Paloma Barreto fue encontrada muerta en un piso de Avilés (Asturias). La joven transexual trabajaba como escort y se había recorrido España ofreciendo sus servicios sexuales. Barreto había pasado por ciudades como Valencia o Madrid, donde se anunciaba en web de citas y donde se presentaba como "la musa del sexo". Sara Fernández -su nombre real- era muy activa en redes sociales, a través de donde captaba a sus clientes.
Pero todo se torció en la noche del viernes 20 de septiembre. Una mujer, que se encontraba realizando las labores de limpieza, encontró el cuerpo de la joven sobre la cama. Le habían cosido a puñaladas. Tenía más de 15 por todo el cuerpo. Los agentes encargados del caso han detenido a una joven en León, de origen brasileño y vestido de mujer, como presunta autora de los hechos. Desde la Plataforma por los Derechos Trans, piden que el asesinato de Barreto sea considerado como "un delito de odio", además de la aprobación una Ley Trans Estatal, "específica, transversal e integral".
La joven tenía 38 años y había nacido en Brasil
Sara Fernández tenía 38 años y había nacido en Brasil. Bien joven, cogió todas sus pertenencias, hizo las maletas y se marchó de su ciudad. Quería encontrar un futuro mejor, con mayores oportunidades. Tras esto, desembarcó en España. Aquí, utilizaba el nombre de Paloma Barreto para ejercer la prostitución a través de páginas webs especializadas y foros. Había trabajado en distintos puntos de nuestra geografía, como por ejemplo País Vasco, Valencia, Madrid o Galicia. Hace un par de meses también se había empleado en Oviedo hasta, finalmente, llegar a Avilés. Allí alquiló un piso en el número 61 de la Calle de la Cámara.
La joven había vivido en distintos puntos de España.
La joven se anunciaba en Internet como escort o acompañante de lujo, donde se definía como "una musa del sexo". Para desplazarse por España utilizaba el "sistema de plazas". Así es como se conoce al alquiler de habitaciones para ofrecer servicios sexuales durante periodos de tiempo limitados. En algunos casos, se oferta para horas, días e incluso semanas. Finalizado ese periodo, se mudan a una nueva ciudad. Este sistema había permitido a Barreto conseguir clientes. Esto facilitó que la mujer hiciera grandes amistades que hoy lloran su pérdida.
La Policía ha detenido a una mujer en León
En la tarde del pasado sábado, una mujer se encontraba limpiando el séptimo piso del número 61 de la calle de La Cámara. En una de las habitaciones encontró el cuerpo de Paloma sobre la cama. La habían asesinado. La Policía Nacional de la Comisaría de Avilés, la Policía Nacional de Oviedo y Gijón y la Policía Científica así como una forense, se encuentran investigando el asesinato, que en un primer análisis determinó que podría haberse cometido hasta veinticuatro horas antes del hallazgo del cadáver.
Finalmente, la Policía Nacional ha detenido a un hombre vestido de mujer en León como presunta asesina. Ahora, la investigación se centra en determinar el móvil del cruel crimen. Un hecho clave ya que si existía una relación previa entre el agresor y la víctima para vincular la fatídica muerte con un posible "crimen pasional", una de las hipótesis barajadas desde el principio.
El portal de la vivienda donde se encontró muerta a Sara.
En el caso en el que la mujer sea un cliente más de la extensa agenda de Paloma Barreto, el delito al que podría enfrentarse sería el de odio. Sin embargo, si el agresor fuera su pareja, el delito imputado estaría más relacionado con la violencia de género, dado que la víctima es un mujer transexual. Todo está en el aire aunque hay hipótesis que indican que era la persona detenida pertenecía al entorno de la fallecida.
La joven era muy querida en redes sociales y sus amigos han pedido justicia: "Que se haga justicia, que este monstruo pudra en la cárcel". Además, se muestran muy consternados: "Amiga no te lo merecías, tú una persona tan buena sin maldades siempre dispuesta ayudar a la gente".
"Si no luchamos juntas, nos matarán por separado"
Desde la Federación Plataforma Trans han expresado su "enérgica repulsa y pesar ante este brutal asesinato con claras connotaciones de odio y que viene a engrosar los crímenes machistas que ya golpean a las mujeres en lo que va de año".
Además, apuntan: "Es paradójico que el pasado julio en la 'Escuela Feminista de Gijón', se vertieran contra las mujeres trans, improperios, mofas y afirmaciones que 'demonizan' y estigmatizan a las mujeres trans con una crueldad propia del machismo. En nombre de quienes se creen 'ilustres' y 'académicas' del feminismo, desde la impunidad y el privilegio de ser parte de instituciones y formaciones políticas que se sitúan en el espectro del progresismo, ejercieron una agresión patriarcal hacia las mujeres trans, a las que niegan su identidad sexual".
La Federación pide a la Fiscalía a que se depuren los hechos ocurridos, que sobre el autor/res, recaiga el peso de la ley, que nos veamos protegidas por la tipificación del “delito de odio”, contemplado en el código penal, y se aplique como un agravante. Asimismo, la presidenta, Mar Cambrollé, ha pedido a todos los políticos que se comprometan "a llevar en sus programas, y si no a que incluyan la tramitación urgente de una Ley Trans Estatal, específica, transversal e integral".
“Mientras no seamos capaces de luchar juntas, nos matarán por separados”, concluye Cambrollé.