Monte do Pilar: El techo de la provincia de A Coruña está a más de 800 metros
La cima coruñesa se encuentra enmarcada en el corazón de los montes de Bocelo, en las tierras de Melide, y es al mismo tiempo la cumbre más baja de todos los techos provinciales de España
14 abril, 2024 05:00Desde los rincones costeros a las comarcas rurales del interior, el grueso de la geografía gallega se encuentra dominado en su horizonte paisajístico por un sinnúmero de cimas montañosas. En el caso particular de Galicia es preciso recordar que el territorio asciende de forma escalonada desde la costa occidental hasta las montañas limítrofes orientales, cuyas cotas en esta zona llegan a superar los 2.000 metros de altitud sobre el nivel del mar. Sin duda, ellos son los auténticos techos de Galicia.
No obstante, existen otras elevaciones que, aunque menos pronunciadas, constituyen de igual manera excelentes miradores naturales. Sin ir más lejos, la costa norte de A Coruña se encuentra atravesada por varios sistemas montañosos de perfil suave y solitario derivados de la Dorsal Galega, entre los cuales podemos destacar sierras como la de la Capelada, do Xistral o Faladoira.
Pero, ¿dónde se encuentra exactamente el techo de la provincia de A Coruña? Es necesario desplazarse hasta los límites del municipio de Melide, concretamente al corazón de la sierra de los montes de Bocelo, para encontrar el punto más elevado de esta provincia gallega. Se trata del conocido como Monte do Pilar, también denominado Coto da Anduriña, cuya cima se sitúa a más de 800 metros de altura sobre el nivel del mar.
Curiosamente, esta loma coruñesa es al mismo tiempo una de las cimas más bajas de todos los techos provinciales de España. En lo que respecta al paisaje de la zona, la montaña del Pilar se encuentra dominada por un vértice geodésico, una caseta de control forestal y la imponente silueta de varios molinos de viento pertenecientes al parque eólico que recorre gran parte del cerro.
Así es el techo provincial de A Coruña
El punto más alto de la provincia de A Coruña cuenta con su propia senda homologada bautizada como la PR-G 259 Ruta dos Montes do Bocelo-Teito da Coruña, cuyo punto de inicio y final se sitúa en el entorno del pequeño pueblo de As Figueiras, dentro de los límites de Melide. Se trata de un itinerario de lo más sencillo y agradable que permite al caminante disfrutar de la riqueza natural, ambiental y paisajística que envuelve al techo más alto de la provincia de A Coruña. Además, la ruta por los montes de esta sierra de Bocelo descubre a su paso un sinfín de escenarios de enorme belleza, atravesando todo tipo de bosques autóctonos y pistas forestales de pendientes muy suaves sin apenas desnivel.
Lo cierto es que son sólo alrededor de 6,30 kilómetros separan la parte alta de la aldea de As Figueiras de esta gran cima coruñesa. La ruta no tiene pérdida, pues únicamente tendremos que seguir la estela de los aerogeneradores para alcanzar el vértice geodésico situado a unos 803 metros de altitud.
Lo mejor de todo es que mientras ascendemos al Coto do Pilar, el paisaje verde de este rincón gallego se va abriendo camino y ofrece al senderista una panorámica extraordinaria sobre la comarca de Terra de Melide y los terrenos del Alto Tambre. Además, sobre todo para aquellos que prefieren realizar el ascenso más rápido, cabe destacar que también es posible alcanzar esta cumbre en coche, pues existe una pista que finaliza a escasos metros del punto más elevado del cerro, junto a la caseta de vigilancia habitada y la torre de comunicaciones.
Qué ver en los alrededores del Monte do Pilar
A apenas 20 minutos en coche del techo del mencionado techo de la provincia de A Coruña se localiza un municipio que oculta entre sus límites una increíble fervenza y un dolmen muy bien conservado. Hablamos de la localidad de Toques, situada a escasa distancia de la frontera con la provincia de Lugo y cuyo máximo atractivo se encuentra en la famosa Fervenza de Brañas.
Este extraordinario salto de agua que roza los 40 metros de altura conforma un auténtico espectáculo visual para los sentidos, dejando caer sus aguas con fuerza entre las paredes rocosas y una densa vegetación autóctona. Además, la cascada en cuestión se enmarca junto a un antiguo molino restaurado que en el presente conforma una auténtica joya patrimonial y el testimonio vivo de la cultura popular de la molienda en la comarca.
Al margen de este tesoro natural, también merece la pena tomar un pequeño desvío y visitar el dolmen de Forno dos Mouros, uno de los mejor conservados de Galicia. Su origen esconde más de tres milenios de historia y en el presente se enclava en los terrenos que se extienden por la Serra do Bocelo, muy cerca del antiguo Camiño Real.