Un simple cambio de asiento da lugar a un increíble culebrón viral
En la Jungla. Una mujer pidió a una chica cambiar el asiento en un avión para poder ir con su novio, sin saber que daba pie a un romance viral que ha enamorado hasta a sus protagonistas.
4 julio, 2018 14:13Todos hemos cambiado alguna vez el asiento del avión o del tren a personas que viajan juntas. Lo que pocas veces el sentarnos al lado de un desconocido ha dado lugar a un bonito romance o calenturienta aventura -aunque a todos nos hubiera gustado-. Es demasiado peliculero.
Sin embargo, de vez en cuando la realidad supera a la ficción y en este caso en la historia solo falta Hugh Grant -o faltaría si los protagonistas no fuesen animales de gimnasio-. Todo comenzó cuando la narradora le pidió a una chica que le cambiase el asiento para poder ir con el novio..
Last night on a flight home, my boyfriend and I asked a woman to switch seats with me so we could sit together. We made a joke that maybe her new seat partner would be the love of her life and well, now I present you with this thread.
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Ayer en el viaje de vuelta a casa, mi novio y yo pedimos a una mujer que nos cambiase el asiento para ir juntos. Hicimos la broma de que igual su nuevo compañero de asiento es el amor de su vida y, bueno, ahora os presento este hilo".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"¡Están tonteando! Los dos tienen pinta sexy de gimnasio y están charlando y sonriéndose, ¡y todavía no hemos despegado! ¡Espero que se enamoren!"
Y es que tenían muchas cosas en común: los dos son entrenadores personales y además veganos. El típico contacto de brazos iba que volaba. Así que Rosey trató de fijarse en lo más importante:
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"¡No hay anillos a la vista!".
Pero la cosa iba a más.
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Él le va a mandar una charla de TED cuando aterricen".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Ella es guapa".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Él está fuerte".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"¡Y nosotros estamos nerviosos!"
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Ella se ha ido al baño con una coleta y ha vuelto con el pelo suelto. Ahora le está pidiendo consejos de fitness".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Están pensando compartir un menú".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"No han pedido bebidas, pero están compartiendo queso (proteína). ¡Salvaje!".
Los narradores estaban tan metidos en la historia que acabaron su hora de WiFi gratuita y tuvieron que pagar para seguir contando el romance:
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
Y entonces....
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"ÚLTIMA HORA: se han ido al baño a la vez".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Han vuelto del baño juntos. Ahora están ayudándose a limpiar. El espacio de los dos".
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"¡Ella ha apoyado la cabeza en su hombro por un segundo!".
Por si ir al baño juntos no era suficiente, la cosa se pone muy seria...
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
"Han empezado a seguirse en Instagram".
Y la cosa no termina con el aterrizaje:
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
Pero los instigadores del amor no iban a dejar de seguir esta historia aquí, y lograron encontrar sus cuentas de Instagram. Ya se seguían y, además, ambos están solterísimos y viven en Dallas, Texas.
— Rosey Blair (@roseybeeme) 3 de julio de 2018
Su historia se viralizó y llegó a los protagonistas de la historia, y él se puso en contacto dando permiso para compartir su identidad. Además, comentó que comenzó a sospechar algo al aterrizar, pero no vio la historia hasta que se la pasó un amigo:
He was SO nice! Gave us permish for y’all to go give him some love. pic.twitter.com/Ph8WX7Xxkt
— Rosey Blair (@roseybeeme) 4 de julio de 2018
Y es que, como para no enamorar a compañeras de viaje:
Y muchos estaréis preguntando... ¿y la chica? Los narradores de esta bonica historia están tratando de conseguir su permiso para publicar su identidad, pero de momento no lo tienen. Así que habrá que esperar para poner dos caras al romance del avión.