Maribel, el ama de casa que quitaba cruces amarillas en su playa: "Los indepes quieren una guerra"
Lleva más de 40 años en la playa de Llafranc y nunca ha tenido problemas. Estos días se ha hecho viral por enfretarse a separatistas que convirtieron la playa en un cementerio.
22 mayo, 2018 14:53Noticias relacionadas
“Llevo toda mi vida en esta playa. La considero mi playa. Nunca ha habido ningún problema, ni de convivencia ni de nada. Pero ahora vienen a plantar cruces para que esto parezca un cementerio. Para provocar. Para que no peleemos. Los independentistas no están haciendo política; los independentistas nos provocan porque quieren una guerra”.
Lo lamenta Maribel Llorens, catalana de 62 años, residente en Sabadell pero con su segunda residencia en Llafranc (Girona). Ella es la persona que protagoniza un vídeo que se hizo viral ayer: salió de su casa y ella sola se enfrentó a un grupo de personas que llenaba la playa del pueblo de cruces amarillas. Al final las arrancó y se llevó el aplauso de los bañistas, que no se sentían cómodos cuando vieron que les habían convertido la arena en algo parecido a un cementerio.
Un cementerio en una playa familiar
“Es un pueblo pequeño y con poco turismo. Nos conocemos todos. Es una playa con muchas familias, muchos niños, con gente impedida porque tiene buena accesibilidad”. El lunes era el último día de un puente largo, puesto que era fiesta en muchos municipios de Cataluña. Maribel había ido a pasarlo a Llafranc. Y cuando bajó ese lunes a la playa, se encontró con que estaba sembrada de cruces.
“Me chocó mucho ver aquello. Casi 40 años llevo aquí y en mi vida me había encontrado en una situación así. Vinieron unos niños del pueblo a preguntarme quién se había muerto. Les dije que no, que por que decían eso, y ellos me preguntaron que entonces por qué había tantas cruces. Yo les dije que seguro que aquello era un juego, pero se lo dije para tranquilizarlos. Pro en realidad ya me había acabado de indignar del todo”.
Maribel no pudo reprimirse y empezó a pedirle explicaciones a las personas que ponían las cruces. “Me fui directa a por ellos y les pregunté que qué hacían. No supieron contestarme. Les preguntaba que por qué hacían eso, que cual era el motivo. Que por qué invadían la playa que es de todos, que no es suya. Los que ponían las cruces no son ni del pueblo. Habían venido de fuera a apoderarse de la playa. Creo que son de Palafrugell. Yo les preguntaba que por qué ensuciaban la playa que es de todos y no me sabían ni responder”.
"No les tengo miedo"
Maribel entonces montó en cólera y les gritó, mientras trataba de arrancar algunas cruces. “Se me arremolinaron unos cuantos y me grababan. Yo también les grabé a ellos, para que no sean los únicos. Por si hay que ir al juzgado. Para que vean que, aunque yo estaba sola, no les tengo miedo”.
Recuerda Maribel que “esto es público. Es de todos. Yo no tengo por qué aguantar que mi playa de toda la vida se convierta en un cementerio porque ellos quieran. Que monten el cementerio en su jardín. Que llamen a los medios y les expliquen lo que han hecho. Pero que no invadan una playa familiar en la que nunca ha habido ningún problema, porque de verdad que me hierve la sangre”, pide, y recuerda que “esto es una playa por si no se han dado cuenta. Las cruces están en el cementerio. Allí tengo yo a mis padres enterrados y voy a rezarles y a ponerles flores. Pero no en la playa”.
Maribel no sale nunca a quitar lazos amarillos, como las brigadas de limpieza. Ni se lo plantea. “Ni siquiera entro en eso de los lazos. Pero es que convertir una playa familiar en una cosa parecida a un cementerio me parece muy fuerte, y una falta de respeto. Para los que no pensamos como ellos, para la gente que no tiene nada que ver con esto, y para los niños que no saben de qué va todo este asunto y van preguntando si ha muerto gente. ¿Qué pasa? ¿Es que nos quieren enterrar vivos a los que no pensamos como ellos?”
"Lo único que quieren es provocar peleas"
Maribel considera que “la única explicación posible es que quieran provocar a la gente. Son provocaciones. No les preocupan los presos en realidad. Lo único que quieren es provocar a los que piensan diferente, para que haya pelea y agresiones, para poder decir que les han pegado, para que haya una guerra”, concluye. Maribel plantea el ejemplo contrario: “Imagina lo que me harían a mí si yo pusiera una bandera de España en mitad de la playa. Nosotros no la ponemos. Nadie va a hacer eso, porque sabemos que la playa es de todos”, lamenta.
Maribel protesta porque “no se tomen las medidas para evitar estas cosas. Yo pago mis impuestos en Llafranc, la playa es de todos, pero al final la monopoliza esta gente y hay que callarse porque si no te amenazan, te graban y te insultan. Ya está bien”, pide con hartazago, recordando que “Yo soy catalana, nacida aquí, de madre catalana y abuelos catalanes. Yo hablo catalán. Yo soy más catalana que muchos de ellos. Llevo en esta playa casi cuarenta años. Mis tres hijos se han criado aquí, han veraneado siempre aquí. Pero ahora tengo que estar aguantando que ellos hagan lo que quieran con los espacios públicos”.
Siente Maribel “mucha pena. En esto han convertido Cataluña: en un sitio donde da miedo vivir. Donde te convierten una playa en un cementerio y los demás tenemos que callar. En un sitio donde los amigos se pelean por la política. Y más que van a calentar esto. Ya han dicho que van a hacerlo durante todo el verano. La única explicación que yo le veo es que quieran provocar a la gente para que haya conflictos y guerra”. Por eso mismo cree que este año “habrá enfrentamientos, habrán conseguido su objetivo”.