Isabel Coixet recuerda todas sus nominaciones a los Goya: anécdotas de la mujer más premiada
Es la directora más premiada de nuestro país, y sólo Amenábar tiene más premios que ella. Repasamos con ella todas sus veces en los Goya.
6 febrero, 2021 01:32Noticias relacionadas
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Si se hiciera una encuesta y se preguntará quiénes creen que son los directores con más Premios Goya en su filmografía estoy seguro que todos dirían los mismos nombres. Amenábar, Almodóvar, Trueba, Berlanga, Bayona… Y sin embargo, en esa lista debería estar en un sitio de honor Isabel Coixet. La realizadora ya acumula 7 Goyas en su casa de un total de 12 nominaciones -sin contar los premios a Mejor película-. Sólo Amenábar tiene más cabezones en su casa.
Este año ha sumado otra a la colección. La de mejor dirección por Nieva en Benidorm, un filme libérrimo e inclasificable que es la vez en menos coixetiano y el que mejor resume el universo de la directora, que fue nominada como directora novel por primera vez hace 30 años. Buen momento para hacer memoria y recordar todas las nominaciones en una edición en la que se ha conseguido la paridad en Mejor dirección. Coixet es una batería de recuerdos, de frases para subrayar. Una persona que resume las últimas décadas del cine español a través del repaso de sus candidaturas.
'Demasiado viejo para morir joven' (1990)
Ruedas tu primera película y consigues tu primera nominación.
Fue hace 30 años, por mejor ópera prima, y ese año estábamos nominadas tres mujeres. Estaban Cristina Andreu, por Brumal; y Ana Díez, por Ander eta yul. Hace ya tres décadas hubo una serie de directoras que empezamos, pero muy pocas han continuado, y esa es la prueba de lo duro que es esto. Cristina dirigió luego otra cosa, hizo televisión… Es mi mejor amiga, ayer estuve con ella y hablábamos de esto.
¿Qué recuerdas de la gala?
No se me ocurrió ir a la ceremonia. Me parecía algo como inaccesible… es que no se me ocurrió ir. Entonces no había publicistas, no había este mundo… no se me ocurrió. Me parecía una cosa como lejana. Ahora lo pienso… pero es que yo estaba tan fuera de la industria que no se me ocurrió, y nadie me llamó para decirme que fuera. No. Pero fue así. La gente se ríe, pero fue así.
¿Pero, lo viste en tu casa con una pizza?
¡Que no se dio por televisión! No, no, no. Luego me enteré, como dos días después. Yo creo que ni tenían mi teléfono. Pero es que las cosas hace 30 años eran así. No se me ocurrió. No sabía casi ni el día que eran. No eran un acontecimiento. Era algo como casi residual, anecdótico.
'Cosas que nunca te dije' (1997)
Segunda película, siete años después… ¿Fuiste a la gala?
Pues es que yo creo que tampoco fui… pero creo que no fui porque estaba en las quimbambas.
'Mi vida sin mí' (2004)
Entonces tu toma de contacto con los Goya fue en 2004. Esta no me puedes decir que no fuiste, porque de esa gala sabes lo que se recuerda...
El discurso. Soy el meme más legendario del cine español. Fue tremendo. ¿Nadie puede creerse que me quedara bloqueada? Ese bloqueo se entiende por esa desconexión que siento por ser una outsider con la industria. Encima todos me habían dicho que era imposible que me lo dieran porque haciendo cine en inglés no me iban a dar nada. Me bloqueé y ya está. Pero bueno, te van a seguir machacando.
¿Si eso le hubiera pasado a un hombre, hubiera pasado lo mismo?
No, claro que no. No. No hubiera pasado eso.
Pero ganaste guion adaptado. ¿Qué otro recuerdo tienes?
Me acuerdo que fuimos al Cock luego y me acuerdo de muchos cócteles. De poca cosa más, del Cock sí, es un lugar que me fascina.
'La vida secreta de las palabras' (2006)
Dos años después lo ganaste… Y en inglés. ¿Llegaste a pensar que rodando en inglés era imposible?
Es que uno hace las cosas que siente, porque cree que merece la pena contar algo, no para tener Goyas.
Bueno...
Cuidado, es verdad, conozco gente que está como muy en serio con eso, pero es legítimo también, eh. No sé. Quizás tengo ahora una mirada más tierna sobre las cosas y también es conmovedor que le den tanta importancia. Es una cosa que está bien, pero es la guinda del pastel, pero no es el pastel. Y no hay que confundirlo.
Algún día, cuando sea mayor, contaré como fue rodar aquello haciendo que Juliet Binoche meara en un cubo de plástico con una bolsa de basura... y al menos tenía uno para ella
Después de lo ocurrido hace dos años, no te dieron ganas de subir ahí arriba y decir, ‘ahora os jodéis’.
