Pedro, este martes, tenía un plan: presentarse a la convocatoria extraordinaria de Selectividad (8, 9 y 10 de septiembre). Sin embargo, no podrá. O, más bien, no le dejan. El pasado viernes dio positivo por coronavirus y, al estar guardando cuarentena, le está prohibido presentarse y realizar el examen –y no le dan opción de hacerlo de otro modo, ya sea online o presencialmente apartado del resto de sus compañeros–. “Tiene derecho. No es justo. Lleva un año estudiando para pasar este examen”, se queja, con razón, su madre, Mariam, en conversación con EL ESPAÑOL.
Con las pruebas empezadas, Pedro ya no sabe qué hacer -aunque la Comunidad de Madrid, a última hora del lunes, ha pedido al gobierno que puedan hacer el examen online-. Su madre, Mariam, ha llamado a todas las autoridades competentes: ha hablado con el colegio y con el ministerio de Universidades; con la Comunidad de Madrid y con Sanidad. Sin embargo, a día de hoy, no tiene solución. “Después de pasarse la pelota unos a los otros, parece que van a intentar a hacer algo desde Universidades. Me acaba de llamar –minutos antes de hablar con este periódico– el secretario General del Ministerio para decirme que lo van a solucionar”, explica.
Pero, hasta que no lo vea… difícilmente lo va a creer. Lleva días luchando y, de momento, no ha conseguido que le den una solución. “Habíamos estado conviviendo con un familiar que dio positivo. Entonces, nos cambiamos de casa y nos hicimos los test. Yo di negativo –reconoce la madre– y él dio positivo. El viernes nos dimos cuenta. Desde entonces, estamos confinados”, cuenta Mariam.
Precisamente su madre, los días previos a obtener los resultados del test, ya empezó a preguntar a las autoridades competentes qué tenía que hacer su hijo si no podía hacer el examen de Selectividad. “Yo sabía que iba a dar positivo”. Su primera llamada fue al colegio. “Les informé y me dijeron que preguntara en Universidades”. Y eso hizo. “Me dijeron que no había ningún protocolo ni escenario previsto para estos casos y que mi hijo no podía hacer la Selectividad”, cuenta, enfadada.
Habló, entonces, con Sanidad, con Universidades –de nuevo– y con la Comunidad de Madrid. Mariam no se podía creer que nadie hubiera previsto un caso como el de su hijo; no podía entender cómo, por unas circunstancias absolutamente normales durante una pandemia, Pedro se iba a quedar sin hacer la Selectividad. O lo que es lo mismo, iba a perder un año de su vida.
Por eso, se puso manos a la obra: llamó a los periodistas para intentar que se conociese su historia. “Desde entonces, no paro: televisiones, radios, prensa...”. ¿Su objetivo? Presionar lo máximo posible. “Por lo visto, el caso de mi hijo es único. Pero no me lo creo. Estoy segura de que hay más estudiantes que están como Pedro”, esgrime.
Hacer lo correcto
Mariam no puede creer que vayan a ‘castigar’ a su hijo sin Selectividad por hacer lo correcto. “Cuando supe el positivo, nos pusimos en cuarentena. Podríamos no haberlo hecho, pero decidimos seguir las instrucciones de Sanidad para no poner en peligro a más gente: empresas, estudiantes… ¡La gente muere por esto!”, explica, enfadada.
No puede creerse que su hijo vaya a tener tan mala suerte. Suspendió en julio por "bastante poco" y, ahora, después de pasar todo el verano estudiando para aprobar Selectividad, da positivo pocos días antes de la prueba. “Ahora empiezo a ver la luz después de la llamada del secretario general de Universidades, pero estoy muy preocupada”, prosigue.
Mariam espera que, finalmente, desde el ministerio le den una solución, ya sea hacer el examen online o presencialmente tras pasar la cuarentena. Es en lo único que piensa. El esfuerzo de su hijo, en los últimos días, ha sido titánico, estudiando mientras pasa el coronavirus. Por eso espera que, tras hablar con todo el que se ha interesado por denunciar su caso, Pedro pueda hacer el examen e ir a la universidad.
¿Dónde? Eso Pedro todavía no lo sabe. Está entre estudiar Periodismo, Derecho… No lo piensa. Lo único que quiere es que le dejen hacer el examen. De hecho, no tiene otra opción. No tiene plan si no puede presentarse a la Selectividad. “No es justo. Un profesor puede cogerse una baja por Covid y sigue cobrando. ¿Y un estudiante no puede no hacer un examen porque está malo? Y, sobre todo, la Selectividad, que es crucial para todos”, finiquita Mariam.
Mientras, Pedro estudia y espera que lleguen buenas noticias desde el ministerio de Universidades. De lo contrario, reclamará. Sabe que no es justo que, por una enfermedad, en el día señalado, se quede fuera y tenga que esperar un año para poder seguir estudiando.