No era necesaria, nadie la había pedido, pero a veces los no deseos se convierten en realidad y un tuitero ha pensado que sería una buenísima idea comparar a Mozart con Bad Bunny, uno de los cantantes de reguetón más famosos del momento. Bien es cierto que antes, cuando empezó a popularizarse este estilo musical (ahora a esas canciones se les llama reguetón antiguo y aquí no podemos con nuestra vida ya), se trataba de un feudo disfrutado casi en exclusiva por un determinado segmento de población.
Sin embargo, ahora escuchar reguetón no está reñido con la intelectualidad y los fans de esta música ya no se esconden. En este punto, convendría recordarles que entre escucharla a solas en su cuarto y llevarla puesta en el móvil o en el coche a todo meter para que la oigan a diez kilómetros a la redonda hay un término medio. Pero volvamos al tema: ¿qué necesidad hay de comparar a un niño prodigio de la música clásica (con un padre pesadísimo) con Bad Bunny?
A este primer tuit han reaccionado miles de personas, que no han querido perderse los datos que el tuitero ha dado a continuación para respaldar su teoría:
No contento con todo lo dicho, Wikipedia mediante, el tuitero aportaba un último dato más:
No le ha hecho falta escribir otro tuit para recibir una lluvia de críticas llenas de sarcasmo:
Por eso no le ha quedado más remedio que abrir el paraguas:
Aunque aquí no seamos fans de Bad Bunny reconocemos que tampoco era necesaria tanta superioridad moral.