Más parecido a un ensayo fílmico que a una película narrativa convencional, este filme consiguió hablar de la historia de una familia, de las heridas de la guerra, de dios, y hasta del universo de una forma única. Una experiencia sensorial en la que hay que dejarse llevar por las emociones que Malick consigue crear en una de las películas más especiales y ambiciosas del cine reciente. Inolvidable.