A pesar de que ETA lleva cerca de una década sin matar, la banda sigue proyectando una larguísima sombra sobre la política española. El terrorismo vasco -que en 2011 anunció el "cese definitivo de la lucha armada"- sigue siendo una bandera que se sigue agitando en política, y no siempre con legitimidad.
Esta última actitud puede resultar tremendamente hiriente para aquellas personas que sí que vivieron de cerca el terror etarra, aquellos que tenían que sentarse en los restaurantes de espaldas a la pared y mirar debajo del coche antes de arrancar.
El concejal del PP en San Sebastian y portavoz del partido en el Parlamento Vasco, Borja Sémper, estalló finalmente en un tuit en el que mostraba su frustración por los teóricos de la lucha antiterrorista de salón, mentando un mítico héroe de acción muy propio de las películas de sobremesa:
Como era previsible al juntar un tema tan delicado, unas formas tan agresivas y la ambigüedad hacia a quién va dirigido, el tuit ha causado una gran polémica, críticas y aplausos:
Más adelante, matizó ligeramente a qué se refería, aunque sin especificar a quién apuntaba. Así que, a buen entendedor...
[Más información: La psicóloga forense que desmonta la "incapacidad absoluta" de Juan José Cortés]