Ya no hay Niño Jesús. Ahora se llama Peru [Pedro, en euskera]. Y, desde luego, los pastores ya no viajan a Belén. Los villancicos navideños se han despojado de su identidad para no ofender a otras realidades religiosas.
Ha ocurrido en determinadas escuelas públicas vascas. La Navidad mantiene su estructura como acontecimiento cultural, pero despojado de cualquier elemento religioso.
Una iniciativa que tiene como propósito la inclusión de determinadas minorías -especialmente en los colegios en los que hay una mayor diversidad cultural- y la reducción de estas fechas a un acontecimiento laico.
Esta decisión queda reflejada en los villancicos que los niños cantan estos días en las aulas de las escuelas públicas vascas. Gabon Gabaren, el tradicional cántico que vertebra las navidades de buena parte del País Vasco y de Navarra, ha sido modificado del siguiente modo.
Si el villancico original rezaba...
“Jesus jaio da Belenen”
[“Jesús nació en Belén”]
Su adaptación a la versión laica elimina la referencia a Jesús y la de Belén.
“Peru jaio da hementxe”
[“Peru nació aquí”]
El objetivo de esta interpretación es la de despojar a la Navidad de su sentido religioso. Que el tradicional Niño Jesús deje de ser protagonista. Y que el único que acapare los versos cantados por los pequeños alumnos sea el Olentzero, el famoso carbonero que trae los regalos en estas fiestas del norte de España.
En definitiva, que la Navidad quede reducida a “un hecho cultural”, adelanta El Correo citando a la agrupación vasca de familias Ehige.
La letra original de este villancico prosigue del mismo modo:
“Artzainak joan ziraden Jesusen bila”
[“Los pastores fueron en busca de Jesús]
Pero su adaptación sigue hablando de Peru:
“Artzainak joan ziraden Peruren bila”
[“Los pastores fueron en busca de Peru]
Estos cambios han sido introducidos en la escuela Ingeniero José Orbegozo, de acuerdo a esta información. Con estas modificaciones se pretende no ofender a identidades religiosas diferentes de la tradición católica.
En otros centros se han tomado iniciativas similares. Por ejemplo, en el Luis Briñas (en Bilbao) los villancicos han sido modificados para que encajen en una versión laica:
“Jesus jaio dela”
[“Jesús ha nacido”]
Pasa a ser:
“Negua heldu dela”
[“El invierno ha llegado”]
O en el Gabriel Aresti (también en la capital vizcaína), donde sólo se cantan villancicos que hagan referencias al Olentzero.
Los cambios cuentan con el apoyo de la citada agrupación vasca de familias Ehige. En las escuelas ya no se canta al Niño Jesús, sino al niño Peru.