• Concentración contra la terapia de electroshock que recibe un joven de Arzúa (A Coruña)
• El juez autorizó el electroshock al joven de Arzúa (A Coruña) por "ausencia de alternativas"

Los juzgados han decidido cerrar el caso del joven arzuano que fue sometido a electroshock en el Hospital Provincial de Conxo. Así lo ha dictaminado el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Santiago de Compostela tras el "rotundo éxito del tratamiento y consiguiente alta clínica del paciente".

El caso saltó a los medios a finales del mes de marzo, cuando El Correo Gallego se hizo eco de las declaraciones del padre del paciente, que denunció que los facultativos de psiquiatría habían dictaminado la terapia electroconvulsiva (TEC) a pesar de que el joven había ingresado voluntariamente y no deseaba este tratamiento. El caso se remitió a los juzgados que dictaminaron que este era la única opción para el arzuano por la gravedad de su diagnóstico.

Ahora los magistrados han archivado tanto el procedimiento de medidas cautelares y del ingreso no voluntario después de que el paciente saliera este pasado jueves del hospital, desestimando así los recursos que habían sido presentados por el padre. En el auto señala de nuevo que los informes sanitarios "no solo enuncian de manera motivada la ausencia de justificación" para suspender la terapia, que era lo que pedía la familia, sino que también corroboran "el rotundo éxito del tratamiento pautado, tanto a nivel psiquiátrico como psicológico -hasta el punto de permitir acordar el alta hospitalaria con seguimiento ambulatorio del paciente-".

El juez se volvió a referir a los informes de los psiquiatras del centro, así como la psicóloga responsable por el paciente y el especialista de Medicina Interna. En ellos "se constata con máxima actualidad y objetividad la buena evolución del paciente" después de ser sometido al electroshock , "ya desde la primera sesión". El magistrado también señala que ha habido una "desaparición progresiva" de sus síntomas, incluso los de "temática delirante".

El tribunal insiste que en el el tratamiento ha sido avalado por Asociación Gallega de Psiquiatría y la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental y que es "incuestionable" desde la evidencia científica. En el auto también inciden en la "ausencia de competencia" del paciente, así como la existencia de "su reiterada y actualizada intencionalidad autolítica" y se escudan en que el TEC fue aprobado "una vez fracasados los tratamientos de fármacos orales intentados desde su ingreso".

Sobre los recursos que han sido presentados por la familia, que también ha rechazado, el juzgado vuelve a avalar la actuación de los médicos. "No se apreció por este juzgador, ni por la magistrada que conoció del inicial internamiento, ni por la magistrada que conoció de los dos procesos penales instados, ni por los tres fiscales intervinientes en los dos procesos civiles ni en los dos procesos penales, ni por los médicos forenses intervinientes en los procesos civiles y penales tramitados, actuación alguna contraria a la ‘lex artis’ de los diferentes profesionales del ámbito sanitario", señalan en el auto.