¿Por qué en el barrio de Os Mallos de A Coruña hay tantas (y buenas) pulpeiras?
La cercanía de la estación de tren y el precio de los bajos comerciales son algunas de las razones que explican la concentración de este tipo de establecimientos
11 octubre, 2022 06:00La de Lola (antigua de Melide), A nova Lanchiña y la de Arzúa son las tres pulpeiras que han convertido al barrio coruñés de Os Mallos en uno de los mejores sitios de la ciudad para disfrutar del pulpo a feira. La razón de esta concentración de negocios especializados en una de las recetas estrella de la gastronomía gallega no está clara, pero sus propietarios tienen alguna teoría, que han contado a Quincemil.
Rafa González, hijo de los fundadores de A Nova Lanchiña, cuenta que la cercanía de la estación de tren de A Coruña es uno de los motivos que pueden explicar el nacimiento de las pulpeiras del barrio. Tanto por el mayor flujo de personas que llegaban de otras partes de la comunidad. "Los que venían a la capital a hacer algún trámite y antes de marcharse se tomaban el pulpo", cuenta Rafa. Como de los propios fundadores de las pulpeiras, que llegaron A Coruña desde el interior de Galicia.
Lo cierto, el mejor pulpo a feira de la tierra se toma ahí, con importantes sedes pulpeiras como Lugo, que este fin de semana celebra su San Froilán, Arzúa o Melide. Referencias gastronómica de donde proceden los fundadores de los establecimientos mencionados. Incluso la nueva pulpeira Caseta de Aurora, que está en Vioño pero lindando con Os Mallos, también tiene su origen en Lugo.
Bajos comerciales más económicos
Ainhoa Neira, tercera generación al frente del la pulpeira de Lola, también hace referencia a la cercanía de la estación de tren como un agente que propició el crecimiento de este tipo de negocios. Sin embargo, también menciona lo económico que eran los bajos en la época en la que estas pulpeiras comenzaron a instalarse, allá por finales de la década de los años 60 y 70.
En concreto, la que por aquel entonces se llamaba ‘La pulpeira de Melide’ llegó a Os Mallos en 1969. Una época en la que el barrio seguía creciendo e urbanizándose a borbotones, con la llegada de la nueva clase trabajadora, que venía a la ciudad procedente del mundo rural. "Había trabajadores de todo tipo, como conductores de autobús, empleados de Fenosa y gente que venía del rural para establecerse en A Coruña", contó a Quincemil José Salgado, presidente de Distrito Os Mallos, gerente del parking del barrio e impulsor de las primeras escuelas de la zona.
Sea el motivo que fuere, la realidad es que en este vecindario, que a veces solo sale a los medios de comunicación por noticias relacionadas con la ‘okupación’ o el trapicheo de drogas, es el lugar de A Coruña al que ir a tomar pulpo a feira. Bien lo sabe Luis Miguel Sánchez, dueño de la pulpeira de Arzúa, que no se posiciona respecto a la cuestión de este artículo, pero sí que experimenta como cada verano turistas nacionales (madrileños) e internacionales disfrutan de la receta gallega en su establecimiento.