
Imagen de recurso de una niña con implante coclear. Sevilla
Por cada 1.000 niños que nacen en Sevilla, uno padece pérdida auditiva severa: repararla va "más allá del ámbito sanitario"
En pacientes pediátricos, los implantes cocleares implican a profesionales de todo tipo como logopedas o rehabilitadores del lenguaje.
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Uno de cada mil niños nacidos en Sevilla padecen pérdida auditiva severa o profunda. Así lo ha explicado a este periódico Serafín Sánchez, jefe de Otorrinolaringología del Hospital Virgen Macarena.
Factores genéricos, congénitos o adquiridos, como una infección por citomegalovirus, suelen ser los principales motivos por los que la población pediátrica desarrolla hipoacusia, según ha detallado el experto.
Gracias al avance de la medicina, las personas son pérdida total o parcial de audición pueden recuperarla gracias a los implantes cocleares. Tanto es así que más de cien personas al año recuperan su audición solo en la provincia de Sevilla.
El Hospital Virgen Macarena es pionero en tratar a pacientes con pérdida auditiva severa o profunda gracias a los implantes cocleares realizados por el Servicio de Otorrinolaringología.
"Solo en 2024, colocamos implantes cocleares a 14 niños con pérdida auditiva desde el nacimiento y a uno por citomegalovirus", ha declarado Sánchez.
Los implantes cocleares son un dispositivo electrónico que sustituye las funciones del oído interno, estimulando directamente el nervio auditivo mediante impulsos eléctricos.
En el caso de la población pediátrica, una intervención de este tipo implica "un enfoque integral que asegure el éxito del procedimiento y la adaptación del paciente al nuevo dispositivo auditivo".
En este sentido, colaboran diferentes especialidades sanitarias "como otorrinos, logopedas, psicólogos, trabajadores sociales, genetistas, neuropediatras, radiólogos, medicina preventiva, oftalmólogos, psiquiatras o cardiólogos", ha descrito el otorrinolaringólogo.
Además, Serafín Sánchez ha hecho especial mención a que es crucial integrar en el proceso tanto a logopedas como a "rehabilitadores del lenguaje". "Es una operación que trasciende lo sanitario", ha insistido, poniendo el foco en que el ámbito educativo es uno de los pilares que hace posible el éxito de estos implantes.
Población mayor
No solo tratan a niños, sino que otros pacientes potenciales son las personas mayores. En este sentido, el experto ha reconocido que el número de pacientes pediátricos es mayor que el de las personas de avanzada edad debido la "poca divulgación".
Así, ha explicado que "existen más candidatos de personas mayores que deberían optar a implantes cocleares, pero no les llega la información".
No obstante, y pese al mencionado hecho, Sánchez apela a que las estadísticas pueden cambiar. "Cada vez nacen menos niños", ha alegado, "a la vez que las personas mayores están más concienciendas con este tipo de procesos".
Tal y como ha señalado el experto, las personas mayores que padecen de un deterioro grave auditivo tienden a aislarse, lo que les provoca una profunda depresión. Asimismo, estos dos factores contribuyen, finalmente, a un deterioro cognifivo prematuro.
El otorrinolaringólogo ha subrayado que los implantes cocleares son una solución para frenar los síntomas mencionados y para hacer que las personas mayores alcancen una mejor calidad de vida.
Riguroso diagnóstico
Los especialistas resaltan la relevancia de identificar la pérdida auditiva a tiempo para intervenir con prontitud y garantizar que los implantes logren su máxima eficacia.
Esto se aplica en especial a menores en etapa de crecimiento, donde resulta esencial proporcionar estimulación directa a los circuitos auditivos centrales mediante estos dispositivos.
Asimismo, Serafín Sánchez ha asegurado a EL ESPAÑOL que desarrollan "un proceso riguroso de diagnóstico", realizando una evaluación para determinar si el paciente es apto.
Para ello, se consideran aspectos como la gravedad de la hipoacusia, ya sea severa o profunda, unilateral o bilateral; la escasa o nula utilidad de los audífonos o una valoración positiva en términos audiológicos, psicológicos y médicos.
El dispositivo cuenta con dos partes. La externa incluye un micrófono para captar los sonidos, un procesador encargado de transformar las señales acústicas en eléctricas, una batería y un transmisor que enlaza con la sección interna.
La interna, situada bajo la piel detrás de la oreja, está compuesta por un receptor-estimulador que recibe la señal del procesador y la envía a los electrodos, además de una guía de electrodos insertada en la cóclea a través del oído medio.
Tras la intervención, transcurre aproximadamente un mes antes de que el implante pueda comenzar a funcionar, ya que es necesario activarlo y ajustarlo progresivamente hasta determinar los umbrales adecuados para cada persona.
Más de 3.000 pacientes
Desde que se inició este tipo de intervenciones en la comunidad andaluza, hace más de 30 años, han sido más de 3.000 las personas que se han beneficiado de este procedimiento quirúrgico.
Esto se ha traducido en un importante impacto en la calidad de vida y el bienestar emocional de los pacientes.
En Andalucía, el Hospital Virgen Macarena es centro de referencia para implantes cocleares, junto a los hospitales San Cecilio de Granada y Virgen de la Victoria de Málaga.
Día internacional
El 25 de febrero se celebra el Día Internacional del Implante Coclear en conmemoración de la fecha en la que se realizó la primera operación precursora de implante coclear en el mundo.
Esta operación pionera fue hace 66 años en Francia. En la actualidad, se celebra para dar visibilidad no sólo al implante coclear, sino también al colectivo de personas usuarias y sus familias.