Todos los secretos de Isabel Coixet para sobrevivir en la industria del cine español
La guionista y directora ha reflexionado acerca de su carrera cinematográfica y sobre el estado actual del mundo audiovisual, con sus pros y sus contras.
6 noviembre, 2019 02:01Noticias relacionadas
La vida de Isabel Coixet ha estado ligada al cine desde que le regalaron su primera cámara cuando solo era una niña. A sus 59 años ha sido testigo y partícipe de la evolución del séptimo arte. De la mano del canal de televisión SundanceTV, producido por AMC Networks, ha podido transmitir su conocimiento y experiencia a través de su extensa filmografía en el Museo Guggenheim de Bilbao. Por ejemplo, el reparto, y la elección de los protagonistas, que es clave para cualquier filme, es uno de los temas a los que le da vueltas la catalana. "Hay actores con un Oscar que no tocaría ni con un palo", ha considerado.
En el evento, la autora de películas como La vida secreta de las palabras o Mi vida sin mí ha reflexionado sobre su proceso creativo, la salud del cine de autor y los diferentes géneros cinematográficos. "Hasta que no tengo el título y el final no tengo la película. Hay algo en el título que es como un estado mental, es un punto de vista, contiene el mensaje de la película".
De la misma manera, también ha destacado la facilidad que le supone dirigir sus propios guiones en lugar de trasladar a la gran pantalla guiones ajenos: "Me siento más libre dirigiendo mis propios guiones. No volvería a dirigir un guion de otra persona. Es un gasto de energía extra". Sobre la financiación y los presupuestos ajustados a la hora de rodar, la cineasta ha comentado que una de las razones por las que sigue trabajando y lleva a cabo sus proyectos es porque se adapta al dinero que hay en cada caso. "El dinero es importante pero hasta un punto. No me quejo. Después de La librería las cosas han sido mucho más fáciles".
Precisamente, uno de los géneros que más dinero recauda actualmente y que más presupuesto maneja es el cine de superhéroes —cabe destacar que Martin Scorsese afirmó que las películas de Marvel no eran cine—. "No sé si las películas de superhéroes son películas, pero me aburren, no me gustan. Me encantaría que me gustaran", ha compartido. No obstante, no se ha mostrado tan tolerante con la industria del doblaje, la cual explica que comenzó por orden de Mussolini en la década de los veinte. "El doblaje no es cine, es un crimen", ha declarado con contundencia.
El doblaje no es cine, es un crimen
Asimismo, la ganadora del Goya a Mejor Película el año pasado ha querido dejar un recado a la plataforma Netflix por su última idea. Y es que la plataforma ha propuesto la posibilidad de reproducir sus series y películas más rápido, lo cual muchos creadores y artistas han considerado un verdadero insulto. "Si lo ves que sea con el ritmo que han marcado quienes lo han hecho".
Como no podía ser de otra manera, ser mujer también le ha generado algún que otro malentendido en el mundo del cine. Fue hace ya una década, cuando el escritor estadounidense Philip Roth quiso participar en el rodaje de Elegy, adaptación de El animal moribundo. Desde un primer momento Roth buscaba al director del largometraje sin suerte. El problema es que no era director sino directora. Roth pensaba que Coixet era la ayudante del director.
Dejando a un lado su pasado como guionista y directora, su futuro augura nuevas iniciativas. Por el momento se estrenará el próximo 4 de diciembre en HBO la serie Foodie Love, grabada en Barcelona, Francia, Roma y Tokio y se convierte en la primera serie española de HBO escrita y dirigida por una mujer.