El chef asturiano José Andrés, portada de la revista Time por su labor humanitaria, desde Estados Unidos, ha decidido dar un paso al frente y ayudar, a su manera, a luchar contra el coronavirus. A través de World Central Kitchen, su ONG, ha puesto toda su maquinaria en marcha para dispensar comida a los más desfavorecidos, a los hospitales y a todos aquellos que lo necesiten durante esta crisis sanitaria.
Su proyecto, en alianza con el Grupo Arzábal –que tiene varios restaurantes en Madrid–, pretende “elaborar miles de raciones diarias de comidas que irán creciendo a medida que se sumen más cocinas voluntarias a esta iniciativa solidaria”, ha reconocido Javier García desde WCK. Empezando por Madrid, la región más golpeada por la enfermedad, y continuando en Barcelona y Valencia.
Pero bien, ¿dónde están los chefs de aquí, los que copan la televisión pública y privada? ¿Qué hacen Alberto Chicote, Jordi Cruz o Martín Berasategui? ¿Y Karlos Arguiñano? ¿Ha ayudado alguno? ¿Están colaborando? No, al menos, de forma pública. Todos, a su manera, siguen estando presentes a través de sus redes sociales, pero ya está.
José Andrés, portada de Time.
Polémicas Arguiñano
Karlos Arguiñano no ha hecho ninguna aportación monetaria o de ayuda durante la crisis del coronavirus –al menos, que se sepa (por su contenido en redes sociales). Sin embargo, sí ha aprovechado su programa en Antena 3 para acusar a las cadenas de televisión de hablar demasiado sobre el Covid-19. “No hay que estar todo el día oyendo las noticias. Te terminan agotando...”, reconocía, al mismo tiempo que preparaba un pastel de carne.
“Hay televisiones que se ceban con la información todo el día. Y hay que saber que también hay otros programas, series y películas que también entretienen un montón. Con ver un par de veces las noticias, es suficiente. Lo demás es repetitivo y te terminan llenando la cabeza”, explicaba, en su programa, haciendo un alegato por el entretenimiento.
Karlos Arguiñano, durante su programa en Antena 3.
Y, al mismo tiempo, insistió, dando las gracias a todos los colectivos que hacen llegar los alimentos a los mercados, y recomendando programas, documentales y películas. “Somos listos para saber que nos podemos entretener jugando al parchís, a las cartas, a la oca, a multitud de juegos que hay ahora”, sentenció.
Pero, para muchos, le ha faltado arrimar el hombro. Ni en Twitter, ni en Instagram… Probablemente, algunos ciudadanos han echado en falta que el cocinero más mediático de la historia de la televisión, en estos días, hiciera alguna aportación o ayudara de algún modo a cocinar –como José Andrés– para sanitarios o colectivos que ayudan a luchar contra la pandemia.
Recetas Chicote
Su caso es parecido al de Alberto Chicote. El popular presentador de Pesadilla en la cocina, anuló todas sus cenas en Yakitoro –restaurante del que es dueño– al decretarse el estado de alerta y, desde entonces, bajo el hashtag #CocinadeResistencia, elabora recetas en su Instagram y las comparte con todos sus seguidores.
Su modus operandi es siempre el mismo: ataviado con una camiseta de rugby cada día (empezando con una de los All Blacks y continuando con las de Australia, Inglaterra…), con pocos ingredientes, propone algo fácil para que cualquier ‘cocinilla’ pueda atreverse durante esta cuarentena.
¿Y algo más? EL ESPAÑOL se puso en contacto con su agencia de representación de Alberto Chicote y ellos declinaron hacer cualquier declaración para este reportaje.
Jordi Cruz y Berasategui
Jordi Cruz se despidió ‘culinariamente’ hablando de sus clientes el pasado 15 de marzo, a través de una publicación de Twitter: “Cerramos las puertas de nuestros restaurantes, sabiendo que pronto volveremos a darle fuerte a la cazuela con más fuerza. Un servidor y todos los que siempre me acompañan, nos quedaremos en casa y haremos de nuestro hogar una barricada”, escribió.
El cocinero de Abac, Angle, Ten’s Barcelona, Dor y Atempo de Girona, más conocido por ser jurado de Masterchef, durante estos días de confinamiento, también se ha puesto a elaborar platos caseros. A través de su cuenta de Instagram, va explicando detalladamente cómo hacerlos y los ingredientes a usar.
Al igual que ocurre con Chicote y con Arguiñano, muchos habrán pensado: ¿y no aporta nada más? No, al menos, de forma pública. EL ESPAÑOL se puso en contacto con su agencia de representación y el cocinero se negó a confirmar o desmentir si estaba aportando o ayudando de alguna manera (más allá de confeccionando sus recetas) durante la crisis del coronavirus.
Y lo mismo sucedió con Martín Berasategui, también representando por la misma agencia. El chef, en su cuenta de Instagram, anunció el cierre de su restaurante ante la crisis del coronavirus y, desde entonces, escribe recetas para un periódico.
¿Y el resto?
Hay otros muchos cocineros que sí están ayudando como pueden en la situación actual. Cristina Oría, por ejemplo, ha creado un crowfunding –que ya lleva recaudados más de 165.000 euros– para llevar comida a Ifema todos los días. A través de #GoFundMe, anima a sus clientes y seguidores a aportar “material sanitario” o lo que puedan para tratar de mejorar la situación del personal médico y facilitar su trabajo.
Diego Guerrero, a su vez, ha puesto su grano de arena apoyando la iniciativa #Yomecorono –para donar dinero a investigación contra el coronavirus– y cocina para la World Central Kitchen de José Andrés con el objetivo de repartir comida por toda España. O, por último, iniciativas como #Food4heroes, donde ya hay más de 90 restaurantes y marcas que cocinan y distribuyen comida gratis que llevan a los sanitarios a los hospitales madrileños.