Las camareras sufren una doble discriminación en su faceta laboral. Por un lado, al igual que ocurre con sus compañeros hombres, padecen la precariedad que se ha extendido por la hostelería y que ha llegado a obligar, en algún caso que hemos visto en La Jungla, a que sean ellos los que pagan literalmente por los caprichos de los clientes. A eso hay que sumar que son mujeres y ven el machismo a diario, como en esta crítica donde se decía que un bar parecía un puticlub.
En esta ocasión, gracias de nuevo a la denuncia que se ha hecho viral a través del perfil Soy Camarero, hemos podido ver las preguntas machistas que le han formulado a una camarera a través de WhatsApp. Habían puesto previamente una oferta para cubrir ese puesto de trabajo y la mujer interesada entabló conversación a través de la aplicación de mensajería. Un par de capturas del diálogo entre el empleador y ella son las que han trascendido.
Esta persona le pedía el currículum a la mujer y ella se lo mandaba en un archivo, precisando además que su "disponibilidad horaria sería por las tardes". Al otro lado, empezaban las preguntas incómodas: "¿Tienes buena presencia física?", le dicen en primer lugar, mientras la mujer preguntaba que a qué se refería con eso. "Buen cuerpo", insistían en la cuestión, recibiendo a cambio una explicación de la camarera: "Tengo un par de kilos de más, pero eso supongo que no influye a la hora de trabajar".
"Respetar al cliente"
Observaba la mujer que no influía "de cara al público siempre y cuando se trabaje bien y respetando tanto al cliente como a los compañeros". Ahí quedaba la conversación, de la que únicamente hemos podido ver otro fragmento en el que el empleador le preguntaba también si ella tendría "inconveniente en usar escote para trabajar".
El tuit de Soy Camarero ha sido visto por más de 170.000 usuarios en la red social y también ha provocado comentarios tan indignados como estos:
No es para menos.