A pesar de que la marca trabaja bajo demanda, la tienda tiene algunas tablas en stock que acompañan al resto de artículos que venden relacionados con el surf. Mientras Vito trabaja en el taller con las tablas, Silvia será la que les atenderá en la tienda física en horario de 10:00 a 13:00 horas y de 18:00 a 20:30 horas. Además, disponen de web con venta online y están presentes en Instagram y Facebook.