Marruecos y Reino Unido han sabido blindar sus acuerdos para seguir manteniendo los mismos lazos comerciales en la era postbrexit, e incluso mejorarlos.
Tras meses de encuentros, visitas y negociaciones, el pasado 7 de julio, el rey Mohamed VI estampó la última rúbrica para sellar el acuerdo de ‘Asociación Marruecos-UK’ y prolongar así el pacto que el país magrebí mantenía con Gran Bretaña dentro de la Unión Europea (UE).
De esta manera, los ingleses se cuelan en todo Marruecos acaparando varios sectores de negocio como las energías renovables, la industria, la exploración de gas y petróleo, los servicios, las finanzas, los fosfatos, hasta la educación y la formación profesional.
Por este motivo, preocupa (y mucho) que esta asociación entre los reinos de Mohamed VI y de Isabel II pueda destronar a España como primer socio comercial de Marruecos, posición que ocupa desde 2013.
Ante esta expansión, otros socios comerciales de Marruecos, como España y Francia, no deben subestimar está unión de negocio que ha aumentado en 7 millones de libras solo en los últimos cinco años. Pero, además, con el nuevo convenio se harán fuertes en otros sectores que desarrollarán en el norte del país, principalmente en el sector turístico, a pocos kilómetros de Andalucía.
Los británicos se instalarán en todo el litoral mediterráneo con urbanizaciones, hoteles e incluso un puerto para cruceros, aprovechando las dos zonas de lujo construidas por Marruecos en el norte del país, Marina Smir en Tetuán a las puertas de Ceuta, y Marchica al lado de Melilla.
Con la apertura en 2021 del mega puerto Nador Med, en el actual puerto de importación y exportación de Beni Ensar, localidad fronteriza con Mellila, atracarán trasatlánticos con miles de turistas extranjeros, sobre todo británicos. Una marina deportiva a unos metros del puerto de la ciudad autónoma española.
De hecho, de los cerca de 2.5 millones de turistas que visitaron Marruecos en el primer trimestre de 2019, UK se posicionó por delante de España en llegadas, ya que creció el 3% frente al 1% de España, según datos del Observatorio del Turismo en Marruecos.
Para facilitar la movilidad de los visitantes, se conectará el aeropuerto de Al Aaroui (Nador) con el Puerto de Beni Ensar a través de una línea de tranvía como parte final del proyecto Marchica, diseñado por el rey Mohamed VI en 2008 y publicado en el Boletín Oficial de Marruecos en 2010.
Al margen del turismo, en esa región en la frontera con Argelia, también se están instalando empresas británicas de construcción de metal para la fabricación de vehículos militares; e igualmente explotan dos pozos de gas, con los estudios realizados para perforar otros dos en el futuro.
Si las prospecciones dan resultado, Marruecos podría proporcionan gas a España y forzar al país a tomar una postura clara sobre el futuro del Sáhara Occidental. Actualmente, es inviable porque depende energéticamente del gas argelino, y su gobierno se posiciona con el Frente Polisario y la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental.
Las compañías británicas de extracción de gas que operan en Marruecos encajan con la visión de energía limpia porque el gas natural es una alternativa más ecológica al carbón. Y aunque las fuentes de carbono cero son preferibles, Uk considera que su socio tardará décadas en transferirse a fuentes de energía 100% limpias.
Brexit sobre Gibraltar
De esta manera, los británicos preparan un gran desembarco en la franja del norte de Marruecos, desde Ceuta a Melilla, por el territorio del Rif, el antiguo protectorado español. Una manera de controlar el Estrecho, parte del Mediterráneo y estar más cerca de Gibraltar.
Aunque la cuestión de Gibraltar es un asunto de españoles y británicos, ya existe una colaboración significativa con Marruecos. Las previsiones son ambiciosas con una línea de energía renovable. Se trata de un cable eléctrico a Gibraltar para beneficiarse del desarrollo de Marruecos en energía renovable. A cambio, Gibraltar tiene previsto compartir su experiencia en el sector financiero con el reino alauita.
También llevan a cabo ejercicios militares conjuntos con el regimiento británico con sede en Gibraltar, pero a “UK le gustaría ampliar la colaboración Marruecos-Gibraltar en este campo”, según fuentes de la embajada británica en Rabat.
En la otra orilla, los británicos echan un pulso a los americanos para hacerse hueco en la base militar de Alcazarseguir, que Marruecos amplió desde el 2012 cuando EE UU no aceptó trasladar la base de Rota (Cádiz) por no disponer de espacio suficiente para las maniobras de los buques destructores.
