"Esperamos, en el último corazoncito que nos queda, que no sea ella", ha asegurado Adrián Federighi, portavoz de la familia y cuñado de Blanca Fernández Ochoa, la tarde de este miércoles. Unas horas antes, en torno a las 12:30 del mediodía, un agente de la Guardia Civil fuera de servicio y acompañado por su perro encontraba el cadáver de la deportista en la zona de Collado del Rey, al pie del pico La Peñota, en Cercedilla, Madrid. Presentaba un traumatismo en la cabeza.
Sin embargo, las autoridades no han querido acelerar el proceso y no se ha confirmado de manera oficial que se trate de ella, a la espera de los resultados que pueda arrojar el análisis forense. Y, aunque la familia se agarre a la última esperanza, ellos mismos reconocen la obviedad de que ha aparecido un cadáver en el sitio donde se buscaba a la medallista olímpica.
"Como no nos lo han podido confirmar, nos vamos a agarrar a ese clavito", ha proseguido Federighi. "Si es ella, pues Blanca está en la montaña que ha amado", ha añadido, y ha comentado que, de momento, ningún familiar ha llegado a reconocer el cuerpo. El cadáver que se ha encontrado llevaba fallecido entre siete y 10 días, algo que también concuerda con los días en los que Blanca había desaparecido. "Estamos con la última esperanza de que sea otro desenlace", ha insistido Federighi.
Encuentran el cadáver de Blanca Fdez Ochoa
A pesar de la cautela con la que se está procediendo desde el puesto de control que ha conducido las batidas estos días, numerosas personalidades han salido en redes sociales trasladando el pésame a la familia. Entre ellas, se encuentra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha lamentado el desenlace. "Quizás el presidente tenga más información que yo", ha comentado Federighi.
Con este hallazgo se pone fin a una búsqueda que arrancó el pasado domingo y que ha concluido 11 días después de que Blanca Fernández Ochoa desapareciera. En el momento en el que el portavoz familiar se ha retirado, a casa para descansar, se ha procedido a levantar el campamento del puesto de control desde el que se organizaban las batidas.