Diversión y concienciación en el Festival Mar de Mares. Este fin de semana, la explanada de O Parrote de A Coruña se llenó de actividades relacionadas con el mar y la importancia de su preservación. A lo largo de todos el fin de semana, hubo un gran ambiente en esta céntrica zona de la ciudad donde tuvieron lugar un sinfín de actividades en el marco de un festival que, en su novena edición, volvió a poner en valor a los océanos.

Mayores y pequeños se acercaron a lo largo de todo el fin de semana hasta la explanada de O Parrote, donde tuvo lugar el Mercado & Festa do Mar. Este espacio lúdico y educativo acogió diversas actividades, entre las que se encontraba la desarrollada por Vegalsa- Eroski, patrocinador oficial de este evento ya veterano en la ciudad coruñesa.

En su stand ‘Baixo o Mar’, la compañía de distribución alimentaria llevó a cabo, tanto en la jornada del sábado como en la del domingo, diferentes actividades dirigidas a los más pequeños de la casa. Los niños de entre 5 y 11 años pudieron conocer, de una forma lúdica y divertida, toda la riqueza que alberga el mar como gran ecosistema de nuestro planeta y su íntima vinculación con la vida de los seres humanos, así como la necesidad de cuidarlo y preservarlo para garantizar un futuro sostenible para todas y todos.

Dentro de su carpa se desarrollaron tres actividades diferentes, todas ellas compartían un mismo objetivo: promover la conciencia medioambiental en los más pequeños y en sus familias.

Diversión y concienciación

A través de la actividad ‘Somos Mar’, los más pequeños pudieron sumergirse en el fondo del mar para descubrir el paisaje submarino con la ayuda de un buceador-guía, que fue mostrando a estos pequeños exploradores todo lo que pueden encontrarse en este mundo submarino. A través de pistas, los niños jugaron a encontrar su propio tesoro bajo el mar y aprendieron cuáles son las especies que habitan en la costa gallega.

También a través de juegos, los pequeños exploradores submarinos pudieron aprender a reciclar. En ‘Somos lo que hacemos‘, los monitores mostraron a los más pequeños que el fondo marino está lleno de residuos que tuvieron que recoger y depositar en sus respectivos contenedores. Eso sí, para ello tenían que encestar. ¡Y con las gafas de buceo la cosa se complica!

Por último, en la actividad ‘Somos lo que imaginamos’, estos pequeños buzos tuvieron la oportunidad de dar rienda suelta a su imaginación y demostrar toda su creatividad creando esculturas con materiales reciclados y productos relacionados con el mar.