En esa competencia con Europa, Londres fijará el 0% de aduanas a las naranjas y clementinas para cuatro países, entre ellos Marruecos, a partir del 1 de enero de 2021. Medida que también perjudica directamente a la agricultura y a los empresarios españoles, porque con la UE impondrá un 16% de aranceles para las clementinas y un 3’2% a las naranjas.
En ese momento, Reino Unido tendría que aplicar los derechos arancelarios establecidos en la Organización Mundial de Comercio a las importaciones de Marruecos, incluidas las de frutas y hortalizas, lo que supondría un encarecimiento de los productos importados, según FEPEX. Con la firma de este acuerdo entre Reino Unido y Marruecos se evita esta situación, lo que permitirá a Marruecos potenciar sus exportaciones a este mercado.
Preocupación en Huelva
Desde las fincas de Huelva, explican a EL ESPAÑOL que también “hay movimientos de compra de terrenos (de los británicos) para dedicarse a la agricultura”. El objetivo de UK es producir más de lo que el país consume y exportar el excedente a terceros países, incluso europeos.
El empresario onubense pionero en la contratación en origen en Marruecos, Antonio Luis Martín ‘Curi’, lo considera, en declaraciones a EL ESPAÑOL, “una competencia totalmente desleal, una traba más para la agricultura española, si exportan sin aranceles. Nosotros aquí pagamos los sueldos y la seguridad social, una peonada sale a más de 60 euros mientras que en Marruecos es de 12 euros”. Y se pregunta: “¿Cómo compites con eso?”.
Este empresario lo tiene claro, “los ingleses se han ido a países del Magreb para que el costo más grande que es la mano de obra le salga muy barato”.
Mientras, las cifras de los primeros meses del año no son positivas para las exportaciones españolas a Marruecos, que cayeron un 16,8% en los cuatro primeros meses de 2020. Esta disminución es superior al descenso de las exportaciones del conjunto de la UE a Marruecos, y también a la contracción de la importación total marroquí, lo que implica una ligera pérdida de cuota de mercado. El textil y la automoción son los mercados más tocados.
Frente a otras estadísticas que desvelan la fortaleza de la relación bilateral de Gran Bretaña y Marruecos en términos de exportación en productos de agricultura y pesca. En UK, el 25% de los tomates y el 20% de las frutas blandas que se venden en los supermercados proceden de Marruecos, y el 19% del aceite de oliva también es ‘Made in Morocco’. Sin embargo, las sardinas son el alimento que más exporta, un 60% de las que se consumen llegan del país magrebí. Y se pescan en el costa atlántica, incluso en el litoral del Sáhara Occidental.
Esto es posible porque, al margen del pacto comercial, acordaron tres instrumentos jurídicos, entre ellos un pacto mutuo sobre el acceso al mercado británico de todos los productos procedentes del Sáhara Occidental. De tal manera que la pesca, la agricultura y los fosfatos saharauis (tres cuartas partes de la reservas conocidas en el planeta) accederán al mercado británico en las mismas condiciones que los marroquíes.
Por eso se le permite a una empresa británica que realice estudios de prospección petrolífera en las aguas de esa costa atlántica, que actualmente se disputan España y Marruecos.
Todas estas concesiones no son gratuitas. La factura que Marruecos le va a pasar a UK es la apertura de un consulado en el corazón del Sáhara Occidental, que significa el reconocimiento internacional del Plan de Autonomía por parte de una gran potencia y que animaría a otros grandes países a seguir sus pasos. En el último año, los servicios consulares de Gambia, la Unión de las Comoras, Senegal y Costa de Marfil ya se han instalado en las principales ciudades del Sáhara Occidental.
Marruecos, África y UK
Parece evidente que Reino Unido se sirve de Marruecos para volver a instalarse en África. El país magrebí fue invitado de honor en la Cumbre de Inversiones Reino Unido-África, el pasado mes de enero en Londres, donde se cerraron 27 acuerdos comerciales con diferentes países africanos por un valor superior a los 6.500 millones de libras, según anunció entonces el departamento de Desarrollo Internacional del Gobierno británico.
Días después, en el primer Diálogo Comercial Marruecos-Reino Unido, Marruecos se ofreció a UK como puerta de entrada a África, y el ex ministro inglés Conor Burns ya anunció “la triangulación de Marruecos, África y UK”.
De esta manera, Uk utiliza la posición geoestratégica de Marruecos, su proximidad a Europa, la fuerte presencia del sector privado marroquí en África y la estabilidad política y económica del país.
Marruecos supo adelantarse para que las relaciones bilaterales, en el ámbito económico, comercial, político, jurídico y territorial, quedaran a salvo con la salida de Reino Unido de Europa. De esta manera, el futuro de UK está ligado a Marruecos forme parte o no de la UE.