La cartera de fichajes de Netflix no para de crecer. A nombres como los de Alfonso Cuarón, Martin Scorsese o David Ficher, se une ahora George Clooney, que estrena en la plataforma su nueva película como director, Cielo de medianoche. Una odisea de ciencia ficción intimista que reflexiona sobre temas como la soledad, la maternidad, la comunicación y el cambio climático. Una obra para la que el realizador ha tenido la carta blanca del estudio para hacerla como quisiera.
En una rueda de prensa virtual a la que acudió SERIES & MÁS, George Clooney explicó cómo el propio tema del filme ha ido cambiando con el tiempo, y que con la llegada de la pandemia, incluso ha obtenido un nuevo significado que nos toca a todos más de cerca. “Al principio queríamos hablar de lo que el ser humano es capaz de hacer a otro ser humano y la propia humanidad, pero luego hablando con la gente de Netflix nos dimos cuenta de que la película realmente hablaba de todo el odio y la ira que hay en nuestra vida. Y no me refiero sólo a EEUU, sino a todo el mundo. Como eso siga así, si negamos la ciencia y el cambio climático y seguimos con esta ira, durante 30 años todo podría estallar”, contó el director y protagonista del filme.
Pero llegó la pandemia, el confinamiento y todo cambió. Esa película “sobre lo que podemos hacer” para cambiar el mundo y que eso no ocurriera, se transformó sin darse cuenta en “una historia que realmente hablaba de nuestra desesperada necesidad de estar en casa con la gente que queremos, de tener un hogar, de estar cerca de ellos y también de lo difícil que es comunicarnos con el resto de personas. La idea era hablar de todos esos temas que, por desgracia nos son completamente actuales”, añadió.
La película cuenta dos historias paralelas, la de Clooney, un científico en el ártico que intenta contactar con una nave espacial que regresa a la Tierra tras explorar posibles alternativas para salvar a la humanidad. Lo que no saben es que una catástrofe ha terminado con todo. La misión espacial está compuesta por un reparto internacional en el que destaca la actriz británica Felicity Jones, quien protagonizara Un monstruo viene a verme, y que da vida a la líder del equipo, una astronauta embarazada, algo extraño y que no fue una decisión casual del guion.
Un día, justo antes de comenzar a rodar, la actriz llamó a George Clooney y le dio la noticia. “Llevábamos unas tres semanas filmando en Islandia cuando Felicity me contó la noticia”, recuerda. Lo primero que hicieron fue dar vueltas al guion para que el embarazao no se notara, pero entonces pensaron que esa no era la solución: “Nos dimos cuenta de que la mejor manera de recibir lo inesperado es aceptarlo plenamente. Escribimos nuevas escenas y ese niño por nacer se convirtió en un nuevo personaje que los otros miembros del equipo ahora querían proteger. Como si se estuviera convirtiendo en el único signo de vida al que podían aferrarse ahora”.
Con todos los giros Clooney volvió a resignificar la película, que cree que finalmente habla sobre “la culpa”. “Mi personaje encuentra al final la redención, y eso es muy importante porque nos da esperanza. Creo que Cielo de medianoche es una película que da esperanza”, añadió. Su protagonista alabó lo bien que se había portado George Clooney con el tema de su embarazo, y el temor que tenía a contarle la noticia, ya que “lo primero que pensé es que me iban a despedir”, decía entre risas, pero poniendo en la mesa un tema importante. Al final todo se unió y Clooney demostró de nuevo su compromiso dentro y fuera de la pantalla.
Cielo de Medianoche es, además, otra de las apuestas fuertes de Netflix de cara a la temporada de premios, y nadie duda que categorías como efectos especiales, diseño de producción o banda sonora -donde Alexandre Desplat vuelve a demostrar su genio- pueden caer del lado del filme de Clooney.