El próximo jueves, la empresa conquense Mármoles y Granitos Hermanos Verdugo Jiménez, SL. será la encargada de ayudar a levantar la lápida donde se encuentra Francisco Franco en el Valle de los Caídos. Pero desde que se hiciera pública la noticia, los hermanos Verdugo -los dueños- han recibido toda clase de amenazas telefónicas por parte de distintos grupos de extrema derecha. Los propietarios han presentado ya la pertinente denuncia ante la Guardia Civil.
[Directo: última hora de la exhumación de Franco]
Los hermanos Juan Carlos y Lorenzo llevan casi una semana en el foco mediático y en el pequeño pueblo de Villamayor de Santiago -donde tienen el negocio- no se habla de otra cosa. Ambos llevan más de 15 años trabajando con tesón en la empresa que heredaron de su padre. Lorenzo ya ha viajado hasta el Valle de los Caídos -desde Cuenca- para tenerlo todo preparado: camiones, grúas y toda la maquinaria necesaria para que la operación se desarrolle con total normalidad. Los restos de Francos serán exhumados a primera hora de este jueves y serán trasladados al cementerio de Mingorrubio, situado a más de 50 kilómetros de donde ha descansado durante 44 años.
[Así será la exhumación: todas las preguntas y respuestas]
Han recibido llamadas amenazantes
La familia Verdugo-Jiménez está formada por cuatro hermanos; entre ellos, Lorenzo y Juan Carlos, quienes abrieron la empresa de mármoles y granitos en el 2004. Además, poseen también una funeraria. Fue el padre el primero que se introdujo en el mundo de las lápidas y sus dos vástagos quienes siguieron sus pasos. Todos viven en el pequeño pueblo de Villamayor de Santiago, a poco más de una hora de Cuenca. Allí sus vecinos ya sabían que algo se estaba moviendo. "Se oía que eran ellos quienes iban a hacer el levantamiento de la tapa", afirmó el dueño de Mármoles 'El Bomba' a este diario el pasado lunes.
Pero desde hace poco más de una semana han recibido infinidad de llamadas, muchas de ellas coléricas y amenazantes por parte de personas afines a grupos de la extrema derecha. Por ello, los propietarios han decidido poner el tema en manos de la Guardia Civil y han interpuesto ya una denuncia.
Aun así y a pesar de las semanas convulsas, serán los hermanos Verdugo quienes formen parte de uno de los pasajes más importantes y que harán historia en nuestro país. Para ello, han llevado hasta el Valle de los Caídos los utensilios necesarios para poder levantar la lápida del dictador. Aun así, el proceso es sencillo: se coloca una estructura alrededor del hueco en el que está colocado el ataúd; se trata una grúa portátil que rodeará la lápida con el nombre grabado de Franco. Primero, retirarán la losa, que tiene un peso de 1.500 kilos. Luego, ayudados de unas poleas y unas cintas, extraerán el ataúd de madera en el que se encuentra el cuerpo embalsamado del dictador. A partir de ahí, en principio, su trabajo ya habría terminado.
Todo preparado en el Valle de los Caídos
Tras esto, la lápida será trasladada por una grúa que desde hace días ya se encuentra en las instalaciones del mausoleo. Una vez extraído, los nietos llevarán el ataúd a hombros hasta la explanada, sin banderas ni honores, pese a que era lo que habían exigido. Luego se trasladará a su nueva ubicación en el panteón familiar de Mingorrubio. Allí el prior del Valle de los Caídos bendecirá el féretro y celebrará una misa junto al hijo de Antonio Tejero, condenado por el golpe de estado del 23-F.
Una vez concluido el acto -y si la meteorología lo permite- los restos serán trasladados hasta la localidad de El Pardo en un helicóptero Superpuma de las Fuerzas Armadas. La operación de exhumación y posterior reinhumación, que se llevará a cabo el próximo jueves, tendrá un coste máximo para las arcas públicas de 63.061,40 euros.