Seis y media de la mañana, el mercado se abre y con él la cocina de Dani (40), Noelia (36) y Teresa (52), dispuestos a dar de comer a más de 200 personas al día con su tortilla de patatas, la protagonista de este pequeño negocio familiar desde 1991, la culpable de que Casa Dani se haya posicionado como uno de los mejores bares de la capital. En sus cuatro locales situados en el Mercado de la Paz (C/ Ayala, 28), en pleno corazón del barrio Salamanca, se cocina la galardonada como la mejor tortilla de España -ya desvelamos cuál era el mejor pollo-, por el II Campeonato de España de Tortilla de Patata, cuesta 12 euros y su único secreto son los productos de calidad y el esfuerzo constante en las manos que la elaboran.
Daniel García y Dolores Cuerda, manchegos, "testarudos y constantes" fundaron Casa Dani. Una pequeña barra que comenzó acogiendo a los obreros desde primera hora de la mañana para ofrecerles un desayuno humilde, barato y de calidad. Ahora, sus hijos han tomado el relevo del matrimonio fundador sus dos hijos y la hermana de Lola: Daniel, Noelia y Teresa.
Son capaces de vender más de 400 tortillas al día, con unos precios muy competitivos y con excelentes reseñas. "A lo largo de estos 30 años se ha conseguido crear una tortilla que le gusta a todos los clientes, o a la mayoría de ellos" aseguraba Teresa mientras le abría las puertas del negocio a EL ESPAÑOL, desvelando a su vez los secretos de la exitosa tortilla de patatas.
El fenómeno gastronómico
Con cebolla, sin cebolla, de pimientos, de trufa... la tortilla de patata de Casa Dani no sigue ningún tipo de pauta, se elabora al gusto del consumidor. Tiene un precio de 12 euros -14 si es a domicilio- y está elaborada con los ingredientes frescos que les proporciona todos los días el propio mercado.
Ha sido galardonada con el primer premio a la mejor tortilla de patata en el II Campeonato de España de Tortilla de Patatas. No hay truco, se elaboran a ojo con la receta que Lola consiguió crear durante su recorrido como cocinera, adaptándose a todos los gustos posibles de los clientes que ponían un pie en el local. Los huevos frescos morenos y la patata agria manchega son dos de los ingredientes que consiguen culminar su sabor.
Desde hace cuatro años no ha subido el precio de la tortilla ni un solo euro, eso sí, dependiendo del tipo de ingrediente que el cliente le quiera añadir, el precio varía. "El éxito al final es ese, tener constancia día a día, porque la tortilla se la va a comer una persona que a lo mejor no se la ha comido nunca".
— ¿Alrededor de cuántas tortillas venden al año?
— Eso es incalculable, podemos vender 300-400 al día, es imposible contarlas, tenemos muchos puntos de ventas -echen los cálculos, unas 146.000 al año-.
Casa Dani
Casa Dani está formada por tres locales de hostelería, la tienda y el espacio destinado al delivery, servicio a domicilio. Desde las seis y media de la mañana hasta las ocho de la tarde centenares de personas ponen un pie en el local, y no solo madrileños, personas de todo el mundo.
"Preocuparme por mis trabajadores y ofrecer productos de calidad a los clientes es lo primero", comenta Dani.
No se puede calcular la facturación total que obtienen a lo largo del año, se abre muchas horas y mantienen a muchos trabajadores, sería una cifra que puede confundir al personal, pero contando que las tortillas se venden a 12 euros y pueden cocinar 400 al día, pueden echar los cálculos de cuánto ganan. "Hay que tener en cuenta que no se ha despedido a nadie durante la pandemia ni se les ha puesto en ERTE, es muy difícil dar datos exactos", asegura Teresa.
En marzo de 2020 se habilitó el delivery, un proyecto que tenían en mente pero que no veían el momento para dar el paso, hasta que apareció el coronavirus y con él la pandemia. Solo hizo falta una semana para que Dani y su mujer (Carmen) pusieran en marcha el servicio a domicilio.
— ¿Creen que la ubicación en la que está situada el local influye en el éxito que tienen?
— Dani: Yo creo que no, porque cuando empezamos hace 32 años el barrio Salamanca no tenía nada que ver, el barrio fue creciendo y nosotros crecimos con él. En otra ubicación también nos hubiese ido bien porque al final es el mismo esfuerzo de trabajo, se mantendría la identidad del local. Asegura Dani.
— Teresa: Yo pienso que sí, el barrio Salamanca los domingos está muerto, no abre ningún bar excepto nosotros, entonces la gente te busca. Añade Teresa.
Además de su pincho de tortilla, también cuentan con una amplia carta donde se puede encontrar deliciosos desayunos, raciones, bocadillos y varios tipos de carne y pescado.
También te puede interesar...
Estos son los chocolates de Lidl que son mejores que los de Aldi o Carrefour según la experta Helen
Estas son las mejores galletas del súper según el 'doctor' Samuel: Lidl, Dia, Alcampo, Mercadona…