Spice World
Las Spice Girls no solo marcaron una época sino que siguen estando vigentes para clasificar a los tipos de profesionales.
1 mayo, 2021 09:49Tengo la certeza experimental desde hace mucho tiempo de que cualquier perfil profesional puede asimilarse con una de las Spice Girls.
Emma, Mel B., Geri, Victoria o Mel C. son como los signos de zodíaco, naces siendo una aunque puede que después tengas ascendente en otra o incluso haya etapas en las que el influjo de una tercera estrella condicione tu destino final.
Todos somos una combinación de estas 5 chicas en diferentes porcentajes, así de sencillo:
- Baby Spice (Emma Burton): La inocencia. Siempre tan sonriente que parece trabajar en Mr. Wonderful. Aún se cree eso de que “querer es poder” (una de las grandes mentiras de los libros de autoayuda). Siempre ve un lado positivo en cualquier cosa y su verdadera especialidad es contagiar esa ilusión perenne a los que la rodean (que no es poco).
- Scary Spice (Mel B.): Lo salvaje. Parece que haya tenido que sobrevivir en la profunda selva amazónica para llegar hasta aquí y aún conserva un carácter ciertamente asilvestrado. Luchadora y competitiva por naturaleza, siempre intenta demostrar que está a la altura de las expectativas para erigirse como líder de la manada.
- Ginger Spice (Geri Halliwell): El atrevimiento. Alocada y arriesgada, a veces no sabes si habla desde la inconsciencia que otorga el desconocimiento o desde la valentía de aportar una visión diferente a la prevista. Tiene carisma sin pretenderlo y prefiere la diferencia a lo standard (base fundamental de la innovación).
- Posh Spice (Victoria Beckham): La ambición. En secreto sabes que piensa que vale más que el resto, aunque acepta tener que pasar por el trance de estar en este show temporalmente como etapa para llegar a algo más grande. Es reservada, observadora y analítica pero también asertiva en sus valoraciones.
- Sporty Spice (Mel C.): La versatilidad. Es todoterreno y multitasking. Lo mismo hace a mano tarjetas de visita para todo el equipo con un boli y una tijera que genera un informe comparativo sobre la evolución del mercado ruso de la aceituna, todo ello, mientras da una voltereta lateral con la otra mano. Quizás no todo lo haga bien, pero hace de todo.
Piénsalo bien, en tu lugar de trabajo, entre tus compañeros o entre tus jefes, quizás incluso entre tus amigos y sólo encontrarás estos cinco fenotipos en diferentes combinaciones o porcentajes.
En realidad, esta teoría no la he desarrollado yo (ojalá, porque sería millonario) sino que es lo que pensaron en 1994 los productores Chris y Bob Herbert cuando idearon el grupo, categorizando a la sociedad adolescente en estos cinco grandes bloques y personificándolos en una caracterización que asegurase una empatía máxima entre el personaje y su público target. Pusieron un anuncio en el periódico británico The Stage buscando protagonistas para su plan y el resto ya es historia (y negocio).
Pueden gustarte o puedes odiarlas (yo tengo sentimientos encontrados) pero es indiscutible que las Spice Girls no son solo un icono de los 90s sino que llegaron a vender 100 millones de discos y a generar un negocio de cientos de millones de euros en todo el mundo en tiempo récord (Spice World Tour es la gira musical con mayor recaudación de la historia).
Quizás no revolucionaron la cultura artística con ninguna de sus canciones, pero como modelo de negocio fueron totalmente disruptivas e innovadoras, combinando un mercado musical en declive con una nueva fuente de ingresos complementarios a través de un infinito universo de productos de merchandising con su imagen, sus valores y su filosofía.
Sin embargo, de todas las lecciones que he aprendido y que puedes aprender de las Spice Girls, me quedo con una: Emma, Mel B, Geri, Victoria y Mel C, todas, tuvieron una carrera artística en solitario, precedente y/o posterior, pero nunca con el éxito y rentabilidad de todas ellas unidas y alineadas. Moraleja: Individualmente, pese a nuestras capacidades personales y profesionales, todos valemos muy poco en comparación con el valor que podemos llegar a generar rodeados de un equipo complementario y con una visión integradora. Cuando lo conseguimos, el negocio hace POP (e historia).
Spice up your life!