Perro siendo acariciado

Perro siendo acariciado iStock

Sociedad

El debate entre una anfitriona de Airbnb y su inquilina por un cargo extra: quieren cobrarle más por su perro

A través de las redes sociales, ha criticado que la propietaria del piso que alquiló le haya exigido pagar un extra por haber encontrado pelos de su mascota.

26 septiembre, 2024 19:53

Durante el año, son miles las personas que programan viajes y necesitan reservar alojamiento. Mientras algunos optan por hospedarse en hoteles, muchos otros prefieren alquilar un apartamento vacacional a través de particulares. En este contexto, Airbnb se ha consolidado como la plataforma de referencia.

Sin embargo, cada vez son más frecuentes las controversias entre propietarios e inquilinos. Un ejemplo fue el de una mujer que compartió en TikTok imágenes de cómo tres huéspedes dejaron su apartamento tras su estancia, generando debate sobre si los inquilinos deben limpiar el lugar, incluso habiendo pagado una tasa de limpieza por adelantado.

Este no es el único conflicto. Un caso muy viral se produjo en Estados Unidos, y también relacionado con la limpieza. En este caso, una usuaria criticó que la anfitriona le cobrara un cargo extra por encontrar pelos de perro en el apartamento, a pesar de que en la descripción del alojamiento se indicaba que era apto para mascotas.

Judge, el perro de la huésped obligada a pagar un extra en Airbnb por dejar pelos de su mascota.

Judge, el perro de la huésped obligada a pagar un extra en Airbnb por dejar pelos de su mascota.

La inquilina, llamada Maddie, ha compartido en redes sociales cómo se desarrollaron los acontecimientos. Mientras buscaba el apartamento ideal para sus vacaciones, uno de los requisitos principales para ella era que el alojamiento aceptara mascotas. Tras asegurarse de que la vivienda cumplía con ello, decidió alquilarla para disfrutar de unos días de descanso junto a su perro.

De hecho, como confirmó en sus redes, Maddie incluyó a su perro Judge, un pastor alemán, en la reserva del apartamento. Sin embargo, al finalizar su estancia, se encontró con una desagradable sorpresa que ha desatado un intenso debate.

[Se queja de cómo le han dejado su Airbnb y reabre el debate: ¿debo recogerlo si me cobran la limpieza?]

Pasados unos días, Maddie recibió un mensaje a través de la plataforma Airbnb en el que la anfitriona de la casa le exigía pagar una tarifa extra de limpieza debido a los pelos de su perro que quedaron en la vivienda. Al investigar más a fondo, la joven descubrió que, a pesar de lo que le habían informado inicialmente, el apartamento no permitía mascotas.

La propiedad alquilada por Maddie era una casa de tres dormitorios, ubicada en Columbus, Ohio. "Odio Airbnb. Entregué la casa y recibí un mensaje de la anfitriona diciendo que debía cobrarme un cargo adicional por limpieza porque no se permiten mascotas", explicó ella a través de X (Twitter). "La publicación dice literalmente que se permiten mascotas. Incluso incluí a mi perro en la reserva", añadió indignada.

Tras su estancia, recibió el siguiente mensaje de la anfitriona: "Maddie, la persona encargada del mantenimiento me informó que llevabas una mascota. Esta casa no admite animales, y ahora será necesaria una limpieza adicional debido a la cantidad de pelo de mascota que quedó antes de la llegada del siguiente huésped. Necesito cobrarte un cargo extra por la limpieza", reclamaba la propietaria.

Este debate es más frecuente de los que parece, ya que no es la primera vez que distintos huéspedes indican que se les quiere cobrar un importe superior por su alojamiento, todo ello en concepto de limpieza. Sin embargo, la misma ya estaría incluida en el desglose de los gastos del apartamento.

Final feliz

Sin embargo, después de recibir numerosos comentarios en redes sociales, Maddie logró que se eliminara el cargo adicional y no tuvo que pagar más por su estancia. La joven consiguió este resultado tras demostrar que la publicación original indicaba que la casa era apta para mascotas. Posteriormente, se supo que el anuncio fue modificado días después de que Maddie realizara su reserva.

Las reacciones han sido diversas. Mientras algunos defendían a la propietaria, otros apoyaban a la inquilina. "Claramente no debería estar cobrándote. Algunas personas no saben cómo manejar un negocio, y a veces es necesario asumir ciertas tarifas si quieres reservas más largas", comentaba una usuaria de X(Twitter).