Desde que se estrenara la mítica película de Aladdín en 1992 han pasado más de dos décadas. Disney no cesa en las nuevas adaptaciones de sus clásicos —la próxima será El Rey León y llegará a la gran pantalla en julio de este mismo año— y este viernes es el turno del ladrón más famoso de oriente.
La nueva película de Aladdín cuenta con un reparto en el que se encuentran la actriz y modelo indio-inglesa Naomi Scott (Jasmín), el canadiense Mena Massoud (Aladdín) y un referente como Will Smith, encargado de representar al extrovertido e incapaz de mantener la boca cerrada genio de la lámpara.
El gigante Disney no ha obviado los acontecimientos sociales y las demandas de la sociedad actuales. De la mano de Guy Ritchie, director de RocknRolla, el filme cuenta con una Jasmín que, pese a mantenerse siempre en un segundo plano del protagonista, demuestra la lucha y la reivindicación femenina de una princesa sometida al patriarcado y las leyes anacrónicas de Agrabah.
Así se evidencia en una de las muchas canciones del largometraje. "No me callaréis (...) Solo sé que no me dejaréis sin voz", canta Jasmín en el estribillo. Y es que, el visir Jafar le comenta en más de una ocasión que es mejor ser observada que escuchada. Para más inri, la princesa no comprende por qué debe contraer matrimonio con un príncipe de un lejano reino si ella es la más adecuada para gobernar su amada tierra. De todos modos, el feminismo de Jasmín no evita que la mayoría de las líneas de las mujeres traten sobre el matrimonio y los hombres.
También cabe recalcar que la perspectiva de género no reemplaza la trama original y los valores con los que comulga la historia principal. La película antepone el respeto y honestidad a la riqueza del Príncipe Alí, quien no termina de gustar a la princesa a pesar de que el pobre y callejero Aladdín había conseguido enamorarla sin ningún tipo de riqueza o título.
La magia de los dibujos
El director ha querido en todo momento que el público relacione el nuevo filme de Aladdín con la película de 1992, la cual resultó ser todo un éxito. La primera escena representa a Jafar tratando de encontrar la lámpara en la Cueva de las Maravillas. A su vez, Aladdín sigue siendo un huérfano que roba junto a su mono Abú para subsistir y las pegadizas canciones y las coreografías son casi idénticas. Entre ellas destaca Si a Arabia tú vas (versionada por Will Smith), que suena al inicio del largometraje, y Príncipe Alí, que va acompañada de una espectacular escenografía con animales y demás efectos especiales de la mejor calidad.
Una de las artistas del momento también ha tenido la oportunidad de adaptar uno de los clásicos de Aladdín en España. Se trata, concretamente, de la que fuera concursante de Operación Triunfo Aitana Ocaña, cuya voz suena en los créditos del final. Aladdín, en conclusión, presenta una película que aúna los valores de la antigua producción con las novedades actuales en una historia dinámica que no se hace tediosa pese a sus dos horas de duración.