Por aquello de practicar un poco inglés, hace un tiempo que veo las series que ofrecen las plataformas en versión original (VO) subtitulada, lo que me está causando una especie de obsesión por lo espanglish en todo aquello que leo. Me ocurrió el otro día, al consultar a través del chat GPT tras ver una noticia similar en televisión: “¿Cuál es la población más fea de la provincia de Sevilla?”, pregunté. Automáticamente apareció en mi cabeza aquello de New Town Of The River And Mines. “La belleza es subjetiva y lo que a unos les parece feo, a otros les puede parecer encantador”, advierte…
El otro día me invitaron a pasar el día en una piscina de un chalet en White Castle of the Streams, menos mal que ya no tomamos ‘rolipós’ (chupachúps) ni asistimos a ‘partydas’ (guateques) en Two Sisters, aunque confieso que de vez en cuando me hago en el quiosco con un ‘liquirbá’ (regaliz) rojo de los de 30 céntimos que animan una tarde de bajón y ayudan a subir el azúcar.
Los términos utilizados junto a la verja de Gibraltar son los más originales. Por aquí, en la ciudad gobernada por quien antes fuera alcalde de All Seas, nuestro piano man, Joaquín Pareja-Obregón, resucitó magistralmente de entre las aguas del Guadalquivir 35 años después del famoso chapuzón -piano incluido-. “Cuando paso por el puente, Triana, contigo vida mía”. Interpretación desde un barco de la maravillosa sevillana que compusiera su padre que se convirtió en el momento estelar de la última edición de los Showcase Awards.
Como cantaban las Nancys rubias en su versión del tema de Icona Pop: “¡Me encanta!”. Sevilla es un gran escaparate. Otras veces es una 'guor' (war), como la que tienen los medios de comunicación por ver quién consigue publicar primero los itinerarios definitivos de la Magna de diciembre ¡Oh my God! ¡Qué ciudad!
¿Acabará la ilusión por ver el primer capirote en la calle? De seguir así, con la saturación de pasos todo el año en televisión o en la calle podría ocurrir como con los caramelos de la Cabalgata, que muchos niños ya ni siquiera recogen ¡Ay madre!
No hemos cambiado tanto. Solo hay que dar un paseo por el Bellas Artes y recorrer la galería en la que se encuentran los ocho grandes lienzos de Domingo Martínez para comprobar cómo se comportaban los sevillanos en el siglo XVIII, en este caso con motivo de la proclamación real de Fernando VI (1746). Decoración efímera descrita por el gran cronista visual de la Sevilla barroca. “Ocupar con fiestas y espectáculos a sus pueblos en aquel tiempo del año en que conviene que los haya” (Maquiavelo).
Me gustan los pasos, pero con el tiempo aumenta el misticismo y se evitan las aglomeraciones. Libres. Para quien no guste la great procession siempre existe la opción de aprovechar las ofertas de viajes del puente de diciembre. Este año, ¿Londres?
El inglés lo invade todo. Al final, bien. Con las plataformas ya no es necesario suscribirnos a una revista, comprar dvd o contratar un ‘tishe’ (teacher) para practicar, porque la DTV nos ofrece la opción de oír el audio original. Estad atentos. ‘Aliquindoi’ (look and do it). El otoño se acerca…