Nueva agresión a un sanitario de Sevilla: el paciente lo intimidó rompiendo el mobiliario de la consulta
- El incidente causó una interrupción del servicio en el Consultorio de Burguillos. El Distrito Sanitario Sevilla Norte activó el Protocolo de Prevención del SAS.
- Más información: El personal sanitario de Sevilla dice basta a las agresiones: "Aumentan cada año y no hay medidas eficaces"
Este lunes se ha producido una nueva agresión a un trabajador sanitario en Sevilla, que se suma a otras dos registradas durante la semana pasada en centros de salud de la provincia.
Concretamente, el Distrito Sanitario Sevilla Norte ha activado el Plan de Prevención y Atención de Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS) después de que se haya registrado una agresión física a un profesional médico en el consultorio de Burguillos.
El episodio de violencia, durante el que se han generado desperfectos y rotura de mobiliario de la consulta, ha interferido directamente en el normal funcionamiento del centro, obligando a retrasar la asistencia a pacientes que estaban esperando atención.
La Dirección Gerencia del SAS ha notificado a través de una nota de prensa que el mencionado Distrito de Sevilla Norte ya ha puesto a disposición del profesional afectado todos los recursos necesarios (entre ellos asesoramiento legal y apoyo psicológico, así como asistencia sanitaria).
Según el Registro Informático de Agresiones de Centros (RIAC) del SAS, este nuevo incidente resultaría en un total de 220 agresiones a personal sanitario en Sevilla en lo que va de 2024.
El SAS convoca una concentración
Además, y junto al equipo directivo y profesionales del centro, el SAS ha mostrado "su apoyo al trabajador, víctima de un episodio de violencia mientras desempeñaba sus funciones". Además ha anunciado que en los próximos días se convocará una "concentración de repulsa en la que podrán participar el resto de profesionales de esta área sanitaria".
También han querido "reconocer la importancia de la colaboración con las
Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, a través de su interlocutor sanitario en la
provincia de Sevilla.
Asimismo, recuerdan "que la agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública es considerada delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en diferentes casos con penas que oscilan entre los 12 meses y los 3 años de prisión".