Leticia siguió las instrucciones del ministerio de Sanidad e instaló en su móvil la aplicación Radar Covid. Lo que no sabía es que, pocos días después, tras realizar un viaje, iba a recibir la primera notificación. “Me desperté y vi que había estado en contacto con un contagiado y que podía llevar dos días con Covid”, cuenta en conversación con EL ESPAÑOL. ¿Y qué hizo? Llamar a su centro de salud y pedir cita para que le hicieran una PCR. Dio negativo, pero, desde el pasado jueves, guarda cuarentena.
La aplicación, por lo tanto, no va de farol. Tras muchas dudas, Radar Covid empieza a ser una realidad y, el próximo 15 de septiembre –como fecha límite–, estará en completo funcionamiento en todas las Comunidades Autónomas. Entonces, los más de 45 millones de habitantes, podrán saber si se han cruzado con un positivo en los últimos 14 días y si han estado a menos de dos metros de distancia y por un periodo superior a 15 minutos. Justo lo que le ocurrió, precisamente, a Leticia.
Ella se la instaló cuando Sanidad anunció que estaba disponible y comprobó su eficacia durante un viaje de trabajo. “Yo estoy en el departamento de calidad y, la semana pasada, me mandaron a hacer dos auditorias: una en Sevilla y otra en Jerez. Me di cuenta de que había dado a la vuelta, cuando llegué a Madrid, al despertarme”, cuenta a este periódico.
El día 31 salió de Madrid y viajó en tren hasta Sevilla, donde estuvo el 1 de septiembre. Un día después, hizo otra auditoria en Jerez. Pasó por Toledo y, el día 3, al despertarse por la mañana, recibió la notificación de la app diciéndole que había estado en contacto con un positivo. “Lo que me dice mi móvil es que puedo llevar dos días contagiada. Dice que mi exposición ha sido alta y que he estado en contacto estrecho con una persona con Covid, pero sin concretar la Comunidad Autónoma ni el lugar”, explica, todavía, sorprendida.
Inmediatamente, llamó a su centro de salud y contó su caso. “Me hicieron una PCR el jueves y me dieron los resultados el domingo. Era negativo”, cuenta, con alegría. Porque el susto, en fin, no se lo quita nadie. “No pensaba que podía pasarme a mí y fíjate, me salta la aplicación para contarme que he estado con un contagiado”.
Desde entonces, teletrabaja. Tiene la suerte de que en su empresa le permiten que lo haga. Al fin y al cabo, su contacto estrecho lo tuvo durante un viaje de trabajo y Leticia está obligada a guardar cuarentena. “Vine a casa de mi madre y ya me quedé aquí. Estoy en una habitación aparte y salgo con dos mascarillas (una quirúrgica y una FFP2), aunque los médicos me han dicho que lo normal es que siga siendo negativo”, reconoce.
Ella, como muchos otros, no las tenía todas consigo: “No creía que funcionara y me pegó un susto”, cuenta, sorprendida. Pero lo hizo. La avisó y ahora está en cuarentena. La aplicación sustituyó fácilmente a los rastreadores y lo hizo con total solvencia.
¿Cómo usarla?
Leticia quita el miedo: “Es muy fácil”. La aplicación fue probada, por primera vez, en La Gomera y, desde hace unas semanas, se puede descargar en todos los dispositivos Android y Apple. Su función es la de rastrear de forma eficaz y avisar al usuario si ha tenido un riesgo de exposición alto a un virus –es decir, si ha estado cerca de un positivo–. Pero su función también es comunicar a esa persona si es positivo o negativo tras hacerse la prueba PCR.
Los resultados y la información, eso sí, no precisan quién ha sido la persona ‘contagiadora’. “Yo no lo sé. Creo que debió de ser alguien que estaba a la espera de que le dieran el resultado de una PCR y estuvo trabajando hasta entonces y yo me crucé con él”, reconoce Leticia.
La aplicación no utiliza GPS, sino Bluetooth. De esta forma, nadie puede conocer de quién es el móvil. Sin embargo, el Bluetooth genera identificadores cada 10-20 minutos. Si una persona notifica a la aplicación que ha dado positivo por coronavirus, inmediatamente la Radar Covid le manda un aviso a todas las personas que hayan estado en contacto con esa persona-identificador.
De esta forma, Leticia ha podido saber que ha estado cerca de un positivo por coronavirus y que su riesgo de exposición ha sido alto. Por suerte, ha dado negativo y, aunque tendrá que guardar cuarentena en casa de su madre, no pierde la sonrisa: “Puedo teletrabajar y tengo cuidado al salir, por si acaso...”. Y, sobre todo, no ha cogido el coronavirus.