El plato típico de Lugo que no se come en el resto de Galicia y es un icono vintage
Se trata de una receta de la gastronomía gallega de los años 50 y 60, que está cayendo en el olvido
10 septiembre, 2024 17:32Galicia presume de una gastronomía rica y variada, con emblemáticos platos, como el pulpo á feira, los pimientos del Padrón, el churrasco, la tortilla de Betanzos y el raxo con patatas. Sin embargo, si hablamos de una ubicación en concreto como es Lugo, es necesario hablar de un icono vintage de la cocina gallega.
No es el capón de Vilalba ni tampoco el butelo de A Fonsagrada. Se trata de un plato que se inventó en el Pazo de los Quiroga de Lugo: el lacón trufado con huevo hilado. Es un clásico de la cocina gallega cuyo origen se remonta a las cocinas de los conventos y abadías del siglo XX, aunque es en la pequeña parroquia de Pobra de San Xiao, en Láncara (Lugo), donde se sazonó con trufas y otras especias.
El lacón con grelos aparece en la carta de muchísimos establecimientos de hostelería de toda Galicia, pero con el lacón trufado con huevo hilado no sucede lo mismo. En los años 50 y 60 era un plato esencial en las grandes celebraciones de la sociedad gallega, si bien lamentablemente está cayendo en el olvido.
Aunque no goza de la fama de entonces, se trata de una receta deliciosa que debes probar si estás de visita en la provincia de Lugo. Otra opción es prepararlo en casa, aunque para ello será necesario tener algo de maña en la cocina y los siguientes ingredientes: carne de cerco magra, trufadas picadas, huevos, zanahorias, pan rallado, pimienta blanca molida, hojas de laurel, vino de Jerez, brandi y sal.
Si lo encuentras en la carta de algún restaurante o pequeño establecimiento de comida lucense, mucho mejor, sino en el gigante Google tienes varias recetas para elaborar este clásico plato de Lugo.
Otro plato delicioso de la cocina lucense
El capón de Vilalba es un plato estrechamente vinculado a la gastronomía lucense y, concretamente, a la época navideña en la provincia. El capón es el "pollo que se castra cuando es pequeño y se deba para comerlo" y el de Vilalba presenta una alta calidad que triunfa en sus diferentes versiones.
"Los 25 días de fase final de engorde y el propio entorno dan como resultado una materia primera sublime", apunta Turismo de Galicia. "Una receta que no falla es el Capón de Vilaba relleno de verduras".
Por otra parte, el municipio de A Fonsagrada ofrece la oportunidad de degustar un embutido típico: el butelo; mientras que Burela es un excelente sitio para disfrutar de una buena pieza de bonito, ya sea en empanada, cocido, asado a la parrilla...