Una llamada de emergencia de Amelia Earhart explica su misteriosa desaparición
En la Jungla. Tras más de 80 años después de que desapareciese Amelia Earhart, pionera en aviación y la primera mujer que sobrevoló sola el Atlántico, el misterio de su desaparición se habría resuelto. Esta vez de manera definitiva.
30 julio, 2018 14:00La Historia se reserva para sí una enorme cantidad de misterios que los historiadores han sido incapaces de resolver pese a los esfuerzos por conseguirlo. Uno de esos misterios atañe a Amelia Earhart, una de las pioneras en aviación que desapreció el 2 de julio de 1937 mientras sobrevolaba las islas del Pacífico en dirección a Papua Nueva Guinea. 5 años antes había conseguido cruzar el Atlántico en solitario pilotando su avión. En el momento de desaparecer acometía otro gran logro: sobrevolar el globo por la línea ecuatorial. La leyenda de Amelia creció a partir de su desaparición.
A las 8:43 de la mañana (hora del lugar de los acontecimientos) el navío guardacostas de Estados Unidos Itasca recibía la última comunicación del Electra, el avión que pilotaba Amelia con la única compañía de Fred Noonan, el navegador escogido para acompañarla en el que fue el segundo intento de acometer la travesía aérea alrededor del mundo. Tras esa última comunicación recibida por el guardacostas se iniciaron las labores de localización con la idea de que el avión se había estrellado en el océano Pacífico. Esa era la principal teoría, la que perduraba hasta la actualidad. Recientemente se descubrió que el desenlace habría sido menos fatal.
Amelia Earhart y Fred Noonan consiguieron tomar tierra en la Isla de Nikumaroro, también conocida como Isla de Gardner (este era el nombre anterior, antes de que la república de Kiribati rebautizase la isla). Así lo corrobora Ric Gillespie, director del Grupo Internacional de Recuperación de Aviones Históricos (TIGHAR por sus siglas en inglés). Ric y su grupo llevan 30 años investigando la desaparición de Amelia Earheart y Fred Noonan. Las recientes pesquisas aclaran los últimos días de la pionera aviadora.
No es la primera vez que leemos acerca de las teorías de Gillespie y el TIGHAR ya que conocíamos sus labores de investigación y las conclusiones tras examinar unos huesos encontrados en la Isla de Gardner, ahora Isla de Nikumaroro, un pequeño pedazo de tierra en el medio del Pacífico que se encuentra a más de 3200 km de Hawaii. Ric Gillespie tendría casi confirmada su teoría tras analizar los huesos y las últimas comunicaciones recibidas por emisoras de Estados Unidos y hasta Canadá.
Amelia y Fred habrían aterrizado de emergencia en la Isla de Nikumaroro sobreviviendo como náufragos por un tiempo sin especificar (desde días a meses). Amelia habría intentado establecer comunicación con la emisora del Electra, dañado tras el aterrizaje. El avión habría aguantado a flote durante varios días ofreciendo a Amelia Earheart la oportunidad de establecer comunicación, sin obtener resultados. Los mensajes de socorro se habrían escuchado en varias emisoras de Florida, Iowa, Texas y hasta Canadá, a varios miles de kilómetros del lugar de la desaparición.
Gillespie y su equipo se apoyan en los mensajes de socorro recibidos por las emisoras, también en los huesos encontrados en 1940 en la Isla de Nikumaroro. Tras un análisis exhaustivo años más tarde un equipo de forenses dictaminó que las medidas encajaban en el esqueleto de Amelia Earheart.
La investigación, pese a no ser 100 % fidedigna, sí ofrece un margen de seguridad suficiente como para corroborar que Amelia y Fred vivieron sus últimos días como náufragos y murieron en la isla sin ninguna posibilidad de escapar de ella; y sin que los equipos de salvamento lograsen encontrarles. Esto daría fin a la enorme cantidad de teorías que acumula el misterio de Amelia Earheart, una mujer pionera en la aviación.