Ramón Vidal en la Cantina Sixtina.

Ramón Vidal en la Cantina Sixtina. AS

GastroGalicia

La Cantina Sixtina: el cachopo con más arte de A Coruña

Este local de la Avenida de Oza apuesta por la gastronomía astur-galaica y le debe su nombre a la afición de su dueña por la historia del arte y la Capilla Sixtina

7 febrero, 2020 16:26

Michelangelo, Rafaello o Botticelli son mundialmente conocidos como pintores del Renacimiento pero desde hace año y medio en la ciudad herculina también son populares por su sabor, ya que forman parte de la selecta carta de cachopos de la Cantina Sixtina. El restaurante, que abrió sus puertas en noviembre de 2018 en la Avenida de Oza, le debe su nombre a la afición de una de sus dueñas, María, por la historia del arte y en particular por la Capilla Sixtina, que le impresionó profundamente durante un viaje a Roma. La oferta gastronómica de este local se mueve entre Asturias y Galicia, el boca a boca y las redes sociales son su mejor publicidad y ya cuentan en su haber con un premio nacional al mejor cachopo por su receta del cachopo sixtino.

Ramón, el dueño del restaurante y pareja de María, cuenta que su apuesta por ofrecer al público coruñés esta especialidad se debe a su afición y la de su pareja de viajar a Asturias, una comunidad de la que les encanta “su espectacular gastronomía, su gente y sus paisajes”. La clientela (desde que abrió el local han visitado el lugar aproximadamente 2.500 comensales) es generalmente mayor, pero los responsables del negocio cuentan que últimamente son cada vez más numerosas las pandillas de jóvenes que deciden reunirse alrededor de un cachopo para reencontrarse o celebrar.

La renovación del establecimiento (que tiene más de 50 años y en el pasado fue A Dorna y Casa Seve) es constante, ya que sus dueños actualmente estudian la posibilidad de unirse a plataformas de pedidos online como Just Eat, además de que están ultimando las recetas de un cachopo elaborado con pescado orientado al público vegetariano y otro con pan rallado sin gluten para los intolerantes. Este cuidado exhaustivo de los detalles y el cariño que se regala a los comensales da sus frutos, ya que personalidades como el exalcalde Xulio Ferreiro o el Premio Nacional de Literatura Alfredo Conde se han sentado en las mesas de la Cantina a degustar los más de 400 cachopos que elaboran mensualmente.

“Dar el mejor servicio al menor precio”

¿A qué se debe el nombre de Capilla Sixtina para un local de cachopos?

A todo el mundo le llama la atención y como muchos suponen el nombre tiene mucha relación con la Capilla Sixtina. Cuando María y yo la vimos en directo, a ella le impresionó muchísimo y como vio que el nombre no estaba registrado aún no lo pensamos y se lo pusimos. Para presentar los cachopos nos inspiramos en el arte (Rafaello, Botticelli…) y los platos que vamos incorporando en el menú siempre reciben nombres de pintores o arquitectos célebres.

"Para presentar los cachopos en nuestra carta nos inspiramos en el arte"

ramón vidal

¿Cuál es la especialidad más demandada y los puntos fuertes del menú?

Sin duda lo más pedido es nuestro cachopo premio nacional, el sixtino, que contiene ternera gellega suprema, chicharrones, grelos, queso de arzúa y filloas. No dejamos a un lado los productos de la tierra y nuestros clientes nos demandan mucho los chorizos a la sidra y el pastel de cabracho, todo acompañado de una buena sidra. También somos gente de costumbres, los sábados tenemos fabada y los domingos callos, a parte de las jornadas como la del cocido en la que estamos inmersos ahora y las lacónicas que llevamos a cabo en enero. Nuestro objetivo es dar el mejor servicio al menor precio sin perder calidad, apostamos por precios populares además de que un cachopo sirve para que vayan bien comidos dos comensales, por ejemplo.

¿Por qué considerasteis buena apuesta este tipo de restaurante en A Coruña?

Estudiamos la competencia y vimos que el cachopo era un segmento de mercado que aún estaba poco explotado, nos arriesgamos y nos salió bien. Podría decirse que esta especialidad asturiana está de moda y consideramos que hay mucha gente en la ciudad que no sabe lo que es, por lo tanto queremos fomentar la cultura del cachopo y trabajamos diariamente para alcanzar el objetivo.

¿Qué tipo de comensales se sientan en vuestras mesas? ¿Os beneficia la zona dónde está el local?

Tenemos clientes que vienen diariamente y uno en especial es una maravilla porque hablar con él es como abrir una enciclopedia, aprendes mientras conversas. Una gran parte de la gente que nos visita son de edad avanzada,  ya que nuestro restaurante está incluido en el programa local de ayudas a personas con pocos recursos y nuestros menús les salen a mitad de precio.

Este público a veces tiene riesgos porque cuando parejas de ancianos que vienen siempre lo dejan de hacer te preocupas porque no sabes sus circunstancias y piensas que les ha pasado algo, muchas ya son como de la familia y vienen al restaurante cada día simplemente a relacionarse, ya que es el único momento del día en el que están acompañados. Últimamente y gracias sobre todo a las redes sociales (Facebook, twitter e Instagram) cada vez son más los jóvenes que se acercan a probar nuestras especialidades.

¿Cuál consideras que es el secreto de vuestro éxito?

El núcleo de todo es una buena materia prima y la nuestra es la ternera gallega suprema que nos trae un proveedor local casi todos los días. Un buen cachopo no se consigue simplemente rebozando dos filetes, sino que hay que saber relacionar bien los ingredientes que se incluyen y darle el toque personal. El nuestro es el pan rallado japonés que utilizamos para cocinar, que absorbe menos aceite y le da un toque diferente a la carne, además de que cocinamos en cachoperas adecuadas (sartenes en forma rectangular especiales para elaborar este plato).

"Uno de nuestros secretos es el toque especial que aporta el pan rallado japonés"

ramón vidal

¿Cómo se dibuja el futuro de la Cantina Sixtina?

Siempre intentamos innovar y pronto ofreceremos una tabla de cachopines para que la gente pueda probar todos los tipos que tenemos sin tener que limitarse solo a una opción. Si el negocio sigue avanzando nos planteamos la posibilidad de ampliar el restaurante con otro local, pero mientras nos centramos en atender en condiciones a todos los tipos de público que se sientan en nuestras mesas, donde las personas vegetarianas y veganas son cada vez más numerosas. Pensando en ellos estamos estudiando la elaboración de recetas de cachopo con merluza, rape o bacalao, además de incluir en nuestra cocina el uso de pan rallado sin gluten para los intolerantes.