Cañita Brava: "Estoy hablando con Santiago Segura para que haga ‘Torrente 6’ en A Coruña"

Manolo González Savín nació en As Xubias, en el año 1946. Pero nadie lo conoce por ese nombre. Cañita Brava es su alter ego y durante muchos años se recorrió los platós con sus canciones y sus delirantes espectáculos. Su leyenda comenzó en Os Castros, con una primera actuación en directo. Antes, había sido carretillero en el Puerto, pero el mundo del espectáculo llamó a su puerta y no lo desaprovechó.

Cañita está de nuevo de actualidad por el documental Yo no soy Cañita Brava, de Edu Lavandeira, que ha sido nominado a varios premios. Además, cuenta con hasta cinco propuestas diferentes para el próximo año, entre ellas la posibilidad de participar en la próxima edición de Gran Hermano.

Cuando llego al bar en el que me cita ya se ha terminado el primer café, un cortado, y está leyendo la prensa deportiva. "Son unos mamaletas", me dice mientras señala la imagen de los jugadores del Deportivo entrenando. "Se tiene que ir Del Pozo y más el otro", sentencia.

A ver si ganan el domingo.

Si no gana el domingo lo veo mal, mal, mal. No me gusta Luis César porque no está apoyando la cantera. A mí me gustó Joaquín Caparrós. Ese sí que apoyaba a la cantera. Íbamos a bajar, metió a cuatro del Fabril y quedamos décimos. Yo sé lo que es el fútbol. Ya verás como mete jugadores del Fabril si pierden con el Elche.

¿Qué otros retos tienes por delante tras el documental?

Mi vida está cambiando. Ahora tengo nuevo representante. Ya me ha organizado un pregón en Salamanca en diciembre, en la Nochevieja Universitaria. Tengo que trabajar mucho para que salga bien, por todo lo alto.

¿También volverás a los escenarios?

Sí que volveré. Tenemos que ensayar. Recuerdo mi primer concierto, en una sala de conciertos de A Coruña con todas las chicas con los mecheros encendidos. Fue todo un éxito.

De ahí, al Semáforo, con Chicho Ibáñez Serrador.

Estaba en ese y en otros dos programas más, como Crónicas Marcianas. También salí en el programa de Santiago Segura, Sabías a lo que venías.

¿Cómo es tu relación actual con Santiago Segura?

Muy buena. El año que viene hago la sexta película de Torrente.

Entonces, te veremos mucho en la pantalla próximamente.

También está negociando mi representante con Gran Hermano para meterme a mí. Dicen que sí, que para el año Cañita se sale. Se me va a amontonar chollo y voy a estar todo el verano liado. También me contrataron ya para las fiestas de Ordes. Voy a actuar con banda y empezaré a ensayar en enero, que en carnaval siempre actúo. Nunca falla esa fecha.

¿Te gustaría estar en Gran Hermano?

Sí, claro que sí. Ahí discuten, igual que en Supervivientes. Pero yo tengo una estrategia. Cuando discutan y se enfaden conmigo voy a decir: "Oye, yo no digo nada que todo se sabe". No voy a entrar en el trapo. Ya verás como todos votan por Cañita. Todos.

¿Cómo te ha influido ese nuevo representante?

Me busca muchas cosas. Tengo anuncios publicitarios también, que dan mucha pasta. Que ya me lo dijo él a mí. De Estrella Galicia ya hablaron conmigo. Te digo una cosa. Si abajo de la botella de Estrella Galicia pone "Cañita Brava", eso arrolla. Compran todos Estrella. ¿Tú qué dices? La compran todos.

¿Y cómo va a ser tu papel en Torrente 6?

Yo tuve que hablar con Santiago porque en la película corro, pero le pedí que no me haga correr cuesta abajo, que me caigo. Solo cuesta arriba. La mujer de Santiago dijo que era buena idea y que me diera más papel. Y voy a salir en 20 escenas. Estoy hablando con Santiago para que haga la película en A Coruña. Como la hagan entera aquí, me dan la calle. Cuidado.

También hablé con Santiago cuando estaba con el guion de la última y le dije: "Yo voy a imprevisar que lo hago mejor". Y dijo Santiago: "Sí, sí. Imprevisas muy bien". La gente dice que no hay nadie que imprevise mejor que Cañita. Que tengo una cosa electrónica en la cabeza.

¿Crees que te hará caso y la rodará en A Coruña?

Yo le dije: "Santiago, ¿te gusta A Coruña?". Y el me dijo: "Sí que me gusta, Cañita". Pero la productora quiere irse a Tailandia. Si rodamos en mayo o septiembre, podemos cambiar Tailandia por A Coruña. Y no puedo hacer nada, tengo que cumplir las órdenes del jefe. Ya fui a la República Dominicana y no me importaba.

¿Te siguen recordando lo de las "6.000 pesetas de whisky"?

Sí, hombre. Todos los días. Y me paran por la calle y me piden fotos también. Todos los días.

¿Quieres una calle en la ciudad?

Me dicen: "Lo mereces, maestro". A ver si me la dan.

¿Notas el cariño de la gente?

La gente me adora porque no me meto con nadie. Los niños vienen y me dan abrazos y besos. Los niños adoran a Cañita, porque yo los trato bien. Son más listos que las personas mayores.

¿Tienes claro el voto para el domingo?

Yo votaba, si estuviera vivo, al presidente Adolfo Suárez. Si estuviera Suárez, votaba por el centro. Porque era socio del Deportivo. La madre y la abuela eran coruñesas. No hacía como Rajoy, que era primero del Madrid y segundo del Deportivo. Apoyaba al Deportivo siempre. Con Suárez había 12 o 13 barcos en el puerto. Ahora solo hay dos.

¿Nunca te tentaron para apoyar a algún partido?

No, la verdad. Pero si mandara yo, A Coruña estaría mejor que nunca. Subidas de sueldo para todos.

¿Cómo ves la ciudad?

Está bonita, pero podría estar mejor. A la gente le faltan dineros, pero está bien.

¿Es posible que hayas actuado en todos los barrios de A Coruña?

Es así. Estuve en As Xubias, en Os Castros, Barrio de las Flores… Cuando se apoyaba a los de casa para actuar. Actué en la calle de la Torre en el Rosario. Si hubiese concejales como los de antes, ahora seguiría actuando en A Coruña.

¿Se cobraba mucho de aquella por actuación?

Unos 300 euros. Y el 15 de agosto, 500. También cobraba más el 25 de julio. Pero de eso hace 20 años. Hoy tengo que buscar que me contraten. Y hay bastante gente interesada.

¿Cuál fue tu actuación más memorable?

En Melide me gritaban "guapo" y me tocaban la mano las chicas. Tuve que llevar guardaespaldas. Actué hace 15 años en Os Castros. Las chicas querían tocarme y la seguridad les decían: "Quita la mano, no toques a Cañita". Llegaba la cola hasta el mirador. Más de 20.000 personas había. En la sala de fiestas del Garucha (por la Sala Garufa) también estaba lleno de gente y todos encendían el mechero cuando cantaba una romántica.