Yencer, el héroe deportista de 19 años que perdió la vida ahogado por salvar a su novia en Asturias

Yencer de los Santos era un chico de 19 años, dominicano afincado en Oviedo. Estaba en forma. Era un joven deportista, aunque en los últimos tiempos había dejado la práctica federada a causa de una lesión. Este martes por la mañana salió de casa con un destino: la playa de San Lorenzo, en Gijón (Asturias). Le acompañaba su pareja, una chica ucraniana de 16 años y vecina de El Berrón. Allí perdió la vida como un héroe, cuando trató de salvarle la vida. 

 El día se torció cuando entraron al agua. Estaban cerca de la escalera 2 de la playa de San Lorenzo y la corriente le impidió a ella volver a tierra firme. Sin pensarlo, Yencer se lanzó al agua y trató de ayudarla, pero a él también lo arrastró el agua. 

 Los servicios de emergencias actuaron de forma rápida y lograron rescatar a la chica, pero nada pudieron hacer por él. Tras unas intensas labores de rescate, su cuerpo apareció sin vida a media noche en el mismo lugar donde había desaparecido.

 “Era un chico muy majo”, recuerda un conocido en las redes sociales, “nunca se metía en un jaleo”. Su tía materna, en declaraciones a El Comercio, recalcaba que era deportista, le gustaba nadar, hacer bicicleta y jugar al fútbol. "No hay consuelo para una situación tan triste", proseguía.

 A sus 19 años, Yencer de los Santos coqueteaba profesionalmente con la hostelería. Cuando le llamaban, ayudaba como camarero, en la cocina o en la limpieza en distintos establecimientos de su zona de residencia. La hermana de su madre recuerda que poco tiempo atrás se había apuntado a un curso de hostelería de Cruz Roja.

Horas de rescate

La primera llamada de alerta a emergencias se produjo a las 14.06 horas. Un socio del Club Astur de Regatas informó a los servicios de emergencias de la presencia de dos bañistas en apuros.

Se encontraban en posiciones cercanas a la escalera número 1 de la ya mencionada playa y la corriente les arrastró hasta la 2, conocida popularmente como ‘La Rampla’. Algunos testigos vieron cómo pedían auxilio y avisaron a los servicios de emergencias.

Con rapidez, Emergencias 112 envió una moto de agua que logró rescatar a la chica. Nada pudo hacer por salvar a su acompañante. Cuando la moto volvió, no encontró a Yencer. 

Desde ese momento comenzó un amplio despliegue que involucró a diferentes cuerpos de emergencias para tratar de encontrar al joven dominicano. Bomberos de Gijón, Policía Local, Guardia Civil y Salvamento Marítimo trabajaron juntos durante más de seis horas para tratar de encontrar al joven dominicano. El despliegue contó con la Embarcación de Salvamento Salvamar Rigel y el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Benemérita (Geas).

El rescate de los jóvenes copó la expectación de algunos ciudadanos, que se agolparon en las zonas periféricas desde donde podía verse el rescate. Según recoge elcomercio.es, Enrique Suárez fue quien dio el aviso, afirmando con lamento que “fue cuestión de segundos, apenas nos dio tiempo a reaccionar”.

Cuando las labores de búsqueda estaban abandonando el lugar tras las infructuosas labores, alrededor de las 22.30 horas, el cuerpo fue hallado entre las escaleras 1 y 2 de la Playa de San Lorenzo.

Los familiares de Yencer siguieron el rescate desde cerca, concretamente de la central de Salvamento Marítimo instalada en la escalera número 12. Los hermanos de la madre que han hablado con la prensa local como La Nueva España señalan que están “destrozados”.

Pesar por el suceso

El minuto de silencio por la muerte de Yencer.

El suceso ha provocado gran conmoción. La embajada dominicana ya ha lamentado el suceso a través de sus redes sociales y en el pleno municipal de Gijón se ha guardado un minuto de silencio en la mañana de este miércoles en memoria del malogrado joven. El cuerpo del joven Yencer de los Santos será velado en el tanatorio de Los Arenales de Oviedo.

«La vida se ha ensañado con nosotros, se me fue mi niño precioso», aseguraba su madre mientras abandonaba las instalaciones para volver a su domicilio tras el hallazgo del cadáver.