La semana pasada la taquilla mundial dio una sorpresa. La octava parte de Fast & Furious conseguía la taquilla más alta de la historia en su primer fin de semana. En sólo tres días sumaba 532 millones de dólares, una salvajada que hace que la película sea rentable en su primer envite en las salas. Lo curioso es que en EEUU sumaba 100 millones, una cifra importante, pero lejos de las cantidades de La Bella y la Bestia este año o las últimas películas de la saga de La guerra de las galaxias en 2016 y 2015. De hecho la anterior parte de la franquicia estrenaba con 40 millones más, pero el éxito venía desde miles de kilómetros de distancia: desde China.

La película de Vin Diesel y Dwayne Johnson ha sido un pelotazo en el país asiático, donde ha estrenado con 190 millones de dólares, noventa más que en EEUU, un 36% de todo el dinero conseguido. Para hacerse una idea de lo que significa, El despertar de la fuerza 'sólo' hizo en China 124 millones. Es decir, que algo hay en la saga automovilística para hacer que los chinos acudan en masa. Intentamos desentrañar el misterio y buscar las causas de este pelotazo.

Auge del mercado cinematográfico

El cine se ha convertido en la apuesta de ocio favorita del público chino, de hecho el gigante asiático ya es el país con más salas del mundo. Acabó 2016 con 40.917 pantallas, frente a las 31.600 que tenía un año antes - un 29,5% más, y una media de 26 nuevas cada día- según datos de la sección cinematográfica de la Administración Estatal de Prensa, Publicaciones, Radio, Cine y Televisión de China. En ellas recaudó 6.600 millones de dólares, consolidándose como la segunda potencia cinematográfica del mundo tras EEUU y Canadá, que alcanzan los 11.400 millones.

Es el primer año que se frena la escalada potencial de la recaudación, ya que en 2015 aumentó un 48,7% respecto a 2014 y puso su cima en los 6.770. Datos que dan una muestra de que el público quiere cine. Ernst & Young pronosticó en 2013 que en 2020, sobrepasará a EEUU como primera potencia, y según el presidente de Imax ese sorpasso será antes, a finales de 2017.

Ederne Frontela, periodista y profesora en el Máster de Estudios Chinos de la Universidad del País Vasco cree que esto es señal del aperturismo que está viviendo china. "Ha dejado de ser la ciudad prohibida, en la que todo estaba cerrado. Están proyectándose y quieren un trozo de pastel", cuenta a EL ESPAÑOL. Para Frontela este beneficio es mutuo, y Hollywood "está tirando la caña" a China también. "Saben que en el mercado hindú no van a poder entrar, pero en el chino sí. Este año le han dado un Oscar Honorífico a Jackie Chan, van hilvanando. De hecho la semana pasada en la Convención de Star Wars anunciaron un personaje nuevo de rasgos asiáticos. EEUU también quiere su parte", añade.

Vin Diesel, una estrella en Asia

Hay un factor que hace que Fast & Furious haya tenido un éxito tan fulgurante en China, y es su actor, Vin Diesel, que se ha convertido en una de las estrellas extranjeras más rentables en Asía, tal como explicaba hace unos días Hollywood Reporter. La prueba es su anterior filme, la tercera parte de la saga XXX, que en todo el mundo se estrelló en taquilla. Con un presupuesto de 85 millones de dólares, sólo lograba 45 en su país, y en ningún lugar potente hacía buenas cifras, menos en China, donde la convirtieron en la película de Hollywood más taquillera de este año -hasta que llegó Fast & Furious 8- con 164 millones de dólares.

Un fenómeno que se repite en otros países de Asia, como Taiwán o Malasia, donde XXX también ha funcionando logrando cifras parecidas a las de mercados mucho más potentes como Francia o Inglaterra. De hecho, la película extranjera más taquillera en la historia de China es… Fast & Furious 7 con 390 millones de dólares -40 más que en EEUU- y en segundo lugar en el ranking de películas más exitosas del país tras los blockbusters locales The mermaid (526,8 millones) y superando a Monster Hunt (381 millones según Boxofficemojo).

Sólo 34 películas americanas

China es un país muy proteccionista con su cine, al que reserva las fechas más golosas y rentables para su estreno. Además, no hay aperturismo total con el cine de fuera, sino que sólo se permite la llegada a unas cuantas que además tienen que pasar el filtro de la censura. Un mercado con un funcionamiento peculiar que explica María Macarro, Coordinadora del Instituto Confucio de Madrid y propietaria de la web versionchina.com. “Las grandes 'campañas' en cine corresponden con las semanas en las que su población tiene vacaciones , las llamadas 'golden week' que corresponden a las vacaciones de Año Nuevo, las de la fiesta Nacional del 1 de octubre y las celebraciones del 1 de mayo. Al ser festivos las grandes películas esperan para ser estrenadas durante ese tiempo y cuentan con la colaboración estatal que apoya y protege los estrenos de producción nacional”, cuenta a EL ESPAÑOL.

Por tanto el caso de Fast & Furious cobra más relevancia al haberse estrenado fuera de una de esas semanas grandes, algo que Macarro cree que esta vez se ha convertido en un punto a su favor, como lo ha hecho el que sea una de las pocas películas de Hollywood que se estrenarán este 2017. “Cada vez el número de estrenos extranjeros anuales permitidos es mayor,actualmente son 34 películas extranjeras y todo parece indicar que próximamente no se pondrán restricciones. Al ser una época en la que no hay grandes estrenos también habrá favorecido la afluencia de público a esta superproducción americana”, añade.

Acción y efectos especiales

Otro de los factores que han convertido a Fast & Furious en pelotazo es ser un rara avis en la cartelera china, tal como explica María Macarro, a la que ha sorprendido este pelotazo, aunque cree que una de las razones es el tipo de película que es. “La temática de las películas que se muestran en los cines en China, su cine comercial, básicamente son comedias, comedias románticas, historias de amor, familiares e historias basadas en los grandes libros clásicos como el eterno 'Viaje al oeste' o dramas históricos. Cuando llega una película de este corte, americana, con nueva temática y grandes efectos especiales pues es normal que la gente acuda al cine”, apunta.

La temática de las películas que se muestran en los cines en China siempre es la misma, así cuando llega una película de este corte, americana y grandes efectos especiales la gente acude al cine

Un argumento que comparte con Ederne Frontela, que señala que todo el cine que se separa de las películas "tradicionales y de leyendas" que hacen en China son recibidas como un evento. "Además les encanta la velocidad y los coches, así que Fast & Furious lo tenía todo", dice. Por tanto, el despliegue de producción y su condición de vehículo de acción sin límites encaja perfecto en un público que no está acostumbrado a este tipo de cine y que acude en masa para descubrirlo como algo exótico. 

Mucha población

China finalizó el año 2016 con una población de 1.382.710.000 habitantes. Es el país más poblado del mundo. Esto lo convierte en un centro neurálgico para estrenar las grandes películas de Hollywood, ya que saben que a poco que funcionen obtendrán beneficio económico. Además, tiene dos ciudades enormes con un gran desarrollo que en cuanto se vuelcan con una película la convierten en un éxito, tal como explica María Macarro. “Tenemos que pensar que las ciudades de Shanghai o Pekin tienen mas de 20 millones de habitantes cada una. A poco que la gente acuda al cine, la taquilla ya es inmensa en términos monetarios por eso también se entienden las coproducciones, el auge y las ganas de poder exhibir en este país”, apunta la Coordinadora del Instituto Confucio de Madrid.