No, ¿por qué? No creo que sea el momento para nada.
Entonces no hay rencor.
No. Una cosa es eso y otra cosa es la gente de la profesión, que saben que soy una directora sólida, que no soy una loca que se hace pajas mentales.
'Invisibles' (2008)
Y llegó la primera nominación a documental en un proyecto compartido.
Invisibles fue un proyecto muy bonito que produjo Javier Bardem. Es curioso... yo he estado en dos proyectos colectivos. Este y Paris, je t’aime, y es muy bonito. Te sientes parte de algo más grande que tú. El hecho de poder llamarles y preguntar con qué montador están currando, o llamar a Wim Wenders y decirle que 23 minutos es muy largo… Fue un trabajo muy bonito. Cada uno con una visión tan diferente, presentar todos juntos en Berlín, salir todos. Lo recuerdo con mucho cariño y encima conocí a Paula Farias, que era la directora de Médicos sin Fronteras y la admiro muchísimo.
'Escuchando al juez Garzón' (2012)
También lo ganaste, el de Mejor documental.
Lo de Garzón... Yo había trabajado con su hija, y le dije, es que tu padre tiene que hablar. Él nunca había contado lo que contó en ese docu. Llamé a Manuel Rivas y le pregunté que si haría la entrevista, pero Garzón no quería hacerlo porque pensaba que le iba a perjudicar. Yo creo que él no pensaba que le fueran a inhabilitar. Yo nunca pensé en los Goya, para mí este es un documental periodístico destinado a que se oyera su versión de las cosas, y creo que ese premio muestra el apoyo del sector a un hombre en una situación muy chunga y muy injusta.
'Nadie quiere la noche' (2016)
Tengo mucha curiosidad por está película… Inauguraste Berlín, la crítica fue muy mala, y tuviste las agallas de meterte en una sala y remontarla. Después, llegaron las nominaciones a los Goya. ¿Fue duro?
Sí, fue muy duro. Hay películas que nacen como con gafe, y yo creo que esta fue una de ellas. La preproduccion, los problemas logísticos de todo tipo, estar en el lugar real a 18 grados bajo cero, rodar en lugares donde, literalmente no había para mear… Y me decían ‘aquí han rodado El imperio contraataca’, y yo les dije, ‘cabrones lo rodaron al lado del hotel, nosotros estamos a tomar por culo’ Algún día, cuando sea muy ancianita, contaré como fue rodar aquello haciendo que Juliet Binoche meara en un cubo de plástico con una bolsa de basura... y al menos tenía uno para ella, el resto uno para 40. ¡No es bonito!
Pienso en mi epitafio y en qué quiero que pongan, y creo que pondría una cita de Ernesto Sábato que para mí es importante: ‘me emocionan los detalles, no las generalidades'
Es curioso. Has inaugurado Berlín, has competido en la Sección Oficial de Cannes, has estado en Venecia… Nunca en el Festival de San Sebastián.
Nunca me han invitado.
'La librería' (2018)
Volviste a ganar por esta película, que vino en un año en el que lo pasaste muy mal con todas las polémicas por la independencia catalana… ¿Fue una victoria catártica?
Fue muy sorpresivo, porque todos los técnicos fueron para Handia y nos llevamos los grandes. Es que llevaba tanto tiempo queriendo hacerla... seguramente sea mi película más autobiográfica. Florence Green soy yo. Y me veía en ella. Estaba rodando y a veces se me caían lagrimones porque de alguna forma hacía transposiciones de cosas. Cómo de repente en tu entorno todo se vuelve hostil... por nada. Porque se decide así. Fue bonito y fue catártico. Cada película que haces corresponde a un momento de tu vida.
Fue el año de las protestas del Me Too. Me acuerdo que todas las mujeres fueron de negro y tú dijiste que para protestar habría que ir en pijama…
Como deberíamos haber ido.
Pero no te hicieron caso. Y todo sigue un poco igual.
Es una lucha perdida. Ya veo que a la gente les gusta y encima les parece que vende algo además de bolsos y vestidos. Yo no lo veo así, pero quién soy yo.
'Nieva en Benidorm' (2021)
¿A qué momento corresponde esta película, por la que vuelves a estar nominada?
A un momento de calma. Creo que en mi epitafio y en qué quiero que pongan en la placa en la lata, y creo que pondría una cita de Ernesto Sábato que para mí es importante: ‘me emocionan los detalles, no las generalidades’, y vivimos en un mundo de generalidades, en donde una película que trata un tema que te gusta ya te parece que es relevante, pero para mí, cada vez más, lo relevante está en las cosas pequeñas, en cómo se hace para vivir cuando nunca has vivido.