Hasta tres provincias gallegas estuvieron implicadas en la boda de Laura y Ramón, dos controladores aéreos que se conocieron trabajando en el aeropuerto de A Coruña y que se han casado en el lugar menos esperado: un pazo en el rural de Lugo.

Ella es de Barcelona y él es de Madrid, pero se enamoraron en A Coruña y tras varios años han decidido sellar su compromiso. En vez de viajar hasta alguna de las dos grandes ciudades de España, la pareja decidió casarse en lo profundo de Galicia e invitar a todos sus amigos a una degustación memorable de nuestra gastronomía, contratando al restaurante pontevedrés O Eirado da Leña, que cuenta con una estrella Michelin.

Laura y Ramón, entrando en el Pazo de Sáa, en Láncara Cedida

Una boda en Lucus Augusti

La ceremonia religiosa tuvo lugar en la Catedral de Lugo en un día muy especial para la ciudad: la celebración del Arde Lucus. En esta fiesta anual los habitantes de la capital provincial recuerdan su pasado romano y se visten como hace dos mil años, con todo tipo de actividades culturales para recordar la historia de la que fue la primera ciudad de Galicia.

Uno de los momentos de la boda entre Laura y Ramón Cedida

En esta tesitura y vestidos de novios se casaron Laura (con un traje de Toh-Toh) y Ramón, en una ceremonia emotiva que dio paso a un viaje de tres cuartos de hora hasta el pazo de Sáa (también llamado de Santiago de Cedrón), en la parroquia de Cedrón de Láncara, un pueblo cercano a Sarria en lo profundo del rural lucense. Láncara es conocido por ser el lugar de origen del padre de los revolucionarios cubano Fidel y Raúl Castro.

Este palacio es desde hace años propiedad de los padres de Ramón, pero no estaba preparado para un banquete, por lo que tuvieron que transformarlo. La empresa coruñesa de eventos Sugema y la wedding planner María de Lillo (En Petit Comité WP) se pusieron manos a la obra para conseguir que uno de los pazos más antiguos de Galicia, originario del siglo XV, celebrase una boda por todo lo alto. Hubo que montar una cocina desde cero y tres carpas.

El aperitivo en el pazo Cedida

La carpa del banquete Cedida

Madrileños y catalanes probando la mejor gastronomía gallega

La mayor parte de los 230 invitados eran de Madrid o Barcelona, por lo que la boda también sirvió de oportunidad de sumergirse en la gastronomía gallega. Los responsables del Eirado da Leña pusieron una estación de tortillas de Betanzos, otra de bivalvos, otra de empanadas y otra de quesos gallegos, además de la inevitable pulpeira. 

Tras la comida, para la fiesta se instaló otra carpa donde la celebración continuó con el Dj Sergio Ureña de Music 4 The People que extendió la fiestas hasta altas horas de la mañana. Las flores corrieron a cargo de Floristería Alba, y las fotos son de Graciela Vilagudin & David Cons.

El baile nupcial de Laura y Ramón

Temática de aeropuertos en las mesas

Para hacer un guiño a la profesión que ambos comparten, las mesas de las bodas tenían los códigos de aeropuertos en los que ellos han trabajado a lo largo de su carrera. La temática aeroportuaria también se notó en el regalo a los invitados, un abridor de botellas con forma de avión.

Todas las mesas se llamaban con códigos de aeropuertos, y la de A Coruña era la presidencial