Un total de 193 personas murieron el 11 de marzo de 2004 en Madrid por el ataque terrorista que detonó diez bombas en cuatro trenes de la red de Cercanías, siendo uno de los sucesos más traumáticos de la historia reciente de España. Sin embargo, a juzgar por los tuits que hoy nos ocupan, algunas personas consideran que hablar de explosivos y detonaciones citando a la cuenta de Twitter de Renfe en una especie de amenaza figurada es una mofa totalmente admisible.
Quien más y quien menos ha tenido algún tipo de conflicto con Renfe. Los retrasos o la inoperancia de su página web son dos de las incidencias más comunes de las que los viajeros se quejan en las redes sociales. Twitter facilita el contacto con esta y otras empresas, así que lo primero que hacemos ahora cuando queremos quejarnos es marcar la arroba y plasmar toda nuestra indignación a ver si así se nos soluciona el problema.
Hasta ahí todo es comprensible y, de hecho, el equipo de community manager (CM) de Renfe atiende al día decenas de quejas y preguntas facilitando toda la información disponible y con una amabilidad poco común por según qué red social. Lo llamativo es que hay un porcentaje nada desdeñable de usuarios que usan la amenaza de bomba como un chascarrillo cuando se cabrean con el servicio de trenes y también los hay que hacen bromas obscenas y absurdas.
"El CM del año para Renfe"
El tuitero Adrián Galindo ha publicado cuatro historias que se han hecho virales, otorgando el "premio a CM del año" para la persona (o personas) que están al frente de la cuenta de Renfe "por lo que tiene que soportar a diario". En la primera historia, banalizan el acoso sexual a una menor, mientras que en la segunda amenazan con explotar "20 kilos de explosivo plástico que llevo en la mochila":
En la tercera hablan de "hacer una célula terrorista y explotar toda la Renfe" y en la cuarta de "detonar una bomba en Atocha como no venga la Renfe en 5 minutos", añadiendo que "el 11M será anecdótico al lado de esto". El CM cita a la Policía Nacional, insiste en que son "bromas fuera de lugar" y zanja recordando que "no aceptamos este tipo de mensajes". No obstante, basta con echar un vistazo y constatar que no son las únicas historias de este tipo:
En el tuit anterior amenazan con suicidarse y explotar una bomba en la estación, mientras en este otro advierten que estallarán otra si el tren no llega:
Este último, que afirma haber puesto una bomba en Atocha, se lleva una reprimenda extra de Renfe al recordarle que por respeto a la gente que perdió la vida y a sus familiares no debería bromear con ello:
En todo caso, la mayoría de tuiteros han censurado este tipo de mensajes y han aplaudido al CM de Renfe:
Un CM que, por cierto, sabe que hasta el último céntimo de su sueldo se lo gana a pulso y así se lo decía al autor del primer tuit:
Ojalá citar a la Policía en Twitter valiese para mucho más.