Las locuras de la alcaldesa Pinilla, como la plaza de toros para una actuación de Julio Iglesias

B.C.

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Los delitos de la señora del viento

Durante años, el consistorio había presumido de prosperidad, con viajes de vacaciones gratis a los vecinos, obras públicas de lujo, festejos orgiásticos. Aquello parecía Marbella, en pequeño y en Aragón. Esta es la historia de La Muela y de su alcaldesa. Su afán de gastar dinero no tiene parangón.
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La historia de La Muela, un pueblo al sur de Zaragoza, y su alcaldesa, María Victoria Pinilla

La Muela es un municipio español perteneciente a la comarca de Valdejalón en la provincia de Zaragoza (Aragón). Se trata de un lugar que a mediados de los años 80 apenas tenía un millar de habitantes. 25 años después, su población se había quintuplicado. Coincidió con la época como alcaldesa de una mujer a la que se la iba a conocer como "la reina del viento": María Victoria Pinilla.
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Viento en popa

Pinilla gobernó la localidad desde 1987 hasta el año 2011. 25 años en los que el pueblo vivió una transformación de 180 grados. Con el impulso de la aparición de la energía eólica, la alcaldesa decidió darle al pueblo un cambio espectacular: instaló centenares de molinos de viento en las lomas de los montes que rodean el pueblo. Y eso generó un crecimiento espectacular. Sembró el lugar de esos enormes artefactos con tres hélices. El tren vital de los vecinos, el numero de habitantes y la calidad de vida aumentaron. En La Muela todo iba viento en popa. En la imagen, un plano de la localización del municipio con respecto a Zaragoza.
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Molinos de viento por doquier

Había comenzado una época de desenfreno en la pequeña localidad. 30 años después, la alcaldesa ha sido condenada a 16 años de cárcel por sus gestiones al frente del municipio. Pero nadie entonces ponía freno a nada de lo que allí estaba ocurriendo. Los beneficios de la colocación de los molinos de viento fueron a parar a la construcción de toda clase de obras faraónicas, subvenciones de viajes del ayuntamiento para viajes de los vecinos por el Caribe, o para la colocación de personal en el ayuntamiento sin pasar antes por oposiciones transparentes.
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La era de los proyectos faraónicos: la plaza de toros

Uno de los primeros proyectos que Pinilla puso en marcha sale en el Libro Guiness de los Récords. Pinilla ordenó construir una enorme plaza de toros para un concierto que había conseguido traer al pueblo. Ni más ni menos que el mismísimo Julio Iglesias cantando en un municipio de apenas 1000 habitantes en lo rural. Tardaron 40 días en construirla. Es una de las pocas de las plazas cubiertas del mundo. En la actualidad apenas se utiliza.
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El sin sentido de los museos para todo

Todos los proyectos faraónicos de la alcaldesa de la Muela se situaron al norte del pueblo, muy juntos, como apilados entre sí. Una de las fiebres que le entró en los últimos treinta años fue cuando puso a la gente a construir museos sin sentido. Uno de ellos: el Museo de La Vida.
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El sinsentido de los museos para todo (II)

Pinilla puso a funcionar en 25 años, todo en teoría para uso y disfrute de los vecinos, tres museos, un auditorio y un centro deportivo e incluso un spa. Uno de esos faraónicos museos, que todavía hoy nadie sabe para qué sirve, tiene el nombre del Museo del Viento.
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El parque temático de lujo de la alcaldesa de La Muela

El museo del Aceite fue otra de las extravagancias de Pinilla en sus años de mandato. Todo el dinero provenía del boom de la energía eólica. 500 molinos instalados en los montes de la comunidad lo permitieron todo. En pocos años La Muela se convirtió en una apropiada ciudad dormitorio de Zaragoza. Había un problema: todo aquello no se podía pagar.
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Un complejo deportivo para profesionales inexistentes

De todas las desorbitadas ideas de la alcaldesa del viento, sin duda la extravagancia más cara fue la del complejo deportivo instalado en el norte del pueblo. 19 millones de euros. Un enorme campo de fútbol. Una piscina. Varias pistas de pádel. Spa. Jacuzzi. Un lugar con capacidad para cinco veces más personas que las que residían y residen en el municipio.
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Una piscina olímpica en la que nadie va a nadar

Las piscinas, una de ellas olímpica y cubierta, las otras al aire libre, fueron instaladas muchos años atrás. Durante la época de bonanza en La Muela, la alcaldesa logró surtir a sus vecinos de toda clase de privilegios. Y de ese modo se mantuvo en el poder durante 25 años consecutivos.
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Se destapa el caso Molinos

Hace diez años saltó a los medios el caso Molinos. Diversas personas del ayuntamiento, entre ellas la alcaldesa, acabaron detenidas. Las investigaciones policiales destaparon una red corrupta manejada desde el corazón del ayuntamiento.
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La caída a los infiernos de la todopoderosa alcaldesa

Habían terminado los días de vino y rosas de la regidora. Pese a todo, tan solo pasó 4 meses en prisión en todos estos años. Ahora, al final de la escapada, aunque cabe recurso para su sentencia, comenzará a cumplir las penas de una de las condenas más elevadas de los últimos años.
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25 millones de euros en deudas

El municipio pasó de ser uno de los que mayor crecimiento habían exhibido a ser uno de los más endeudados. La bonanza económica era tan solo un espejismo. La deuda actual del ayuntamiento ronda los 25 millones de euros. Es uno de los municipios con mayor porcentaje de imputados por habitante. Un delirio, un agujero tributario de 8,5 millones. Y Pinilla en el centro de la trama.
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Fraude, cohecho, blanqueo y malversación

La exregidora está condenada a todo lo condenable, algo así como un doble póquer de ases: cohecho, blanqueo de capitales, fraude a la administración pública, prevaricación administrativa y de malversación, así como otros contra la Hacienda Pública. También le cayó en la sentencia que se acaba de conocer fraude, tráfico de influencias, fraude de subvenciones y otro delito por cooperadora en un fraude a la administración.
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De una granja de conejos, al lujo y luego a la cárcel

El primer empleo que tuvo en sus tiempos mozos la alcaldesa fue la de gestionar una granja de conejos. De ese lugar medró a las cuentas bancarias. Luego a los coches de lujo. Luego a un chalé en la República Dominicana. Todo con los parques eólicos. Y ahora a la cárcel.