Cuánto me costarán los test de antígenos con la regulación del Gobierno: así es en otros países

Hace poco más de un año saltó una noticia que dejó a más de un español con los ojos como platos: Alemania autorizaba la venta de test de antígenos en supermercados. Poco después le seguiría Francia. Mientras tanto, en España, todavía no se podían vender ni en farmacias. “La legislación española no lo va a permitir”, auguraba un farmacéutico madrileño a este periódico, respecto a la venta en grandes superficies comerciales. Su predicción, por el momento, se mantiene.

Ante el desorbitado aumento de la demanda de test de antígenos en farmacias, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que tiene previsto regular los precios de estas pruebas diagnósticas. “Nos meteremos con el control de los test de antígenos”, aseguró el presidente en una entrevista en la Cadena SER.

Por el momento, Sánchez no ha especificado cómo va a abordar ese control de precios, pero sí ha descartado que los test de antígenos vayan a venderse en supermercados, como ya ocurre en otros países europeos que, a su vez, tienen regulados los precios por ley. De momento, la medida se limita a estas declaraciones.

¿Qué ocurre en otros países de Europa, donde la venta de test de antígenos en comercios se aprobó mucho antes que en España y se extendió a grandes superficies comerciales? Actualmente, una simple búsqueda en internet muestra que un test de antígenos en un supermercado Lidl en Alemania cuesta 2,29 euros. En un Aldi, el precio asciende ligeramente hasta los 2,95.

Además, el Gobierno alemán pone a disposición de cada ciudadano una prueba de antígenos gratuita por persona a la semana, "independientemente del estado de vacunación o convalecencia de la persona", señala propio el Gobierno germano en su página web.

En Francia, el precio está limitado por ley hasta los seis euros como máximo, sin embargo, es fácil encontrarlos por dos euros en grandes supermercados. Recientemente, los centros franceses Leclerc los vendían a 1,95 euros.

En Inglaterra, los ciudadanos pueden pedir cajas de test a través de la página web del Gobierno central para recibirlas en sus propios domicilios. Se pueden pedir hasta siete pruebas por día y persona, aunque hay que cumplir determinados requisitos: no tener síntomas de Covid, no estar aislado, ser mayor de 11 años y poder acceder a estas pruebas ni en trabajo ni en el centro de estudios.

En la vecina Portugal también está permitida la venta en superficies comerciales. En un Mercadona luso se puede encontrar un test de antígenos por 2,10 euros la unidad. Además, el Gobierno Central ha facilitado una lista de casi 1.000 farmacias y 500 laboratorios en los que cada ciudadano puede realizarse un test de antígenos cada 15 días de forma gratuita.

Sin embargo, no todos tienen unos precios tan bajos. En Grecia un test de antígenos ronda los 10 euros y no tiene regulación estatal. En Italia, los precios tampoco están regulados y son muy similares a los de España. En países como Suiza u Holanda, los precios son mayores que en nuestro país y rondan los ocho y 10 euros, respectivamente.

La experiencia de las mascarillas

“Creo que se está haciendo política-circo con esto”, opina Luis de Palacio, presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), que se muestra contrario a la regularización de precios. “Los test ya están bajando de precio. Seguramente bajen pronto de los cinco euros”.

“Nos están enseñando un trapo para no hablar de otras cosas. Creo que estamos pagando más por la luz que por los test, por decirte algo”, considera el director de la patronal farmacéutica. FEFE estuvo presente en la negociación cuando se reguló por ley el precio de las mascarillas, pero una posible limitación del precio de los test de antígenos, por el momento, no ha llegado a su mesa.

La experiencia de las mascarillas fue precisamente lo que les posiciona en contra de regular el precio de los test. “Limitó el precio de las quirúrgicas y de un tipo concreto de geles. En el momento en que lo publicaron había desabastecimientos. Lo que ocurrió fue que, con el precio limitado, ese desabastecimiento tardó más en resolverse, hasta que los precios de distribución e importación no consiguieron pasar por debajo del tope impuesto”.

De récord en récord

La venta de test de antígenos sigue su paulatina escalada batiendo récords semana tras semana. La anterior, del 17 de diciembre al 2 de enero, se vendieron en nuestro país más de 8,5 millones de test de antígenos en farmacias, según las cifras de IQVIA, uno de los mayores operadores de datos relacionados con la salud. Esto supone un nuevo récord desde que se aprobara su venta en farmacias el pasado 20 de julio.

En total, en 2021, se vendieron en España 29,9 millones de test de antígenos en las farmacias españolas. Las comunidades donde más demanda hubo fueron Cataluña y Madrid, seguidas -con cierta distancia- de Andalucía.

Un test de antígenos que se puede encontrar en cualquier farmacia.

Este mismo lunes, al producirse las declaraciones de Sánchez, los miembros del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid han escrito a su presidente para que "se realicen las gestiones oportunas para que, en el caso de que entrara en vigor la norma que daría soporte a dicha intervención, se tengan en cuenta los estocajes que de este producto sanitario nos consta existen en muchas oficinas de farmacia, a los efectos de evitar las pérdidas que pudieran producirse en el caso de no contar con una moratoria suficiente".

"Téngase en cuenta -prosigue la misiva- que las tensiones en los precios que se han venido produciendo en las últimas semanas han hecho que los costes de adquisición se hayan elevado de forma importante, por lo que la fijación de un precio intervenido podría generar pérdidas considerables a los establecimientos".