Interior de una oficina de ABanca.

Interior de una oficina de ABanca. Abanca

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Los vecinos de O Castrillón (A Coruña) protestan por el cierre de una oficina de Abanca

Los perjudicados crearon una petición en Change.org para recoger firmas y evitar el cese de actividad de esta sucursal y otra del Banco Sabadell en el barrio

19 junio, 2020 17:45

Los vecinos del barrio coruñés de O Castrillón exigen que no se cierre la oficina de ABanca y recogen firmas a través de una petición en Change.org para mantener este centro abierto. Los usuarios de esta entidad financiera, así como los del Banco Sabadell, lamentan que los dos centros que había en el área no hayan vuelto a la actividad en la "nueva normalidad".

El texto de la petición asegura que la sucursal cerró esta oficina "con nocturnidad y alevosía" al no volver a abrir de cara al público después del estado de alarma por coronavirus. Esto supone un inconveniente para muchos de los vecinos porque las alternativas "no están cerca" y acceder caminando a ellas es complicado para aquellas personas con problemas de movilidad. "O Castrillón es un barrio de A Coruña situado en una zona alta, con mucha población mayor y pequeño comercio local que ahora tendrá muchas dificultades para trabajar con una entidad financiera, pues la otra que había (Banco Sabadell) parece que tampoco abrirá sus puertas", recoge el texto de Change.org.

Los vecinos piden a ABanca "que recupere el fin social", al Concello da Coruña que "no le de la espalda" al barrio y a la alcaldesa, Inés Rey, que negocie la reapertura de la oficina. "Las entidades salvadas por todas castigan a un barrio a la exclusión financiera, dificultan el acceso de las personas mayores a sus recursos y estrangulan a los pequeños negocios de barrio", acusa el texto.

Los vecinos y comerciantes de la zona anunciaron movilizaciones a principios de esta semana para reclamar que se mantengan las dos sucursales y, de hecho, se manifestaron el pasado martes en la avenida de la Concordia para protestar por el cierre. Los afectados aseguran que la oficina más cercana que continúa con su actividad es la de más difícil acceso.