Cada vez son más los lugares que buscan alternativas a la pirotecnia para sus festejos, conscientes de que los estallidos de la pólvora son un problema para mucha gente. Por un lado, para personas con espectro autista o cualquier discapacidad sensible a los ruidos, pero también para aquellas que conviven con perros y observan impotentes sus reacciones desesperadas. Gestionar el miedo de los canes no es nada fácil y algunos optan incluso por la medicación para que superen el trance, pero quizás el truco que se ha hecho viral en TikTok les ayude.

Hay que tener en cuenta que los perros y otros animales tienen una sensibilidad auditiva muy superior a la de los humanos. Así, por ejemplo, mientras una persona puede percibir hasta 20.000 hercios, los canes llegan a los 50.000 y los gatos a los 100.000 hercios. Son varias las recomendaciones para tratar de ayudarlos a gestionar una sesión de pirotecnia, como alejarlos de la zona más ruidosa y mantener la calma sin reñirle, permanecer a su lado y hablar de forma relajada, ayudarle a construir un refugio donde se sientan más tranquilos o distraer su atención.

Precisamente, procurar que el perro se centre en otra cosa que no sea el ruido es lo que ha puesto en práctica Aitor Rodrigo con Koda, los protagonistas de esta historia. Un joven catalán y un Border collie que están recorriendo el mundo sobre ruedas: bicicleta, motocicleta, todoterreno y furgoneta que les están llevando a cumplir un sueño nómada que relatan puntualmente en sus redes sociales, desde que se conocieron hace unos 4 años. Ahora, tras un parón forzoso en Rumanía por haberse estropeado su sidecar, llevan un tiempo en Barcelona.

"Más empatía y buscar alternativas"

En la ciudad fue donde han grabado el vídeo que se ha hecho viral en TikTok, mostrando el truco que pone en práctica Aitor para tranquilizar a Koda y que se olvide de que hay ruidos en el exterior. Así, conectando el YouTube en la televisión del salón y optando por una canción de electrónica a un volumen alto, juega y baila con el perro, obligándole a chocar la pata y a hacer otras filigranas que lo mantienen entretenido y aislado de lo que está sucediendo, llevándose además una sesión de caricias final:

Los Border collie son además una raza especialmente sensible a la pirotecnia, por lo que parece que la técnica de Aitor podría ayudar a muchos otros perros si sus dueños se lo proponen. Más de 3,4 millones de visualizaciones demuestran la viralidad del vídeo, que acumula también miles de comentarios: "Qué mal lo pasan y qué mal lo pasamos nosotros", dice uno de ellos, mientras otra usuaria confiesa que "pensé que era la única que hacía una fiesta para mis hijos, me quedaba sin energía, pero ellos tranquilos y felices".

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