La 'bronca' de un exsoldado a la juventud que 'no se esfuerza': "eres una sanguijuela"
En La Jungla. El hilo que ha publicado un exsoldado en Twitter sobre el esfuerzo en el trabajo se ha hecho viral, pero esconde una peligrosa lección.
17 septiembre, 2021 23:32Noticias relacionadas
Todos hemos tenido compañeros de trabajo que tienden a escaquearse y también, en el lado opuesto, otros que realizan muchas más tareas de las que deberían. Como suele ocurrir con muchas otras cosas, en el equilibrio está la virtud. Es decir, no podemos exigirle a nadie que se vaya a su casa más tarde de lo estipulado en su contrato aunque cierta flexibilidad sea necesaria, ni tampoco podemos aplaudir a la gente que desvaloriza su propio empleo haciendo muchas cosas por las que no le pagan.
Sobre este tema ha hilvanado un hilo el exsoldado y escritor catalán Víctor Torres Alonso, sosteniendo un discurso un tanto polémico, pero que ha cautivado a miles de personas en Twitter. En ese equilibrio y esa flexibilidad que mencionábamos anteriormente, él ha percibido que las nuevas generaciones que se incorporan al mundo laboral lo hacen limitando su labor a las tareas para las que han sido contratadas, algo que a priori no debería ser un problema.
Sin embargo, Torres lo ejemplifica con algo tan nimio como fregar en la oficina en un momento puntual sin esperar a que venga alguien encargado de la limpieza a hacerlo, algo que parece del todo lógico ya que a nadie debería costarle coger una fregona. Relata que la secretaria, "una chica muy joven", se ha negado a hacerlo argumentando que "era vergonzoso", un comentario al que él responde diciendo que "no hay trabajos indignos, la dignidad la aportan los trabajadores":
Había una gotera en la oficina, me he puesto a fregar.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
La secretaria, una chica muy joven, se ha cachondeado. Le he dicho que también podía hacerlo ella y me ha respondido que no, que era vergonzoso.
"No hay trabajos indignos, la dignidad la aportamos los trabajadores"
Comenzado el hilo de Twitter, Torres siguió explicando la situación vivida en la oficina, criticando la respuesta de su compañera y narrando cómo resolvió él mismo el problema:
La chica ha seguido, diciéndome que tampoco le correspondía hacerlo.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Le he explicado que el tema no es discutir quién tiene que hacer qué, sino sacar adelante la faena.
Que uno trabaja, hace lo que toca y luego ya pensará en si le tocaba o no.
No lo ha entendido.
No lo ha entendido.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Obviamente, ni se le ha ocurrido hacer nada. Se ha quedado mirando como trabajaba con una sonrisilla en los labios.
He fregado, he puesto el cartel y cuando ha bajado el de mantenimiento le he dado el aviso.
La otra ya estaba con el móvil.
La situación vivida, afirma el autor, le ha recordado a cómo se sintió al salir del Ejército y volver al mundo civil, que no acaba de comprender. También ha explicado que empezó a trabajar antes de la edad legal para ello, siendo un niño, como si eso fuese lo deseable, e incluso ha enumerado "vender porno" como uno de sus empleos durante estos años, un discurso peligroso que se vale del relato de la cultura del esfuerzo para agrandar los márgenes:
Esta es una de las cosas que más me ha chocado al volver del ejército.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
¿Sabéis la película "Demolition Man"? ¿El tío que se pasa años criogenizado y luego no encaja en el mundo?
A veces me siento así.
Empecé a currar a los 14 y he hecho de todo. Lo que hiciera falta para sacar pasta.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Vender porno, cargar moquetas, limpiar pisos, fábricas, atender llamadas en un despacho de abogados, llevar un bar, trabajar en una granja, hacer de vigilante de seguridad...
Siempre con la misma mentalidad:
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Trabajar es trabajar. Haces tus horas, das lo mejor de ti e intentas hacer las cosas de la mejor manera posible.
No hay trabajos indignos. Todo trabajo es bueno si lo haces con determinación, tesón y voluntad. La dignidad la pones tú.
Entré al ejército en Montaña, donde la mentalidad es la misma.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Da igual que seas sargento, cabo o teniente. La Montaña castiga a todos por igual.
Si el capitán se tiene que poner a cavar un iglú, se pone. A tu lado, hombro con hombro, y a pasar frío.
Cuando entré en el ejército, la mentalidad en la calle era parecida. Mis jefes siempre habían bajado al barro conmigo (salvo en el despacho de abogados, pero ya sabemos cómo son...).
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Ahora vuelvo a la vida civil y me encuentro una forma de ver el trabajo completamente distinta
Relatada su experiencia, ha enumerado varias de las excusas que se ha encontrado en este tipo de circunstancias:
"Esto no me toca"
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
"No es mi trabajo"
"Déjalo, que ya vendrá el de mantenimiento"
"¿Yo? ¿Fregar el suelo? No"
Y estas son las que medio parecen razonables. Luego están las de:
"Yo no madrugo, mi turno ha de ser de tarde"
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
"Me da igual que hayan operado al compañero, yo tengo fiesta"
"Si no aparece el compañero en cinco minutos, me piro y dejo esto como quede"
O el que se pide psicológica para estar 18 meses en su casa rascándose los cojones
"Es que para lo que cobro"
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Pues si no te gusta, busca un sitio donde paguen más. Pero si te pagan por trabajar, trabajas al 100%.
Cree Torres Alonso, al que sigue Santiago Abascal y que no ha ocultado su colegueo con Vox a través de las redes sociales, que todo esto se debe a una pérdida de valores como el "esfuerzo, trabajo y voluntad de servicio":
Tengo la impresión (completamente subjetiva) que en un periodo de tiempo MUY corto hemos perdido MUCHO los valores de esfuerzo, trabajo y voluntad de servicio.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Y todo esto le ha llevado a la conclusión de que uno debe esforzarse sea cual sea su empleo y, si no lo haces, eres "un haragán, un basura, un vividor, una rémora y una sanguijuela":
Da igual qué trabajo tengas, tú siempre debes aspirar a ser EL MEJOR en eso.
— Víctor Torres Alonso (@VTorresAlonso) September 14, 2021
Y si no el mejor, el más esforzado.
Pero dar el 100%, siempre.
Todo lo demás es ser un haragán, un basura, un vividor, una rémora y una sanguijuela.
No es la suya la única conclusión que se puede sacar al respecto ni la más certera. La más obvia, quizás, es que no da igual el trabajo que tengas si tus condiciones laborales no están dentro de un marco legal y que tampoco todos los trabajos, por el mismo motivo, son dignos. Esforzarse cuando te están explotando y "dar el 100% siempre" es mucho más complicado que cuando cobras un salario justo y haces las horas que se recogen en tu contrato. Conviene diferenciar, por tanto, la cultura del esfuerzo con la esclavitud y la explotación laboral.